Ppunto y final de un tiemppo horrible

Macondo era ya un pavoroso remolino de polvo y escombros centrifugados por la cólera del huracán bíblico, cuando Aureliano saltó once páginas  para no perder el tiempo en hechos demasiado  conocidos y empezó a descifrar el instante que estaba viviendo, descifrándolo a medida que lo vivía, profetizándose a sí  mismo en el acto de descifrar la última página de los pergaminos, como si se estuviera viendo en un espejo hablado. Entonces dio otro salto para anticiparse a las predicciones y averiguar la fecha y las circunstancias de su muerte. Sin embargo, antes de llegar al verso final ya había comprendido que no saldría jamás de ese cuarto, pues estaba previsto que la ciudad de los espejos (o los espejismos) sería arrasada por el viento y desterrada de la memoria de los hombres en el instante en que Aureliano Babilonia acabara de descifrar los pergaminos y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra.

Gabriel García Márquez. Cien Años de Soledad.  



                                                    

El párrafo final de esa gran metáfora que es "Cien Años de Soledad"me parece perfecto como descripción del final del pp, tal y como lo hemos conocido hasta ahora. 

Es impresionante haber visto en la misma puerta de mi casa, durante esta semana, cada día y sin parar, el desfile de imputados e implicados en el barrizal de la corrupción y el estupor de la prensa que no da abasto para relatar las crónicas y el trajín descolocante de la policía que tampoco da abasto para organizar tal desfile de delincuentes y cómplices. Concejales y concejalas en activo y en pasivo...Y aún comentan que esto es sólo el principio...

El pp es la familia Buendía de ese Macondo terminal, al que las lluvias y el fango sepultan en la profundidad de la descomposición putrefacta, que en la novela acaba cuando una tía que iba de hermana incestuosa y su sobrino, engendran un monstruo, símbolo de la degradación del árbol genealógico de la familia, que había comenzado como normal y tras una degradación in crescendo, acaba como una patología genética, a base de vivir contra natura y delirando grandezas absurdas.

Aquí está pasando lo mismo. Y mucho nos tememos que si la Justicia, el Jefe del Estado y lo que en el Parlamento quede de sano, no se plantan y colocan el imprescindible cordón sanitario, ilegalizando al pp sin más contemplaciones, su putrefacción puede acabar con la propia democracia. Esto sí que es golpismo de manual. Naturalmente, golpismo torpe, endógeno, ciego y completamente envilecido por la avaricia, por la mediocridad, el cinismo, la incultura profunda aunque 'ilustrada', como el despotismo, por los cromos de unos estudios jamás interiorizados y usados nada más que para medrar, por la hipocresía y el surrealismo de un psiquiátrico penitenciario, donde los delincuentes enloquecidos y ya descerebrados por las altísimas dosis constantes de ácido crematístico, se han apoderado de las instituciones por mayoría absoluta y las van liquidando una tras otra. 
El argumento podría ser también un estupendo relato de terror psicológico, al estilo de Ray Bradbury. 

P.D. Y ahora una pregunta. Si el rey anterior tuvo poder suficiente para hacer dimitir a Suárez solo porque deseaba una democracia decente y transparente en España y eso inquietaba a la oligarquía, sin que hubiese constancia ni pilladas con las manos en la masa corrupta de todo su partido a lo largo y lo ancho de una legislatura entera, como está siendo el caso Pp-Rajoy,...¿qué le impide al rey actual hacer dimitir al presidente en funciones que nunca ha funcionado de verdad, y que, además, de ser el testaferro más visible de la corrupción del Estado, se ha convertido un tapón institucional que está impidiendo y retrasando la actuación del Legislativo y la formación del Ejecutivo en un momento de crisis en España y en Europa? No se entiende nada. Que no haya una norma para regular tiempos y obligaciones, algo tan fácil como tener un plazo determinado para que quien presida el Ejecutivo saliente presente candidatura y si no lo hace, que dimita obligatoriamente y se vaya. Si un Jefe del Estado no tiene obligaciones como la de velar por la gobernabilidad de ese Estado y se dedica al toreo de salón, ¿para qué nos sirve? Para v ver figurines ya están el museo del Ejército y el Palacio Real.