sábado, 29 de enero de 2011

Berlusconi, ese innovador tan maltratado

Pobre Berlusconi. Siempre tan incomprendido por esa justicia obstinada en buscarle tres pies al gato. Leo en La Repubblica una lista de los regalos millonarios que ha ido haciendo en los dos últimos años a cada jovenzuela de buen ver, buen palpar y mejor disponer. Y luego una manifestación de mujeres italianas incapaces de entender la generosa vocación de ese prócer de la protección a las débiles y desampardas macizas, a las que busca con la intención pedagógica y benefactora de premiarlas por haber aprendido con rapidez y eficacia a potenciar la capacidad de invertir con habilidad su punto de asiento corporal. Sus posaderas y demás zonas anatómicas ad hoc. Como proclama sin cortarse un pelo, la sobrina literalmente putativa de Mubarak. Ruby, twesday, monday y toda la week al completo. Solo ante el peligro, defendiéndose como Gladiator, como gato panza arriba, irrumpiendo teléfono en ristre en los programas de la única cadena de televisión a la que sus tentáculos no han podido aún domesticoar comme il faut. Es que no se dejan, caray! Rebeldes y desagradecidos. Él, el único, el perfecto, el mejor, empeñado en educar al mujerío desarrapado y recordarle cual es la función femenina que más las dignifica y como él lo sabe asimilar y premiar adecuadamente. Es que no tienen perdón. Si él sólo está empeñado en su revoluicionaria ONG orientadora y colocadora, que evita la prostitución callejera y la dignifica elevándola a la categoría de cargo político, administrativo, económico y social. Que saca al puterío de las cloacas y lo entroniza en los palacios, en las televisiones, en los ministerios y en los escaños parlamentarios, en las discográficas y en los escenarios. ¿Cuándo un jefe de gobierno ha llegado a gobernar con tal dedicación y entrega de sí mismo? ¿Cuántos políticos dedican sus noches en vela a desgastarse en la promoción profesional de tantas desagradecidas cotillas y traidoras, que van apuntando en sus agendas las donaciones , haciendo comentarios telefónicos vejatorios, mientras él no se tiene en pie y se derrumba exahusto y flácido, en el parlamento, sin poder controlar esos párpados que se cierran solos, esa cabeza que se escora hacia delante y el casi ronquido que delantan su dedicación a tiempo completo a esa última obra de misericordia que los catecismos inhumanamente han olvidado: mantener, orientar y colocar a las putas menores de edad, adiestrándolas en bungabungalogía, ciencia experimental y empírica tan útil y provechosa?
Ay, Berlusconi, hijo mío, eres un hombre maltratado por la ignorancia, el olvido y el desagradecimiento. Parece mentira que haya todavía en tu pais gentuza que te vitupera y trata de humillarte. Hipócritas que salen a gritar contra ti, mientras hacen videos, anuncios y musiquitas alabando la prostitucion y el lolitismo. Sacando pasta de esa degradación que tú reciclas y estás convirtiendo en carrera universitaria y masters class. Mientras ellos se forran ensalzando la miseria, tú te desprendes de tus dineros para reformarla y hacerla una de las profesiones más dignas y rentables. Sobre todo rentables.
Si es que tienes razón, Berlusca, en el fondo, no te merecen. Así que ¿por qué no les privas de tu grandeza y te vas y los abandonas a su suerte? Olvídales. Y vete para siempre a una de esas islas que has comprado. Aprende a tocar el ukelele o el ukefede, y con un coro de bayaderas reformadas por tu celo educativo, pasa en paz y juerga constante los últimos días de tu Pompeya particular.
Pero eso, si, primero, paga a esa plebe desagradecida y gritona lo que tú ya no necesitas para nada. Lo que ya más bien, te molesta y te incordia. La pamema de la dignidad, la cretinada de la vergüenza, la ridiculez del pudor. La ñoñería de la honestidad y la cursilada del respeto a uno mismo y los otros. Total, tu nunca has necesitado esas naderías, ¿qué más te da? Castígales con el abandono y la ausencia, pero antes, dáles lo que se merecen, porfa.

domingo, 23 de enero de 2011

Palabra de honor

Hoy he leído un artículo precioso de Roberto Saviano sobre el poder de la palabra, una parte de su interesante discurso me ha gustado especialmente: no tiene tanto valor en sí lo que se dice, como la importancia de la escucha. Y es cierto. De nada vale hablar o escribir maravillas si no hay al otro lado del mensaje, alguien que las descodifique y las comprenda. Conocí a un poeta que decía:"Ojalá nadie fuese capaz de entender mis versos". Como hipérbole del infantilismo narcisista tan frecuente en el carácter egocéntrico del artista amanuense, que aún no ha crecido, se puede admitir. Pero desde la óptica del poeta maduro, pulido y crecedor, del escritor despierto, del artista en sazón, es un absurdo, darse los mensajes uno mismo. Crear para sí mismo y para la claque que te aplaude, que son los clones de tu vanidad. No. No es por ahí. El poeta, el escritor, el artista, el místico, el obrero del espíritu y orfebre de la materia, tiene como función evolutiva trabajar para despertarse despertando y para despertar mientras se despierta. No es un elemento aislado, un altavoz ni un micrófono inerte. Es simplemente parte del mismo proceso de comunicación interactiva.
La palabra no vale nada si no se escucha y no se siembra en la conciencia. Ahora mismo el mercado está invadido y saturado de palabras. Montones de libros se imprimen cada mes. Páginas y páginas que dicen cosas pocas veces dignas de perdurar. Las noticias, leídas, habladas, filmadas, son la condensación de la palabra, pero igual que el agua condensada en las nubes, puede producir lluvias benéficas, aguaceros, tempestades y tormentas secas. Depende de como la tierra "escuche" y beba la sustancia caída del cielo. Si ese agua abundante cae en cauces y torrenteras naturales en los que se ha construído, o en bosques arrasados por el fuego provocado por la irresponsabilidad, lo normal es la inundación catastrófica. Lo mismo que si llena una presa sin capacidad para drenarse. Es la tierra, es la conciencia humana la gestora de esa lluvia, de ese caudal que da la vida. Por eso debe escuchar y absorber la mejor cualidad de cada gota. Entonces esa lluvia hace germinar la vida en el interior. Y luego brotará, crecerá y dará fruto.

Cuando leo a seres de esta categoría, como R. Saviano, me empapo de su lluvia, de su palabra, de su capacidad para soñar una realidad posible que se hará real con el empeño y el trabajo de todos, mientras nos vamos despertando. Seres capaces de vivir profundamente el presente mientras ponen las bases del futuro. Seres capaces de arriesgar hasta la vida, como tantos otros que han sido masacrados por denunciar la injusticia y clavar la flecha de la palabra en el centro de la diana del absurdo. Agradezco infinitamente su sacrificio, su esfuerzo diario por no rendirse, por no ceder a la tentación de la comodidad, de lo superficial, del juego idiota que entretiene lo mejor de cada uno en bagatelas y necedades, en distracciones huecas y pretendidamente intelectuales, asépticas y distantes de una realidad que de verdad no se puede obviar. Al fin y al cabo, ¿ acaso sirve de algo el análisis y la crítica, cuando se es cómplice de aquello que se pretende "denunciar"? La escucha se produce cuando el mensajero merece respeto y atención. Cuando su vida es un paradigma de aquello que proclaman sus palabras. La coherencia.
Muchos católicos se preguntan por qué su religión ha perdido credibilidad en la sociedad y por qué nadie se toma en serio al papa y sus discursos. Pues porque no es creíble, porque lo que predica no se cumple, porque ¿cómo se puede condenar la homosexualidad con una corte de pederastas besándole la mano y hablar de la pobreza evangélica viviendo en un palacio alucinante y habiendo convertido el legado de un proscrito, ajusticiado por el poder, en la base política de un estado poderoso y riquísimo? Por eso esas palabras nunca dan fruto, son estériles y están muertas, porque están separadas de la vida y de su función creadora. ¿Por qué la antigua palabra de Jesús movió el mundo y revolucionó la sociedad si los evangelios se escribieron después de muchísimos años de estarse haciendo realidad diaria? Por esa misma razón. Primero fueron palabra escuchada, acogida, realizada. Después se escribieron, porque se pidió que así fuese, tal vez cuando la palabra empezó a petrificarse como la herencia del pescador galileo.

El mundo que vivimos está saturado de palabrería y de ruido, pero carece del conocimiento de la Palabra y por lo tanto de capacidad para acogerla. Oye, pero no escucha. Lee pero no entiende. Estudia y lo que aprende, lo aplica al revés, le hablan de la iluminación y se compra una lámpara halógena último modelo, le sugieren limpieza y se compra una lavadora y un aspirador, o se mete en un spa cada semana. Le hablan de tantra y se vuelve sexópata. Le hablan de estados profundos de conciencia y se coloca con drogas a ver si así llega antes y se monta un quiosco informativo y expendedor. Escribe, grita y habla, pero ha perdido el sentido y no sabe por qué lo hace ni el contenido real de lo que oye, escribe o dice. Simplemente, el mundo no es aún nada serio para tener en cuenta. Sino un carrusel enloquecido que sólo provoca aturdimiento y dispersión. Y lo más grave es que ese deterioro es su negocio principal. Se nutre y se envenena con él. Y además, si alguien lúcido y sin miedo se atreve, como en el cuento, a señalar que el rey está en cueros paseando entre la multitud idiotizada, se le convierte en sospechoso, en terrorista mediático, en una incomodidad social, que provoca el mal hábito de la reflexión y el análisis honesto. La posibilidad de alcanzar un verdadero camino de desarrollo integral.

Pueden suceder dos cosas: O un cambio profundo de conciencia, que sería la mejor aportación de la crisis actual, o un agotamiento pleno de lo que hay. Un acabamiento. Una putrefacción que dé lugar al nacimiento de otro campo biológico y energético, en el que sólo perdurará aquello que, darwinianamente, es benéfico y positivo para la evolución del conjunto y del individuo. Sólo aquello que tiene la verdadera inteligencia de evolucionar cooperando, tiene la vida a su favor. Y no se olvide que esa evolución es ya consciente, no sólo mecánica. Que ya lleva impresa, cuánticamente, una vibración ética superior que crece con la especie. El universo es el desarrollo atemporal de las realidades temporales intencionales, filtradas por la conciencia naciente en cada escalón evolutivo. La medida son la leyes inamovibles que ya hemos oído y leído tantas veces, pero ignorado absolutamente en su aplicación práctica. Confundido con credos y religiones, con formas de comportamiento separadas de la vida, precisamente por la manipulación y la noescucha, de la palabra.
En ello andan nuestros Roberto Saviano, Michael Moore, Baltasar Garzón, Nelson Mandela, Gorbachov y tantos y tantas, que siguen trabajando sin cansarse por la causa del hombre y su preciosa historia en busca de sí mismo y de su trascendencia natural.

El poder de la palabra radica siempre en la inteligencia de quien la escucha, como el poder de una carta no lo tiene el cartero ni siquiera el escritor, sino la mano que abre el sobre y el alma inteligente, la conciencia, del lector que la recibe, la comprende y la convierte en vida.


viernes, 14 de enero de 2011

Una espléndida noticia

Hoy tenemos una noticia estupenda en el diario "Público". Los poetas se visten de domingo con el permiso de un periódico sencillo y con ganas de cambiar el rostro opaco de un país cansado de ser el banco de pruebas del desaliento, sin que se haya conseguido todavía hundirlo.

La poesía es la respiración del alma, tanto de la individual como de la colectiva. Por eso los poetas son siempre peligrosos para el poder. Tal vez porque el único poeta que ha llegado a mandar algo, el Rey David, fue invencible y feliz. Musicó la vida en verso y notas. Despertó a las musas de su aburrimiento aúlico. Cantó y enriqueció la historia en vez contarla a palo seco. Vivió hasta el fondo su humanidad, la retransmitió en estrofas susurradas, gritadas o silenciosas y la imprimió en el magma del inconsciente colectivo. David es el primer cantautor, que se sepa. Inauguró el testimonio poético, la contaminación de lo sublime con lo insignificante, de lo anónimo con el infinito. La destilación de la debilidad personal, con el beso apasionado de la plenitud y la caricia delicada de la belleza en busca de una eternidad entrevista. Soñada y vivida en un anticipo revolucionario. Inició la poesía de la experiencia, a la que en este tiempo se han apuntado bastanates poetas, por ejemplo, Gª Montero y ese Joaquín salsero y universal. Ese Sabina cotidianamente lírico, que jamás ha caído en la tentación del pacto oscuro con el aburrimiento.
Será un verdadero lujo bucear cada domingo en sus dos mares sugerentes y lúcidos. Pasar del uno al otro a través del estrecho de la hermosura.
Queridos poetas, sed bienvenidos, a dúo, a ese espacio de hambre y de sed con que os saluda el anonimato, que ya espera impaciente vuestras cadencias unidas para ir construyendo la casa madre de la esperanza y el buen amor para el camino. Para compartir con vosotros un trago semanal del vino de la conciencia. De la creación y el sentido de lo real hecho palabra. Como la luz o el amor toman cuerpo en cada pensamiento capaz de arrancar la mugre de las ollas del tiempo y el desgaste.
Será un placer compartir con vosotros un trozo de domingo que estrene traje cada semana.

martes, 4 de enero de 2011

Crónica urbana

Lo juro por Snoopy. Me hubiese encantado contemplar el eclipse. Pero nada. Esta Luna satelital que nos gira alrededor no sabe ser puntual, ni eclipsar como Dios manda. No es seria. Se ve que con los cambios cósmicos ha perdido facultades eclipsatorias y ya le da lo mismo ocho que ochenta.
De buena mañana los vecinos de mi barrio nos habíamos concentrado en la plaza central. Los niños llenos de curiosidad se habían hecho tantas ilusiones animados por el fenómeno tan anunciado en EuroNews y en los periódicos gratuitos que reparten en la puerta de super. Un eclipse. Qué emoción -decían enfundados en los gorros y bufandas que trataban de evitar el frío de la mañana recién estrenada, de un cuatro de enero casi víspera de Reyes-. La primera media hora de espera se ha ido alargando. Los cristales ahumados para contemplar el espectáculo celeste estaban preparados y listos. Los murmullos de la voces infantiles, también. "Mira, Yago, parece que ya está a punto de...", "Ah, no, es sólo una nube que pasa". "Ahora, ahora!", "Ay que rabia, era la sombra de un pájaro". "Allí, allí, en el medio del sol!" , "Nada, era un avión...". Las ocho, las ocho y diez, las ocho y media, las nueve menos cuarto, las nueve y veinte, las diez menos diez..."En fin , chicos, otra vez será". "Mami, ¿Por qué las noticias siempre mienten?", "No, hijo mío, ¿qué dices? Las noticias no mienten nunca, siempre nos informan de lo que está pasando y de lo que va a pasar. Nos mantienen en comunicación con la actualidad". "Pues no lo parece. Ayer mismo, cuando llamaste a Valparaíso para preguntar por lo del terremoto, el abuelo te dijo que de qué estabas hablando, que allí no había temblado nada y tú insistiendo en que habías visto imágenes horribles", "Bueno, eso pudo ser un error que se les colase en las imágenes, le puede pasar a cualquiera." "Ya, ¿y entonces si no mienten, dónde está el eclipse?", "Por Dios, hijo, qué pesado eres. ¿Y yo qué sé donde estará? Seguramente habrá sido la Luna la que ha fallado y no le hadado la gana de eclipsar. Porque las noticias no se equivocan nunca. Que te quede muy claro. Si ya empezamos desde chicos a dudar de todo, vamos frescos. Hay que tener fe y confianza..." "Pero mami, ¿en qué, en Dios?" "No, Yago, no, fe en las noticias, que Dios no tiene nada que ver con lo que pasa por aquí". "Qué mundo más raro, ¿no? No hay quien se aclare. A ver, tú me has dicho que vaya a catequesis porque tengo que hacer la comunión, allí me dicen que Dios es el creador de todo y que hay que tener fe en Él y ahora tú, que me mandas a la catequesis, me dices que a Dios le importa un rábano lo que pasa en su creación y que la fe hay que tenerla en las noticias. No entiendo nada, mami" "Es que yo no te mando a la catequesis para que me des la tabarra con tus preguntitas, sino para poder hacer la fiesta de tu comunión en mayo. ¿No quieres que vengan los primos de Valladolid ni que te regalemos un ordenador nuevo, una cámara digital, un Ipod y más juegos para la play?" "Sí, claro. Pero además me hubiese gustado ver el eclipse y que las noticias no mientan". "Ay, hijo, es que lo quieres todo. Por pedir, hasta pides la Luna" "¿Qué menos se puede pedir en un eclipse, mami? "Hum, es cierto. Es que a los chiquillos no se os escapa ni un detalle. Sois tremendos. ¿Quieres un cholek y un donuts mientras me tomo un café y me fumo un ...nada. Ya han prohibido el tabaco en todas partes." "Pero mami, no te das cuenta que a lo mejor la Luna puede estar en huelga porque dando vueltas alrededor de la Tierra se ha cansado de tragar humo?" "Anda, pues no había caído. A lo mejor es por eso por lo que no ha querido eclipsar. Haremos caso a las noticias y dejaremos el tabaco antes de que el Gobierno nos multe por fumar". No multan por fumar, mami, sino por ensuciar el aire que respiran los demás". "Mira bonito, anda, eclípsate un rato, ¿vale? "

sábado, 1 de enero de 2011

Un ERE muy particular

Expediente regulador de empleo en el Portal de Belén

Este año quiero empezar pronto y mañana voy empezar a poner el belén
en mi casa, y, como estoy en crisis, antes de hacerlo he decidido
llamar a uno de estos consultores para que me asesore sobre como
rentabilizar al máximo el tradicional nacimiento. El resultado ha sido
sorprendente, y por eso os lo quiero comentar:


Pastores. Para nadie es un secreto que en todos los belenes hay más
pastores que ovejas, parece absurdo, pero siempre ha sido así. Por
supuesto me veo obligado a deshacerme de todos, menos uno.
Instalaremos pastores eléctricos (cercas electrificadas) con el fin de
controlar a las ovejas, y, una vez instalado, se plantea la
posibilidad de sustituir, en breve, al pastor por un perro con
experiencia.

Personajes gremiales. Es sorprendente la cantidad de artesanos que
puede haber en un belén: el herrero, el panadero, el de la leña, el
carpintero (haciendo una desleal competencia a San José que se ha
cogido baja paternal), el tendero,... y sin embargo es, también,
sorprendente ver los pocos clientes que hay. La decisión que hemos
tomado es despedir a todos los artesanos, es duro, pero no ha quedado
otro remedio. En su lugar hemos contratado a un chino, que en un
pequeño comercio fabricará y venderá todos los objetos que vendían los
artesanos. (Si el chino decide subcontratar 15 menores para sacar el
trabajo es un tema en el que no nos debemos meter).

Posadero.El chino se hará cargo también de la posada. Además,
últimamente habían llegado quejas de atención al cliente por parte de
José y María. La posada podría funcionar con el sistema de cama
caliente.

Lavanderas. Que manía tienen en los belenes con lavar la ropa, con lo
fría que debe estar el agua, con tanta nieve. Se suprimen los trabajos
de lavanderas, que además eran ocupados siempre por mujeres. Cada uno
se lavará su ropa en los ratos libres, potenciando así la equiparación
de sexos en cuestión de tareas domésticas.


Ángel anunciador. Suprimidos casi todos los pastores, no tiene sentido
la figura de un ángel anunciador. Se sustituye por un anuncio
luminoso, en donde además podremos anunciar las ofertas del chino.


Castillo de Herodes. A Herodes le mantengo en su puesto, no es que
haga mucho, pero manda, y no es cuestión de ponerse a despedir
directivos. Soldados, me quedo con dos por razones de seguridad, (que
bastante calentita está la zona) pero los externalizo. Los contrataré
por medio de Prosegur Castillos, para que me presten servicio como
guardas de seguridad. Ahorro en costes fijos y gano en flexibilidad.


Paseantes varios. Es sorprendente ver la cantidad de personajes que
abundan en un belén sin hacer nada, absolutamente nada. Todos
despedidos. Esto lo teníamos que haber hecho hace tiempo.


Paseantes con obsequios. He observado que otro grupo de paseantes,
algo menos ociosos, pero no mucho más productivos, se dirige hacia el
portal con la más variada cantidad de objetos. Uno con una gallina,
otro con una oveja, otro con una cesta, otro con un hatillo (¿qué
llevará el misterioso personaje del hatillo?),...

Puesto que todos tienen el mismo destino, organizaremos un servicio de
logística, para rentabilizar el proceso. Despediremos a todos los
paseantes, uno de ellos se quedará con nosotros por medio de ETT y con
ayuda de un animal de carga recogerá las viandas cada tres días y las
acercará al portal.


Reyes Magos. Por supuesto con un solo rey es más que suficiente, para
llevar el oro, el incienso y la mirra. Eliminamos dos reyes, dos
camellos y los pajes. Posiblemente nos quedemos con el rey negro para
no ser acusados de racistas, además es posible que quiera trabajar sin
que le demos de alta. Tengo que estudiar, también, la posibilidad de
dejar tan solo el incienso y vender el oro y la mirra a otra compañía,
ya que debemos de reducir al máximo la inversión en regalos de
empresa.


Mula y Buey. La única función de estos animales es dar calor. Esta
función será desempeñada por una hoguera, que gasta menos combustible.
Realizaremos un assessment center con los dos animales, y el que lo
superé trabajará como animal de carga en el servicio de logística
antes citado.


San José y la Virgen María. Está más que demostrado que el trabajo que
hacen ambos en el portal puede ser desempeñado por una sola persona, y
evitamos dos bajas de maternidad/paternidad. Por razones de paridad
nos quedamos con la Virgen María y, lamentablemente, tenemos que
despedir a San José (con lo que había tragado el hombre en esta
empresa).


El niño Jesús. A pesar de su juventud tiene mucho potencial, y además
parece ser que su padre es un pez gordo. Le mantenemos como becario
con un sueldo de mierda, hasta que demuestre su valía.


El Belén queda pues de la siguiente forma: Un pastor, con ovejas en un
cercado, un chino con un comercio/posada de 24 horas, Herodes y dos
guardas subcontratados, un paseante,por ETT, con la mula (o el buey)
haciendo repartos, el rey negro (ilegal), la virgen y el niño.

Va a ser mas soso que otros años, pero me he ahorrado una pasta….

Año nuevo... ¿de verdad?

Cada fin de año el ritual del acabamiento y del comienzo me trae una reflexión parecida: El engaño necesario del rito. Unas preguntas sin contestar. ¿Qué urgencia rutinaria tiene el género humano de celebrar principios y finales totalmente virtuales? ¿Qué nos separa de ayer? ¿Qué aspectos han cambiado radicalmente o sutilmente al sustituir el cero por el uno o la tiniebla nocturna de anoche por la luz esplendorosa de esta mañana, como nos sucede cada día? ¿Por qué nos pasamos la vida sometidos a los plazos que vamos creando en cada cultura? Creo que amo la vida nómada porque no se somete con tanta facilidad a la convención pactada de divertirse por obligación, de hacer compras compulsivas "porque toca"o de amontonarse en la Puerta del Sol para engullir uvas a toda pastilla mientras un cómico o un guaperas, junto a la presentadora más glamurosa del momento se balancean en los tópicos de cada año, hacen idénticas afirmaciones y calcadas negaciones, iguales memorias tópicas. Ni siquiera los personajes saben romper la inercia del absurdo ritual del rebaño convocado al olor del mazapán y del cava, del matasuegras y de la borrachera mediática. Ni siquiera aflora la espontaneidad de un programa en directo. Todo está enlatado y frío al calor esteriotipado del micro-ondas de la pantalla. No queda un sólo hueco para la expresión de la vida en directo. Grupos musicales y cantantes envueltos en la naftalina de una nostalgia calculadísima y ramplona. No hay un verdugo más cruel que la imagen envasada al vacío del contenido. Festivales y concursos del año de la pera. Divas pintarrajeadas y con unos peinados como el de la Winehause o de Madonna, vestimentas, patillas y melenas masculinas, absolutamente patéticas se mezclan con ese otro patetismo exhibicionista de hoy. Cambian los nombres pero debajo no cambia nada. Todos son la misma marioneta danzando en el mismo escenario. Fantasmas sin dirección. Suspendidos en ese noespacio de ondas paralelas o digitales y terrestres. Da igual que la tecnología trate de perfeccionar y refinar los métodos de transmisión cuando la base transmitible sigue en la brecha del pleistoceno, nutriendo emociones corrosivas e inútiles. Desgastantes en su curso devastador, en su superficialidad repetitiva.
Y sin embargo queda un vínculo que sigue vibrando en el aire. La música. Aún se puede enlazar algo de frescura en lo rancio si te aparece el tembleque de Serrat cantando que hoy puede ser un gran día, siempre único, que quizás sea el último que te toque vivir. Y que por eso mismo vale la pena vivirlo por completo. Menos mal. O Juan Luis Guerra te regala una bendición con la sonrisa de los niños de su pueblo a los que dedica una parte importante de lo que gana cantando. O Ricky Martin que ventila su casa y les cuenta a sus hijos que tienen un padre gay que ya se ha cansado de mentir entre rubias explosivas que le importan un rábano. Y que educa en valores de verdad y mucho más y mejor, un padre valiente que deshace mentiras, más decente que un padre muy macho en apariencia que vive tapando su verdad y enseñándoles a mentir.
Un mezcladillo siempre igual del que se puede aprender a distinguir qué te importa o qué no significa nada. Al menos para ti. Que cada uno lo agarre como pueda. Lo tome como mejor le cuadre.

Personalmente me quedo con Vivaldi, que a eso del medio día me cuenta sus historias sin tiempo. Y me deja en el alma un montón de respuestas sin que le haya formulado ninguna pregunta. Será la magia de las notas. O el suspiro cadencioso de la eternidad que se disfraza de año nuevo para no contradecir los sueños limitados y dejarlos irse. Y que así brille la evidencia del infinito.