George Orwell: «En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario».
domingo, 29 de septiembre de 2013
Romance de Mariano "el Trolas"
Andaba Mariano "el Trolas"
perdido en un sinvivir
conjugando bola a bola
tiempos del verbo mentir
En cuanto se despertaba
y antes de pisar el suelo
Mariano ya pracatiba
con la caña y el anzuelo
el modo más conveniente
de convertir el camelo
en profesión floreciente
y en hacer que cada sapo
al pobre contribuyente
pareciese un caramelo
Y mintió como bellaco
hasta que el poder pilló
lo mismo que el tío del saco
carambolas se inventó
al paro llamó relax
y al subsidio despilfarro
al recorte en sanidad
le dio por llamar copago
siendo con recochineo
un repago demencial;
a la escuela abandonada
ni siquiera la nombró
si ya se la había cargado
¿para qué la iba a citar?
Firmó leyes de vergüenza
donde sólo eran delito
los crímenes que consisten
en el robo de un triciclo
o un monedero en precario
pero con la diferencia
de que al que pillen robando
un lote de preferentes
sólo sea un financiero
que ha tenido mala suerte
y se ha fundido la pasta
en un banco mequetrefe
pero sin mala intención
y por eso se merece
que las leyes le deparen
empatía y comprensión
Y cuando los diputados
que no eran de su partido
preguntaban mosqueados
por los dineros perdidos
por tesoreros malvados
cínicos y pervertidos
Mariano se escaqueaba
y cambiaba de argumento
o se transmutaba en plasma
con sus eshes sholapadas
y shu cara de cemento
Cuando la gente insistió
en exigirle respuestas
y ni la ley del chanchullo
conseguía mantener
las apariencias del pufo
Mariano se evaporó
e imitando a Zapatero
el enemigo envidiado
y además de combatido,
con calumnias y gazapos
hasta vilmente copiado,
Mariano voló y voló
como un buitre desnortado
primero hasta Nueva York
y luego a Kazajistán
con tal de no responder
al vicio de preguntar
que tiene ese parlamento
que lo lleva a maltraer
con tanta curiosidad
malsana y sin fundamento
Y además de remedar
en clave chiquilicuatre
a su odiado antecesor
quiso emular al monarca
que si le pega el puntazo
se va de caza mayor
cuando peor está España
y así se quita del medio
por no tener que dar cuenta
de tanta vulgar patraña
cuando la peña se empeña
en preguntarle con saña
por los sobres y prebendas
que el tesorero rebaña
y que el ppartido approvecha
y que Mariano el trolero
en diferido simula
creyendo que la distancia
se convierte en el olvido
y los chanchullos anula
y que si vuelve con gloria
de las andanzas viajeras
contando los exitazos
que ha tenido en sus hazañas
aquí no ha pasado nada
y un alzehimer general
se ha cargado la memoria
de ese disco duro y negro
del desastre nacional
que aunque lo quieran borrar
cual computer barcenero,
indeleble quedará
hasta que Mariano el trolas
confiese la turbiedad
de tanto enjuague ppero
Ni el jabón que da la prensa
poniéndole junto a Obama
ni el ajatolah de Irán
ni los negocios redondos
que serán para el pp
el show de Kazajistán
conseguirán que en España
se dejen de preguntar
por qué Mariano nos miente
y no se quiere enmendar
Si Mariano no responde
y las mentiras fermentan
cual levadura potente
y la Justicia le ampara
y el partido le defiende
España se tira al monte
y maldice al presidente
que miente y luego se esconde
igual que un adolescente
Para gobernar países
no valen los indecentes
ni los tontos obcecados
sólo por cuentas corrientes
con un master de bandido
ni los pijos adobados
en salsa de preferentes
y dineros evadidos
Ni un trolero incompetente
ni un torpe ni un corrompido
debe ser el presidente
de gobierno y de partido
Su sitio está en el juzgado
y sentado en el banquillo
confesando la verdad
devolviendo lo que mangado
con total impunidad
y ponerse a trabajar
con un contrato basura
cuyo sueldo en diferido
no le llegue a fin de mes
y su morro simulado
se termine de una vez
y que sepa lo que es
y el castigo que merece
tener tanta caradura
como bufón presidente
o pantomima de juez
No se sabe qué es peor
si un presidente comprando
sin vergüenza y sin pudor
o un juez como vendedor
de su dignidad y su rango
Si por robar a destajo
y mantener el poder
hay que caer tan abajo
ni el poder vale la pena
ni el botín tanto trabajo
Una justicia tan puerca
un monarca lamentable
un presidente tan cutre
un congreso y un senado
como meras parihuelas
de un Estado impresentable
donde todo se nos pudre
no valen lo que nos cuestan
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