sábado, 19 de marzo de 2016

Las barbaridades de la "legalidad vigente"






Maestre llega al juzgado acompañada de su abogado. Kike Parra ATLAS
La concejal del Ayuntamiento de Madrid Rita Maestre (de Podemos y Ahora Madrid) ha sido declarada culpable y condenada a pagar 4.320 euros (12 euros diarios durante 12 meses) por ofensas a sentimientos religiosos más la mitad de las costas por participar en una protestas en 2011 en una capilla de la Universidad Complutense. El fiscal pedía un año de cárcel por un delito contra los derechos religiosos. El otro acusado, Héctor Meleiro, de 21 años cuando sucedieron los hechos, ha sido absuelto de los delitos contra los sentimientos religiosos. Maestre va a recurrir la sentencia ante la Audiencia Provincial, según ha comunicado su abogado, Gonzalo Martínez-Fresneda, en una nota.
La juez Esther Arranz Cuesta considera como hechos probados que la acusada "en unión y de acuerdo con otras mujeres no identificadas, con intención de ofender los sentimientos religiosos de los ahí presentes y del colectivo católico invadieron el espacio destinado al altar" de la capilla del campus universitario de Somosaguas (Madrid). Allí, Maestre "se quitó la camiseta, quedándose en sujetador, y otras mujeres se desnudaron de cintura para arriba, dándose dos mujeres un beso en la boca, tras lo cual se dirigieron fuera de la capilla gritando 'Vamos a quemar la conferencia episcopal', 'Menos rosarios y más bolas chinas', 'Contra el vaticano, poder clitoriano', 'Sacad vuestros rosarios de nuestros ovarios", añade la sentencia.


Maestre defendió durante el juicio que la suya fue "una protesta pacífica y legítima" y que sigue estando de acuerdo con esa forma de defender sus ideas. "Un torso desnudo no tiene por qué ser ofensivo", aseguró. Sin embargo, también pidió disculpas a todos los católicos por lo ocurrido aquel día. De hecho, el propio arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, disculpó hace un mes Maestre, porque "a una edad" se hacen cosas que después se ve que "no debieran hacerse así"; la concejal tenía 22 años en marzo de 2011.

"Consciente del lugar en el que se encontraba"

Sin embargo, la sentencia del juzgado de lo Penal número 6 de Madrid considera que la acusada "era consciente del lugar en el que se encontraba y el contexto de la ridiculización de la postura de la Iglesia católica realizaron actos vejatorios y ofensivos, atentatorios al debido respecto al altar y su significado, y con tales actos se infiere una clara intención de ofender o menospreciar los sentimientos religiosos".
Por eso "atendiendo a parámetros en atención a los fines de reeducación, reinserción y rehabilitación que entraña toda pena, el juzgador estima procedente imponer la pena alternativa de multa como la más adecuada y proporcional". La juez ha decidido aplicar la cuota de multa de 12 euros (podrían haber llegado hasta 400), teniendo en cuenta el patrimonio y los ingresos de Maestre, explica la sentencia.
El caso ha indignado a muchas personas que han señalado la politización de un hecho sucedido hace cinco años. La acusación la ejercen el partido de extrema derecha Alternativa Española y el Centro Jurídico Tomás Moro."Esta sentencia servirá para concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de respetar al que piensa o siente diferente", ha dicho en un comunicado en centro Tomás Moro.

Maestre no leyó ningún manifiesto

Durante el juicio no se ha acreditado que "Rita Maestre leyera un manifiesto en contra de la postura oficial de la Iglesia respecto a la mujer, ni tampoco que gritara expresiones ofensivas ni que portara cartel alguno", y, por eso, protesta en una nota el abogado de la concejal, Gonzalo Martínez-Fresneda, no se entiende que la juez haya achacado a la acusada la culpa de todos. Este es el primero de los argumentos por los que la defensa de la portavoz municipal va a recurrir la sentencia ante la Audiencia Provincial (tienen 10 días para hacerlo).
Además, el abogado cuestiona que rodear un altar para leer un manifiesto constituya un acto de profanación del propio altar -"que no fue tocado ni afectado en todo el acto", insiste la nota- y que quedarse en sujetador pueda ser ofensivo dependiendo del contexto. La sentencia "insiste, de forma completamente inmotivada, en que habiéndose realizado en el interior de una capilla, la protesta es delictiva", añade el comunicado.
La pregunta ahora es cuál será el futuro político de la concejal y portavoz del Ayuntamiento de Madrid. Maestre dijo en su día que, llegado el momento, se valoraría "en equipo".

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Esto es lo que pasa cuando se da en las urnas una mayoría absoluta a un grupo político impresentable, y deficiente cognitivo. Que dan la vuelta a las leyes y convierten en "legalidad" todos sus miedos, sus traumas, sus fobias y sus manías interesadas, con el fin de convertir en herramienta agresiva la política y judicializar la vida pública hasta la histeria, un modo de control tiránico de la ciudadanía, que para defenderse de cualquier acusación estúpida, deberá pagar una pasta en tasas encarecidas y altísimas , decretadas por ese mismo gobierno, cuyo código "legal" puede considerar delito cualquier filigrana que no se puede precisar, como en el caso del 'delito' perpetrado "contra el sentimiento religioso" de una concejala incómoda por sus ideas renovadoras, mucho más que por ser una supuesta delincuente, una penalización  que también podría ser aplicada "contra el sentimiento canívoro" a los menús vegetarianos o a la medicina homeopática por herir "el sentimiento halopático" de la medicina al uso o a los chistes impertinentes que puedan herir "el sentimiento forrístico-cacique" de la derecha. 

¿Dónde están los límites que separan el delito contra el sentimiento religioso de la broma, del juego, de la astrakanada o de la tontuna?  ¿Cómo medir si la cosa va de coña o no? ¿Cómo establecer la capacidad justa o no de entender cosas tan subjetivas y tan poco tangibles? ¿Acaso no hiere el sentimiento,el derecho y la razón legítima aconfesional de los ciudadanos en un Estado laico, el hecho de que haya iglesias y capillas de una religión privada, que encima pertenece a otro Estado, El Vaticano, en los centros públicos del Estado español, como hospitales, escuelas y universidades que se mantienen con los impuestos de todos y todas, sin consideración alguna de respeto a la diversidad religiosa de la ciudadanía? ¿Y si todos los no creyentes o practicantes de otros credos no católicos denunciasen al Estado por esa transgresión constitucional, mucho más grave que quitarse una camiseta y rodear un altar en sujetador? Si Dios ha creado el cuerpo en cueros, no ha creado ni impuesto la obligación de ir vestidos y no ha obligado en ningún mandamiento a que haya edificios dedicados a él, con la delicadeza de no herir los derechos de los que han decidido no creer en nada, a los que, por cierto, él si parece respetar y conceder la misma vida, providencia y posibilidades que a los creyentes. Es muy revelador que Dios no haya dicho ni pío al respecto, siendo todopoderoso y omnisciente, y que no se dé por aludido ni ofendido castigando a Rita Maestre por su salida de hace años, más cómica que otra cosa y es muy raro que  en cambio sus fans más hooligans se ofendan tanto por algo que en su momento les importó un bledo, pero que con la posibilidad de que la ciudadanía y sus activistas tomen los ayuntamientos en las urnas, les está empezando a obsesionar, y así se están pertrechando de leyes marcianísimas y un catálogo de delitos retroactivos y surrealistas para proteger sus dominios caciquiles.

¿Cómo medir y reparar la ofensa a un sentimiento con el pago de 4.320 euros de multa? Hay que ver, qué bajo resulta poner precio en dinero a cosas de tanto valor como el sentimiento religioso, ¿no pperetes?;  y por cierto ¿a qué caja "b" irá esa multa? ¿entre quiénes se repartirán los 8 billetes de quinientos? Que esta ppeña no da ppuntada sin hilo ni pone multas para nada , así por ponerlas, ni jamás usa el nombre del euro en vano, que ellos, la gorra la pasan por todas partes a ver qué cae. Pues anda que no son linces ni lo tienen todo apuntado en papeles amarillos y discos duros...menuda contabilidad llevan...y si no que le pregunten a Luiséfuerte y su disco missing que cantaba la Traviata en estéreo hasta que lo hicieron desaparecer.
No tiene pies ni cabeza que sean los euros el modo de resarcir una ofensa tan poco material ni comprobable. Los sentimientos ofendidos así, en abstracto, y al cabo de unos cuantos años, ya dirá el pp como se pueden medir, a Rita pasada. A no ser que el pp y su particular concepto de "justicia" considere que hasta los sentimientos más sublimes tienen un preciode mercado y se ponen tan contentos dando un sablazo a quien ofende lo que sea, con un gesto o una palabra. Y meten lo 'sagrado' en el mismo lote que romper una papelera o hacer cualquier gamberrada por la calle. Qué bajeza de miras, qué cutrez, ains!

Lo lógico hubiera sido poner como penitencia, ya que estamos en plena semana de Pasión, por ejemplo, rezar el rosario con los brazos en cruz o hacerle una novena a san Cucufato en la plaza de Cibeles para que todos recen por la joven y arrepentida Rita y oren por la salvación de su alma en peligro constante por tanto rojerío, o condenarla a una apostasía como dioshmanda del código libertario de la rea, confesa y convicta,  o un encuentro de la concejala Maestre con las personas damnificadas directamente por aquel evento estrambótico, en el que, debidamente vestida con un hábito morado de penitente, un escapulario de la Virgen de la Santa Venganza en Frío, pidiese disculpas por algo de lo que, seguro, ya ni se acuerdan las presuntas víctimas de aquel sacrilegio inolvidable para los españoles, caso de que hubiese habido en la capilla de la Complutense en aquel instante algún evento de la peña más afín al oratorio;  normalmente, aquel santuario, al menos cuando yo estudiaba, no era muy visitado que digamos; era como una postal de fondo cuando llegabas en el tranvía, como una imagen del decorado; nunca me acerqué ni conocí a nadie a  mi alrededor que la hubiese visto alguna vez abierta ni mucho menos que hubiese entrado y la hubiese vistitado por dentro, a veces bromeábamos, en plan truculento, con la idea de que solo la visitasen los fantasmas de la guerra civil del frente noroeste de Madrid. No sabíamos si tendría un horario. No sabíamos si se abría o no. Y eso indica el poco caso que se le hacía. Hasta en pleno franquismo resultaba marciano y estrambótico el hecho de que existiera aquel templo de ladrillo, en todo lo alto, presidiendo la Ciudad Universitaria como un símbolo de lo que soportábamos: el poder controlador del imperio romano aún coleando en la segunda mitad del siglo XX, sostenido por los intereses tiránicos de una dictadura feudal, genocida, borderline, hipócrita y meapilas en la misma proporción. 

Y, ya puestos a tirar de memoria y hemeroteca, mucho más contundente fue la ofensa personalizada a los sentimientos municipales de Madrid, o sea, a todos los madrileños en la figura de los polis municipales humillados por Aguirre en plan Thelma&Louise, y en plena Gran Vía, incluida la leche a la moto que es un bien público, y nadie le ha cobrado ni un euro por ello. Y eso que Espe no era solo una estudiante jovenzuela y anónima que protestaba por una inconstitucionalidad sin atropellar a nadie ni salir huyendo, sino nada menos que una presidenta del pp madrileño  incapaz de controlar un ataque de obnubilación de su caciquepatía congénita. Y eso sí que es un delito de desacato a la autoridad y a la dignidad de toda la ciudadanía. Al menos Rita Maestre no salió corriendo y ha aceptado acudir a un juicio, irrisorio, es cierto, pero ha dado la cara por respeto a una ceremonia humillante que no merece el respeto de nadie, algo así ya se degrada por sí mismo; acontecimiento judicial del que Espe se ha escaqueado con su desenvuelta campechanía de siempre. A partir de ella y su odisea, el significado de "campechano" deberá ampliar el campo semántico con otros sinónimos y matices más contundentes. E hipotizando un poco...¿qué le habría pasado a Rita Maestre si hubiese montado el mismo numerito que Aguirre? Si por una sesión de títeres de cachiporra se puede ir a la cárcel. No lo quiero ni pensar. Y qué le pasará a la otra Rita, a la del caloret, cuando consigan que acuda a un juzgado para afrontar lo suyo,  rodeada de toda una legión de concejales y concejalas en las mismas? ¿La acusarán también a ella, a la jefa, con efecto retroactivo, de haber herido durante 24 años el sentimiento municipal de los ciudadanos esquilmados por su acendrado sentido del deber forrístico? ¿Será entonces la justicia tan rigurosa como con esta Rita sin enchufes? Está por ver como reaccionarán entonces las señorías de toga y puñetas. Ojalá la Justicia se quite la venda, calibre bien la balanza, vea lo que hay. Y actúe  en consecuencia. Que ya está bien de verla dando palos de ciego donde no toca, humillada y podrida.

A ver shi van cambiando los conceptosh de delito y las tarifash del multaje, que ya lesh vale, pordiosh!

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