viernes, 20 de septiembre de 2013

Los que saben, saben y hacen prosperar su país mientras ellos viven de maravilla y los que no, son españoles del pp



Una oveja pace junto a una central solar cerca de Karlsruhe. / K. P. (REUTERS)

Lo verde es negocio en Alemania

Las empresas vinculadas a la ‘economía limpia’ aportan el 11% del PIB, mientras Los Verdes gobiernan en Baden-Württemberg.
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Es la diferencia entre el Paleolítico y el Neolítico. Mientras en España impera sine die el hacha de sílex y la punta de lanza, y se experimenta con el fuego  sin saber todavía como se controla, viviendo al abrigo de las burbujas cavernarias y energético-trincadoras, de las que los jefes del clan del trueque se ponen las botas y expulsan a los habitantes que no pueden pagarles con la cantidad de lonchas de diplodocus que les exigen, va y resulta que al Norte existen unas tribus que ya dominan el arte de la agricultura y son capaces de vivir en casas independientes mucho más confortables, que han aprendido también que el arte del bien común es el más rentable y próspero de todos y que ayudándose mutuamente, con una educación de altura en valores de ética práctica, han conseguido que todos tengan un techo digno sin tener que cazar diplodocus a destajo para eniquecer escandalosamente a nadie y esquilmando especies, todos pagan con su trabajo que a su vez les da lo suficiente para vivir con dignidad. En vez de estar enfurruñados con el sol y el viento porque les molestan, se han hechos sus amigos y obtienen gratis la energía para vivir como reyes y no como pelagatos. Partiendo de esa inteligencia organizativa primordial que al parecer les distingue de los paleolíticos del Sur, se han montado un sistema de intercambios sociales que es la envidia de los neanderthales del hacha y la gaviota. Pero éstos se quedan sólo en el asombro y en la envidia del " y tú mash, jopé, ¿por qué será?" o del "anda, payo, dame argo pa que podamos ir invirtiendo en olimpiadas bufash o en sobreshueldosh y me lo camuflas en el recibo de reshcate independiente para la banca"...en fin, resultados son amores y no buenos sermones. Esh lo que tenemosh por abstención de la mayoría en las urnas. Esperemos que esta patética experiencia nos haya servido de escarmiento foreverandever y old weiss. Y que el alzehimer histórico no vuelva a hacer de las suyas. Ojalá.

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