martes, 15 de enero de 2013

Puñaladas traperas y selectivas en el Constitucional

Se supone que Cataluña todavía es tan España como Madrid, por eso no se entiende nada más que desde una estúpida política de rabieta visceral que el euro por receta se haya prohibido allí y respetado en Madrid. Un detalle más que revela el infantilismo y la poca pericia de las dos instituciones: el Tribunal Constitucional y el Gobierno central. 
En Madrid, como en Valencia, el gobierno autonómico funciona como una taifa meninfot, donde el sello Aguirre ha dejado en herencia la huella de la insumisión y de la inquina contra Rajoy. La desobediencia en plan motín insumiso, que cobra la euro-receta por que sí, ea. Y Moncloa que se atenga a lo que diga la Comunidad que le permite estar ahí, hale! El Constitucional no dice ni mu.

 Pero ay de ti Cataluña rebeldona y descontenta, que no eres del pp, porque Alicia Camacho ni pincha ni corta como lo hacen sus colegas chulapones en la capital del reino. Eso te pasa por ser tan tuya, tan civilizada, tan culta,  y tan libre. Ahora, te jodes, por ampliación del decreto Fabra. 
Es lo que piensa el pp y lo que pone en práctica sin pensarlo dos veces, ni una. Como casi todo. La ganadería brava ya se sabe como funciona. Puro instinto entrando al trapo; sin verlo, por cierto. Ya en los genes el ppero cacique lleva impreso el trapo rojo y embiste en cuanto lo huele o lo oye. Porque ver, lo que se dice, ver, el pp no. No es lo suyo. Lo suyo es la ONCE. No ver tres en un burro pero vender cada día con repago el cupón del desastre, a ver a quién le toca el premio del recorte, del embargo, del ERE, del tijeretazo y de la denuncia de repago si se te ocurre pedir justicia. O si quieres terminar un matrimonio desastroso. Gallardón no está por la labor. O sea, de acuerdo en todo con Andrea Fabra. Que te jodas. Aunque no seas catalán y no puedas reivindicar la independencia de tu pueblo, de tu comarca o de tu barrio. Parafraseando a Machado: 

Españolito que aguantas 
el tipo, te guarde Dios, 
un gobierno como éste 
ha de darte un bofetón. 
Pero si eres catalán, 
puedes llevarte hasta dos.

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