La voz de Iñaki

Alguien debe dar un paso

EL PAÍS  

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Completamente de acuerdo con esta valoración, Iñaki. Lo más honesto, lógico, democrático, digno  y justo en casos como estos es la dimisión espontánea sin poner al partido en la tesitura de expulsar a dos de sus cabezas más visibles o de tragarse el sapo por un falso respeto a los sumos artífices,  un mediocre temor a posibles consecuencias negativas o por un orgullo ciego y estúpido, como le pasa al pp. Es más , ¿qué sentido tiene la defenestración de Tomás Gómez si se permite que Griñán y Chaves sigan como si tal cosa? ¿A caso se ha demostrado en un juicio que Gómez se haya hecho millonario con el tranvía? ¿A caso está imputado? ¿Acaso se pretende dar una imagen de honradez, de aquella de los cien años que acabó torrada en la misma hoguera que los muñones de Felipe González empeñado en poner las manos en el fuego por todo corrupto viviente a sus órdenes? Que se sepa hasta ahora es la fiscalía la que está investigando el caso Gómez, revisando documentos y registrando archivos, pero no hay imputación. Hubiera sido estupendo para el psoe y la democracia española que Gómez hubiese dimitido de motu proprio como hizo el ministro Bermejo con lo de la cacería, que al lado de estos mejunjes es una bagatela inocente. Pero fue un signo de salud democrática digna de un verdadero socialismo. De una verdadera transparencia y sensibilidad éticas. Parece que en el psoe las líneas rojas de la ética política sean de quita y pon, según quien las pisa y eso da muy mala espina. Denota que en el psoe hay casta peyorativa, una curia intocable. Que no es lo mismo un aspirante al podium que unos habitantes vitalicios del podium. Va a resultar que de igualdad hay tanta carencia como de libertad, de fraternidad y de reflejos.  
También queda en tenguerengue la actuación-inhibición de Pedro Sánchez que  deja en el aire algunos interrogantes como que si tal vez su responsabilidad sólo está a disposición de los grados de importancia y partida de bacalao, según los casos, o si es que no se atreve a meter mano a los "jefes" o bien, es que les debe agradecimiento por su promoción a la Secretaría General, o que en el psoe hay "clases" internas y según el poder acumulado se deciden las responsabilidades ad hoc, pero en proporción cacique-reversible: a más poder más escaqueo y menos culpa y a menos poder, menos escaqueo y  más culpa . Menos x más<>más x menos. 
El caso es tan simple que no admite demasiado retruécano. El silogismo es pura evidencia. 

a) Un secretario General destituye a dedo 
a un presunto corrupto de poca monta
que no está imputado y el psoe lo permite sin remilgos.

b) Aparecen dos elementos de mucha monta en el psoe
que están imputados  en un mogollón de alivio;
el psoe se calla y otorga. El Secretario General enmudece

c) La conclusión es mejor que cada uno la deduzca
según su conciencia y el que no la tenga
que se la juegue a las canicas 

Está claro que la ética y la lógica van de la mano de la justicia. Algo nos falla en la casta política aborigen y en la ciudadanía miope sin gafas y fumaíta perdía, para que la ética no tenga lógica ni justicia, que la lógica no tenga justicia ni ética y que la justicia no tenga ética ni lógica. Y que el conjunto carezca de pies y cabeza. El resultado es Pablemos, Vania Ensánchez, Ciudananos , los cantares de gesta de Laurel Castigo y El Rary, Perrele Menguante, Malandanza Aguirre, Pimpamponio Furriel S'entona, Belén Enredan , GuInda, Marujenda, Berenjenales Soprano, la jaca de los títeres y el pp en general con el psoe en modo coronel o viceversa y lo que todo eso  implica. Un retablo de las maravillas que hace puré con chiribitas cualquier proyecto serio de organizar un paísh comodioshmanda a la altura, como mínimo, de cualquier historieta de Ibáñez.  Qué psaílla, ppoddióh!