sábado, 31 de agosto de 2013

La emppresa se confiesa

No se sabe si  debido a un desppiste o por un ataque de sinceridad incontrolable, Soraya, la del ala derecha del hemiciclo, la vicepresidenta multiusos y polivalente, se ha echado al monte y ha terminado reconociendo en ppúblico lo que todos ya sabían y sufren espartanamente een pprivado. Que el pp no sólo es una empresa, sino la "emppresa" en sí misma. La quintaesencia del emprendidaje. El alma desalmada y despendolada del negocio a todo trappo, como sea, donde sea y al pprecio que sea. 

A Soraya le debe incomodar el atrezzo sobrecargado y quizás le empiece a pesar el volumen y la densidad de lo injustificable. De no poder traducir a la lógica natural de la declaración en público, ese ritmo siempre en diferido y simulado, salpicado de espantás y capotazos sobre el burladero, con banderillas sobre el monosabio y estocadas sobre el subalterno, mientras el toro, er bisho, preside el consejo de administración del "ente gubernamental-emppresario"; Soraya se marea y no computa ese swing con que su ppartido  rebana discos duros, como si fuesen pan de molde en bloque y se escaquea constantemente de toda responsabilidad ética y política para que la emppresa no decaiga y el impperio del sobre continúe su égida insaciable, subiendo como la esppuma, pero...con un descalabro sin precedentes en la historia del bandidaje ejecutivo y legislativo. Porque la emppresa ha superado en poca vergüenza y cinismo, y en un tiempo record al mismísimo Felipe, el de los gatos taoístas. González, el paisano de Monipodio. 

Y Soraya, será ppera hasta las cachas, pero a lo peor para el pp, es posible que no sea del todo obtusa ni absolutamente amoral, como el estilo de la casa imppone, contagia y exije a sus emppleados, socios y accionistas. Soraya no se quiere sor-rayar, y ha decidido pasarse de la raya que por sistema es el rompeolas de Génova. El malecón del puerto franco. Cada vez más franco y, paradójicamente, más enredado en su franquez, como ha ilustrado el portaquejas Hernando. 

Soraya lo ha dicho. Lo ha reconocido. Ha confesado, por fin. ¿Os habías hecho la ilusión de que  votabais a un ppartido ppolitico, con una ideología llena de ideales, un talante democrático, un proyecto social para crear empleo y superar la crisis y mantener derechos y libertades compatibles con el desarrollo normal? Pues menudo patinazo, coleguitas...Porque habéis votado a la emppresa, por antonomasia. Os lo digo yo, la vicepppresidenta de todo el cotarro emppresiforme. Y donde creísteis que campaba, tan ricamente, la niña de Rajoy llena de lazos, organdises y nidos de abeja, sólo estaba aposentado el nido de avispas de Andrea Fabra, la reina del panal, con su slogan universal del "quesejodan" y junto al zángano avispado, ese ministro de injusticia explicando el contenido semántico de la frase, para completar el kit: "gobernar es repartir dolor", tomada directamente del diario de campo del Marqués de Sade.

O sea que donde el pp os prometió un panal de rica miel, sólo hay un facsímil de avispero estéril  y pegajoso, pero, eso sí, un avispero emppresarial. Sholvente y que shabe de lo que habla; cuando habla, claro. Que tampoco es cosa de malgastar shaliva con la que eshtá cayendo. Y los eres ahí, dispuestos para saltar a la yugular, qué fijaros cómo está Griñán, por no haber querido hacer una emppresa con shus shobres y sus dishcos durosh rebanadosh. Por no tener talento empprendedor. Una falta de organización...y hale, a dimitir tocan...por desbaratarse a la hora del reparto. Por no tener un Bárcenas condensador que se pueda hacer desaparecer en la nada, en un plís plás, cuando la shituación she pone fea y losh shobres cantan la Traviata y el condenshador de shobres ya no reshponde al programa reformateado.

(Soraya, en su honradez apócrifa, intenta lavar los salpicones de cieno y pringue con el vanish. Pero las manchas crecen y se juntan sin saber cómo, formando un manchurrón infinito. Y sigue explicando que esos pequeños rifirrafes de la Ppresidencia son cosas de la emppresa, nada que deba preocuparnos especialmente. Que todo consiste en que cambiemos el concepto "gobierno", por el de "trust empresarial para el forring a saco" y ya está. Pelillos a la mar. Todo encaja. En cambio si ya empezamos a politizar...no hay nada que hacer, todo se atraviesa y se enreda)

¿Qué es la política sino una distracción para no centrarse en gobernar como se debe gobernar al eshtilo de diosh ?, ha dicho el Ppresidente.  El Caudillo lo decía también y con qué razón! Él siempre fue una emppresa muy próspera e hizo que España fuese  un oasis de caspa selecta en medio de una Europa descaspada, rarísima e incomprensible, con fraternidad, igualdad y libertinaje, puaf, qué asco!..no como aquí, donde la jerarquía y la chusma se alineaban en vertical, así, los presidentes y jefes, pisando a los de abajo, por la verticalidad, obviamente, el orden supremo estaba garantizado per se. O sea, porque sí.  Si el de arriba hubiese descendido o el de abajo subido, como sucedía en aquella Europa de entonces, y también en la política de marras, se hubiese montado la de Sanquintín. Y se habría terminado la unidad, la grandeza y la libertad de aquellas cuatro décadas esplendorosas que ahora nuestras juventudes tratan de recuperar con tanto ahínco. La política es una bagatela, un chismorreo intranscendente, una banalidad, por eso el Jefe nunca se ocupa de ella. Jamás hace nada político. ¿La Polis? Sólo cosa  de los griegos. Y vaya ejemplo...mira como están. Peor que nosotros. Bueno, con menos paro, sí, pero en todo lo demás...mucho peor, con unas temperaturas mucho más altas..., una cantidad de pedruscos ruinosos que ya no les queda sitio para colocar burbujas, chalets con piscina de alto standing, campos de golf y mucho menos turismo...claro, donde se pongan Benidorm y Terra Mítica, que se quiten las metopas, los capiteles dóricos y los templos hechos unas lástimas, y es que, además no tienen un Océano a la vuelta de la esquina, para refrescar las aguas interiores, como nosotros y nuestra "marca" España, que es la leche.

Por eso aquí no se debe hacer política, que está muy feo, sino rebajas de enero y de agosto, ofertas de temporada, marketing publicitario y, sobre-todo, gestión, y más que nada, con-gestión, sí, de denuncias, de papeles judiciales, de pagos retrasados, de atestados, de pruebas que se pierden en la inmensidad de las incidencias insignificantes. En reclamaciones. Congestión en las colas del desempleo. En las urgencias hospitalarias. En los bancos para reclamar el timo de las preferentes ratificadas, blesificadas y missing, como ya es sabido. Con-gestión en las manifestaciones y mareas ciudadanas. En Gibraltar, que son unos bordes. En el puñetero 15M que es obra del PSOE, aunque la Talegón diga que es cosa nuestra. Imposible, ¿nosotros inventando algo así? Nosotros odiamos la imaginación que es una frivolidad, nos choteamos de la noviolencia que es una maricnoada de Gandhi, que no era trigo limpio con tanto ayuno, con el dodotis y la rueca, qué tío más raro... y la democracia real ya sabemos que no existe ni existirá mientras la emppresa siga en pie. Vaya ojo el de la Talegón, para justificar que tampoco ella entiende el 15M. En eso se parece a nosotros, fíjate qué curioso! En fin, que los con-gestionados, que son cada vez más, dicen que lo están porque todo está sin-gestión. Yo ya es que no me aclaro, porque precisamente nuestra emppresa, como el BM y el FMI, se basan en la sin-gestión y hay que ver como les va de bien. Claro que no es lo mismo EEUU que Eshpaña, tan poco conformista y tan protestona. Ya se irán acostumbrando de aquí a 2015...

Y así termina la rueda de prensa simulada y en diferido. Desde hoy todo está clarísimo. Soraya ha despertado del sopor estival y responde, agobiada por el peso del chanchullo. No todo está perdido para la emppresa, aunque los ciudadanos españoles sean los despedidos sin indemnizar, precisamente por la insolvencia y el gadgetogarfio del trust del shobre, ese logotipo indeleble que los emppresarios llevan grabado en las neuronas, como un chip teledirector de reconocimiento. Como en un disco duro de borrado imposible.

A Soraya, en su devoto dilagar, se le ha ido un poco la pinza y ha caído en una gran contradicción que desautoriza totalmente su contrito repaso a los acontecimientos mercantiles de la emppresa.  Y es que , siguiendo la lógica ppera en su salsa, si el gobierno es un negocio, quiere decir que necesita que lo contraten por lo que ofrece. Porque los negocios responden a la ley de la oferta y la demanda. Es cierto, los ciudadanos han "contratado", o sea por demanda y  con sus votos, la oferta de una "empresa" gestora de los recursos e instituciones del país, del Estado. ¿Qué hacen los clientes que compran un servicio gestor a una empresa que no les sirve el producto que prometió en el contrato de compra y venta? Pues devuelven el producto de pésima calidad, reclaman la devolución del dinero pagado al club del fraude y buscan otro proveedor que sea capaz de solventar la necesidad de los compradores. Para eso van al juzgado y denuncian el caso en O.C.U.;o sea, que si los españoles necesitaban un buen equipo de gestores políticos y sociales para afrontar la crisis provocada por la abundancia de emppresas incapaces, chapuceras y desastrosas, sólo preocupadas por forrase sin darse cuenta de que hasta su prosperidad depende de que gestionen honradamente y con inteligencia los productos de su trabajo, el pp no da la talla en absoluto, desde el momento en que ni siquiera distingue gobernar de forrarse presidiendo la emppresa con la que no se gestionan nada más que sus beneficios personales y su escaqueo "político", pues consideran la política, en el colmo del garrulismo fascista, una bobada totalmente prescindible.
Por tanto, no dan la talla ni como políticos, que es lo que el país necesita para gobernarse, ni como emppresarios, porque son una chapuza confusa, embarullada y delictiva, haciendo de la tal emppresa una verdadera sucursal de la cosa suya, que ningún español decente y libre de excrementos corruptos, consigue reconocer como cosa de todos.

Política es el conjunto de medios, ideas, programas, decisones, legisalación y herramientas de trabajo común, relacionado con los vínculos humanos no biológicos sino sociales, convivenciales y éticos, sobre todo. La Polis no sólo se refiere a la ciudad, sino a "la legitimidad de lo público". De lo compartido. Por ejemplo, la Constitución es un acuerdo político, entonces qué pasa ¿que para el pp es papel mojado porque desprecia la política y no queire saber nada de ella? Pues sí, así es. Como es política, y política significa compromiso ético por encima de todo, le produce sarpullido.

Si el Presidente de gobierno o el Jefe de Estado de un país, reconoce, sobre todo con sus actos sin sentido y sus omisiones aberrantes, que no quiere hacer política sino empresa, además de ser un estafador social y económico, porque va a forrarse únicamente, es un ignorante como la copa de un pino, porque una empresa también es política laboral y hasta el franquismo veía necesarios los sindicatos que ideó J.A. Primo de Ribera. Y consintió la política falangista de la que Franco, sin  pajolera idea de organizar algo más que batallones de la muerte, hizo la columna vertebral del régimen, por supuesto, descafeinada y manipulada a su aire, y hasta la dábamos como asignatura en el Instituto y en la Universidad, donde existía la política de un sindicato, el SEU. Y una asignatura que se llamaba "Formación Política del Espíritu Nacional", una burda y totalitaria antepasada de la "Educación para la ciudadanía". Pero ahí estaba su reconocimiento de que la política es imprescindible para el funcionamiento de cualquier tipo de régimen medianamente humano. Es el ordenamiento de la convivencia por medio de un eje de pensamiento orientativo, que puede ser impuesto y uniformado, como era el caso de entonces o plural, respetuoso, dialogante y democrático, como es propio de los niveles más civilizados.
La política es el abecedario que nos permite leer el alma de la sociedad y entendernos colectivamente. Hasta los dictadores más cretinos se dan cuenta de que la política es el tejido de la sociedad, la base y los pilares de la convivencia y sin ella, sólo con pirañas "gestoras de la emppresa partidócrata, sólo se puede producir el caos, el desmantelamiento de los valores y la muerte social de las naciones. Que es la muerte de lo mejor del hombre: de su capacidad social que le distingue de los animales. Que puede superar el rebaño y la manada para convertirse en ese zoón politikón inteligente que Aristóteles definió como el estado evolutivo imprescindible para los seres humanos.

Hasta en el lenguaje existen términos como "hijos, hermanos y padres políticos", que llamamos yernos, nueras, suegros y cuñados. O sea, no por lazos biológicos sino por lazos sociales. Políticos. Diríamos, como tanto le gusta al pp, "legales". Si no le quieren llamar política al servicio a la ciudadanía, llámenle legalidad legítima y será el equivalente.

Pero en su incultura cognitiva y en su falta de reflexión la emppresa confunde el servicio cívico de la política, con ideologías, enfrentamientos y enganchones pseudo políticos. Como los zipizapes que ellos montan cuando son oposición; como desconocen la praxis de la política, convierten esa relación en un corral, en batalla campal, en acoso y derribo de reses, en un gallinero donde se trata de salirse con la suya gritando más, apabullando las reflexiones y argumentos que no son suyos. Insultando, humillando y si hace falta calumniando. El pp odia la política y la boicotea, porque si hay entendimiento y consenso político, tiene miedo de perder poder y de que le pidan cuentas de la emppresa y no pueda darlas, como ahora. Porque si las da, puede acabar en la cárcel todo el consejo de administración en pleno. Ese show vergonzoso de los ordenadores empresariales equivale a la excusatio non petita accusatio manifesta. Discos duros borrados porque sí en una investigación, prueba indiscutible de culpabilidad. Poco importa que materialmente no haya pruebas, Bastante prueba es ya esa destrucción de pruebas...Ahora el pp ha caído aún más bajo. Ya puede Mariano prometer shubida de shueldos y filtrar en la prensa noticias sobre la mejoría de España ¿Quién va a creerle si los despidos siguen igual que los desahucios, los recortes están a la orden del día y las leyes le ponen precio a las denuncias para que no se remueva la mierda y los jueces están maniatados si no se dejan comprar o no son socios emppresariales? Mariano, de acuerdo que al sacar mayoría absoluta, tienes motivos para pensar que los españoles son idiotas, pero no te pases en la infravaloración, porque nos estáis dejando muy claro el error cometido en la urnas, votando a una emppresa de mafiosos descarados.

La ideología de cada uno es inseparable de su comportamiento, pero cuando uno se quiere dedicar a servir al bien común, -no a forrase como el pp- tiene que tener clarísimo que no puede gobernar para su ideología sino usar lo mejor de su ideología, lo que todos pueden compartir, para el bienestar de la comunidad, escuchando las necesidades y problemas de todos, y no aplicando ciegamente para todos las receta de su ideología sin explicar de qué va y sin consultar a la mayoría parlamentaria de los representantes buscando el acuerdo y no la imposición; por encima de cualquier mayoría absoluta está el respeto a la pluralidad, la delicadeza y la finura ética de la verdadera política. Alcide De Gasperi, un demócrata cristiano, salvó a Italia tras la dictadura de Mussolini, haciendo un gobierno de coalición con todos los partidos del espectro político, y cuando el papa le reprochó que hubiese dado ministerios a socialistas y comunistas, que según Pío XII, eran enemigos de la iglesia, De Gasperi le respondió que antes que complacer a la iglesia estaba el hecho de ser presidente responsable ante todos los italianos y que no podía gobernar a su aire a los que no compartían sus ideas, ni imponérselas porque eso arruina la democracia al país. Precisamente, dijo, porque era cristiano. Eso es política y eso es gobernar, de lo que el pp no entiende un pimiento.

Rajoy-Gafoy, no nos sirve. Lo ha dicho él mismo. Y su fiel secretaria, Soraya, lo ha confirmado. No quiere hacer política, sino negocio. Mercado. O sea, no quiere gobernar ni gestionar para todos, si no a favor de su mercadillo de beneficios particulares, por eso no da ni hachazo ni nunca resuelve nada. Sólo busca que su empresa gane al máximo toda la pasta posible, a base de "gestionar" chachullos con otros emppresarios afines a su  estilo. Aunque, como está sucediendo, la ganancia de su emppresa signifique la ruina de los ciudadanos. Que no le contrataron como empresario sino como legislador y político, para todos, no sólo para la peña amiga e incondicional.

Por ser incapaz de reconocer su deficiencia política, su analfabetismo en el más noble de los servicios, ya puede irse Señor Noestoy. Si no reconoce usted la esencia de la política como una disciplina imprescindible en la educación y como el arte mayor de la convivencia, usted no puede gobernar nada por más que lo intente. Es como si Curro Jiménez quisiera ser magistrado de la Audiencia siendo analfabeto, como si  su malestad , a estas alturas del real descaro, pretendiese hacerse cartujo o Urdangarín, en el plan que anda, quisiera ser el próximo Dalai Lama.

Ya lo decía Molière: "El necio ilustrado es mucho más dañino y ridículo que el ignorante".

Después de la confesión sorayil, de la falta de examen de conciencia por falta de la protagonista, la conciencia en sí, por falta de dolor de corazón, debida a la carencia absoluta del mismo y por ausencia más que evidente de todo propósito de enmienda, aún con el ligero atenuante de haber confesado las verdaderas intenciones del contubernio ppecador, no podemos dar la absolución a los no arrepentidos y constantes reincidentes en el mismo ppecaderío farragoso. A no ser que cumplan la única penitencia posible y definitiva: que dimitan ya mismo, si no se quieren arriesgar a la excomunión y suspensión ad politicis per omnia comitia et per omnia saecula saeculorum, amén! y no acabar con shus shobrehs como combustible biomasa en las calderas freáticas de los inferorum, con Pedro Botero y sus adeptos como únicos votantes infalibles. No hay otra. Lo sentimos ex toto corde. Pero es lo que tiene que tan pocos quieran pillar y no soltar tanto, arruinando a tantísimos.

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