viernes, 24 de mayo de 2013

La noticioteca


Por fin una noticia decente:
Toni Cortés y Ani Valderrama, arreglando el piso concedido en Terrassa. / I. MARQUÈS

La PAH logra que CatalunyaCaixa aloje a 11 familias en pisos sociales

IVANNA VALLESPÍN Terrassa 7
El grupo ocupaba ilegalmente un bloque vacío en Terrassa de la entidad bancaria desde hacía un año y medio



El presidente de Bankia dice no entender el desplome de las acciones

José Ignacio Goirigolzarri aplaude que la CNMV investigue la caída de ayer, del 51%. Este viernes los títulos de la entidad suben un 11%

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El presidente de Bankia no puede entender lo inentendible. Los sistemas de máquinas de los que depende la información de las cotizaciones bursátiles están en manos de la locura y la delincuencia. De matrix. Es el mismo trust mafioso-financiero que se dio en llamar "agencias" de rating. A las que el gobierno de EEUU hace muy poco ha declarado delincuentes. Es el mismo cártel de los tres asesores económicos inexplicables por su incoherencia y su torpeza, que han asesorado y promovido la crisis mundial, aún teniendo enfrente a la flor y nata de los economistas y Premios Nobel que están alucinando al ver que sea posible hacer de la ruina de todos un sistema para salir de una crisis inventada. 
Es el mismo mecanismo "anónimo" e ilocalizable por medio de la lógica normal que sube por su cuenta los precios de la OPEP, sin que los propios miembros de esa organización sepan ni el motivo ni quién lo hace y es el mismo que ha des-organizado la red líquida, fluctuante y escurridiza de los paraísos fiscales. Es una trama delincuente que pasa por ser el bastión de la economía del mundo. Y que gracias a la tecnología que compra y controla hace lo que le da la gana. Es Al Capone convertido en mago negro por obra del descontrol y del aturdimiento. Es el timo del toco mocho elevado a gobierno mundial underground.

No funciona por inteligencia sino por astucia, pillería e instintos. Así que se puede dar el caso que hundir un negocio o un país se haga por una apuesta entre mafiosos, o por una revancha, por rencor infantil sin sentido, o porque alguien paga para que "parezca un accidente". A eso ha llegado la economía del mundo. Y como los agentes financieros y técnicos  profesionales ni se imaginan que eso sea posible, todo se convierte en un caos inexplicable. Una economía se sanea, un país se "rescata", invierte, saca bonos a la venta, esos bonos se compran, las acciones suben, pero resulta que un jerifalte político, por ejemplo, sale condenado en un juicio porque ha delinquido y no ha conseguido comprar a los jueces ni asustarlos con amenazas, o que una jerifalta económica de muchas campanillas  ha sido imputada por corrupción y al día siguiente las bolsas caen en picado sin que tenga nada que ver una cosa con otra. Sólo para "vengarse" y crear pánico que es muy lucrativo. La gente asustada, los políticos desconcertados y todo manga por hombro abre las puertas a la magia del negocio facilísimo: crear el problema para "vender" la solución. El chollo del milenio. 

Este estado de locura generalizada no tiene explicación desde la racionalidad, porque lo mueven las vísceras, los vicios secretos, los pactos oscuros e irracionales, la "omertá" de asociaciones para delinquir y lucrarse a todos los niveles, que aprovechan la miseria de los que no tienen nada y que por tener algo venderían a su madre y a su padre si eso les conviene y se les convence de que es muy rentable, (los bandidos sociales funcionan con la seguridad que todos tenemos un precio y sólo es cuestión de llegar al acuerdo en el que cada uno tiene situado el listón de la decencia) , por todo esto, esa plaga no la pueden controlar los números de la banca ni el mercado bursátil, porque la banca y la bolsa son el cebo principal del contubernio y del poder subterráneo que mueve el tinglado. Los técnicos especialistas no corrompidos no atinan a ver lo que hay, igual que los enfermos en el  hospital no pueden organizar el funcionamiento del mismo.  Todo depende de un modo extendido del hackerismo como "cultura". De la piratería como estatus. ¿Quiénes son lo piratas? Personajes incapaces de integrarse en un conjunto humano que funciona con normas. Desde chicos han hecho de su capa un sayo. Han crecido con el ordenador como familia, con el móvil  como mejor amigo, con el videojuego como maestro de vida en el que se les mezcla la mentira con el sueño y la realidad ni la ven. En sus vidas todo es virtual. También los afectos y la conducta, que no va emparejada con otra norma que no sea la cibernética. Si salen de ese círculo se pierden. No son nadie. Sólo un nickname. No tienen habilidades sociales ni han desarrollado ningún talento que supere el nº de gigas, las cifras en serie y adquirir un trabajo bien pagado que les permita pagarse a su vez todo un mundo de aparatos mecánicos que les consienta  continuar vegetando en la onda que conocen y obedecen. Esas entidades que han perdido el hilo de su humanidad se convierten en prototipo, en modelo y paradigma. Parecen humanos, pero son máquinas de carne y hueso. Por eso tienen precio y mercado. Los mafiosos millonarios lo saben e invierten en ellos. Son su ejército anónimo, sin vínculos afectivos y por eso muy proclive a la sociopatía y a la psicopatía, que ya hasta se ha infiltrado en los grupos solidarios de protesta, se les distingue por el lenguaje amenazante, vengativo, violento y porque nunca se comprometen a nada que no sea escondido, pomposo, ilusorio, fantasioso y ciber-manipulable. Nunca se  les ve en acciones  concretas donde haya que dar valientemente la cara, los datos y las razones.

 "Eso" es el motor que mueve el desastre constante. La gasolina que alimenta el caos, que es negocio para la mano invisible que controla los títeres emboscados en la nada. Les mezclan ideas justicieras e inalcanzables, sobre todo porque pegados a un teclado y a una pantalla sólo se mueven burbujas sin sustancia que suben hoy a la cumbre de millones de receptores y mañana nadie las recuerda. Mientras la vida sigue su curso al margen de lo ilusorio. Cada vez más dependientes, más aislados y más solos. Conectados a la actualidad y desconectados de sí mismos. Viven como si fuesen Neo y Trinity, dormidos y soñando que trepan por las paredes, a base de combinar la píldora azul con la roja, mientras no son capaces de mirar a la cara a nadie y le temen a la realidad diaria materializada más a que un tsunami. Porque no desarrollan el alma que crece junto al compromiso con la vida y nuestros semejantes. Y son robots deformes, porque un humano robotizado es un engendro monstruoso, sobre todo porque le resulta imposible descubrir lo que es y lo que no él mismo. Caldo de cultivo para las patologías de todo tipo

Ese estado de cosas sólo puede solucionarlo la clarividencia, la ética y el valor de los gobernantes (¡?), la justicia(+*), las leyes (¡?), la educación ininterrumpida en valores humanos y en convivencia, la psiquiatría forense (+) y la interpol (++). Y sobre todo el despertar psico-ético de los ciudadanos y la sociedad; si nadie se deja comprar por milongas podridas, por promesas de éxito y enriquecimiento fácil, por imperios cibernéticos imaginarios donde todo se reduce a inventarse vidas imposibles de sostener sin pantalla, modems y wifis de por medio, el corrupto poderoso no puede hacer nada solo y sin el apoyo "logístico" de una masa amorfa mecanizada que se compra y se vende por pánico, pecunia y peculio, poder o placer. Demasiadas "pes" para tan poca vergüenza y tanta picaresca ruinosa e insostenible.


Rodríguez Zapatero: “No saldrá de mi boca una crítica a Mariano Rajoy”.


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Zapatero entrevistado oficialmente por primera vez desde que se despidió por la puerta estrecha de la derrota. Buena entrevista a cargo de Luis del Olmo, aunque hemos echado en falta a Iñaki Gabilondo para redondear el horizonte y la amplitud del mismo.

Las respuestas muy políticas. Todas. Muy prudentes. Tanto, que recuerdan a las de Rajoy más que a las suyas. Zapatero está en todo su caballeroso derecho personal de no criticar a ningún ex-presidente, como Aznar, compañero de ex-fatigas. Por galante e interesado corporativismo que tiene suficiente elegancia como para no devolver la pelota a quien desde la oposición lo mejor que le dedicaba era su piropo calificándole de "tonto solemne". 
Es natural que haya decidido pasar el Rubicón entrevistador sin rozarse ni mancharse ni mojarse con la situación ciudadana. Zapatero nos guarda un oscuro rencor por la derrota del PSOE. Su negativa a comentar el desastre rajoyano no es sólo una caritativa renuncia a hacer leña del árbol tambaleante, seco y a punto de tala. Es su delicado y diplomático: "por mí os podéis pudrir. Con vuestros votos os habéis atado la soga al cuello y yo no voy denunciar al verdugo que habéis elegido democrátimente, dándole a mi partido, de paso, el patadón más grande de su historia y tirando por tierra la ley del aborto, la de la igualdad, la de la dependencia y la educación para la ciudadanía en una escuela laica, libre y gratuita, las energías renovables, la alianza de civilizaciones y el futuro de la juventud en diáspora. Que os den morcilla o botillo leonés, so desagradecidos, so bordes, hale!". A eso ha sonado la entrevista del ex-presidente. Caballeroso y desligado totalmente de esa ciudadanía a la que tanto invocaba en tiempos y por la que decía interesarse tantísimo. 

Don Jhoseluí acaba de demostrar una falta total de sensibilidad olvidando a todos los ciudadanos que pusieron su voto en las urnas para el PSOE y que son muchos a pesar del bajón; que están sufriendo la barbarie de una brutalidad sin precedentes, que están perdiendo empleo, subsidio, sanidad, escuela y casa. Presente y futuro. Ni una sola palabra de compasión, ni una sola idea para aportar. Sólo la indiferente esperanza imposible y aséptica de que "esta crisis pase pronto", como si fuese un resfriado, mientras él seguirá cobrando un sueldo vitalicio y la prebenda añadida por pertenecer al Consejo de Estado como ex-presidente. 
Dicen que en las crisis y en los problemas graves es donde se demuestra la verdadera condición de los seres humanos. Cuando ya no se trata de cultivar la imagen ni el glamour, ni de sacar beneficios, porque es ahí donde brota lo que de verdad hay por dentro. 
Y es impresionante comprobar el vacío que hay dentro de este ex-ciudadano, que parece caído de una nave espacial oriunda de Casiopea, por los menos, que está convencido de que la crisis es sólo para parados y jóvenes sin empleo, que los recortes ni se ven, aunque el populacho los grite a voz en cuello y mareas infinitas de todos los colores del espectro cromático la denuncien y que el país entero no se contamina de miseria ni de pringue ensobrada y simulada en diferido. Que la corrupción parece pero no es y que es mejor no menealla, que la carga el diablo y te puede saltar cualquier historia turbia en cualquier momento sobre las siglas del cada vez más P.O.C.O  ex-PSOE.

Zapatero, definitivamente, se ha divorciado  del socialismo real para apuntarse al club de la complicidad de los ex . A lo mejor es que le afectó demasiado pasar un finde invitado por el Bidelberg y allí vio la luz, como Pablo de Tarso camino de Damasco. 

Si el el socialismo a la española estaba al borde del  precipicio Zapatero en esta entrevista le acaba de dar el último empujón definitivo. La puntilla. Si ese ex-servidor del Estado, que sigue cobrando de todos nosotros, como si lo siguiera siendo,  que mostraba tanto entusiasmo y compromiso para cambiar la sociedad a mucho mejor - a pesar de no saber lo que vale un café para los ciudadanos- se nos ha quedado en esto sólo porque no ha conseguido que su proyecto se mantenga en pie y no es capaz de mirarse públicamente con una honesta y profunda autocrítica ni de empatizar con los más agredidos por la tenaza del pp y el cómodo laisser faire et laisser passer del PSOE, más vale que se dedique a otra cosa y deje de jugar a María Antonieta esperando que a falta de pan podamos comer galletas. Ah, pero que deje de cobrar por habernos vendido la cabra de su optimismo sin fuste durante dos legislaturas y un boceto falso de político con corazón y nobleza hacia los más desfavorecidos; la nobleza con sus cómplices en el desguace de los españoles puede que le honre entre ellos, pero nunca más le honrará en las urnas. Y tampoco a su partido, que lo tiene todavía como miembro relevante. Y eso sí que es una verdadera lástima porque España necesita un buen partido socialista, que como Hollande en Francia sepa lo que hacer con una crisis que es una estafa.

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