Lo inimaginable
EL PAÍS
*****************************
*****************************
¿Y qué opina la OCDE del TTIP? ¿Ve compatibles los derechos de la ciudadanía que defiende ante el pirañeo de las grandes ciber empresas con la aprobación de esa locura globalizadora del abuso en favor de las empresas que esquilman sin compasión y pretenden estar por encima de los estados soberanos de derecho y de sus tribunales de justicia, pero sin llamarse Google, Amazon o Aple o Windows? No acabo de encajar lo uno y lo otro.
Por lo pronto hay una voz en Yankilandia que ya se ha levantado, en oposición a Obama, a favor de la justicia y en contra de los dichosos tratados del esquilme que amenazan con cepillarse 150 años de trabajo y esfuerzos sociales, para conseguir el reconocimiento de la dignidad y del derecho de las trabajadoras. La voz de Hilary Clinton. La misma que propuso en sus tiempos de 'primera dama', la creación de la Seguridad Social en U.S.A., idea que luego asumió y ha llevado a cabo Obama (no sabemos si durará o el tea party se lo cargará en cuanto asuma el mando). A ver si ahora, el presidente de las esperanzas desinfladas también se anima a dejarse inspirar e influir por la lucidez política y la sensibilidad social de doña Hilary. Virtudes, que, al parecer siempre tienen nombre de mujer. Por algo será.
No hay comentarios:
Publicar un comentario