viernes, 31 de mayo de 2019

Refrescando la memoria, me he re-encontrado este poema de hace cinco años, cuando estaba en el trance de dejar mi participación en Podemos; y que la rebedía saludable, a la luz de la conciencia, nos acompañe siempre, hermanas y hermanos...


sábado, 25 de octubre de 2014


La paz activa


 


Me han llamado guerrera. Qué sorpresa.
Como soy noviolenta no me encajo en el rol.
No me siento ni en lucha ni en combate.
¿Cómo será guerrera quien no odia,
quien no le ve atracticvo a derrotar a nadie
para ganar un pedazo de nada? ¿Y para qué?
¿Para subir los humos a este ego
que no merece el gasto de energía?

No creo ni en la lucha ni en la guerra.
No encuentro enemistad en lo diverso
sino un master que la vida me da
sólo para premiar las ganas de vivirla
sin tapujos ni trampas ni confeti

Guerrera yo ¿por qué? ¿tal vez será
porque no me resigno ni me escondo
cuando el rebaño acata y obedece?
¿o porque no me callo donde el temor
coloca la señal de su stop?
¿o porque no me trago la triste catadura
del engaño? ¿o porque ignoro el trueque
de objetos perdidos en la consigna de ayer?

Si no quiero ganar ni derrotar a nadie
si no encuentro ni frentes ni trincheras
cuando exploro el terreno,
sino almas, rostros, miradas, soledades,
deseos, frustraciones y ansias, agujeros
de llanto o de esperanza...pasajes
con destino al no se sabe dónde
¿qué guerra me concierne, qué armamento,
qué victoria esperar
que no sea sentir
cómo se abre esta flor en la ventana,
cómo amasan los soles del otoño
las brumas matinales,
cómo derrocha el pan ese aroma
de esencia compartida
del horno hasta la mesa?

Si respiras amor hecho de aire
si el amor es manzana o zanahorias
si amor es cada paso que te lleva
si en el cielo y el suelo
se baila el mismo vals o la misma bachata
entre nubes y arena, entre brisa y olivas
en sílabas compactas de caricia y de llanto...

En tales municiones tan bellas como raras
no caben la amenaza ni el envite. Ni un triste proyectil
ni un bofetón, ni minas ni metralla
ni ofensa que requiera defenderse
de nada ni de nadie
ni nieblas que añadir a un horizonte
que disuelve y coagula lo amado en lo que ama.

No hay comentarios: