martes, 10 de julio de 2012

A LO MEJOR NO ES TAN MALO...

El panorama ppero es insoportable e insostenible. La birriosa constitución que tenemos no nos permite reformar las claves del desastre. Una solución a largo plazo con una reforma asamblearia del sistema que desbloquee los mecanismos sociales que el bipartidismo y la monrquía tienen bloqueados, es ahora mismo inviable. A base de denuncias y de largos procesos judiciales en manos de una justicia más que dudosa y escorada al lado de lo de siempre, tampoco garantiza nada a favor de la salida de la crisis ni de la reforma imprescindible. Si los mercados están presionando hasta asfixiar el estado, y éste está en manos insolventes morales, incapaces absolutos, inútiles totales, quizás la mejor de las soluciones sea ponernos directamente en estado cooperador con Alemania. Aceptando sus indicaciones, pero pidiendo que ya que nos va a gobernar directamente y el pp es el estorbo que lo impide, ese pp abandone el gobierno y lo dirija un buen grupo de economistas alemanes, que están mucho mejor preparados que esta panda de cenutrios fascio-pijos. Ignorantes y sin preparación seria que supere la ambición personal y la cleptomanía en materia de dineros públicos. Teniendo en cuenta que ahora mismo nuestra juventud más preparada está ya en Alemania o en camino hacia allí, porque nada más llegar encuentran trabajo en lo suyo, ¿qué mejor solución que alemanizar España del todo y conseguir que con un sistema ordenado y mucho más coherente que esta fonda del postigo en que se ha convertido nuestro país, se pueda ir saliendo adelante y mejorando la situación? Ya pasó lo mismo con Francia y Napoleón. Ojalá le hubiésemos permitido cambiar nuestros hábitos y mentalidad con una educación " a la francesa". Nos habríamos librado para siempre de la monarquitis, de la incultura, de la iglesitis, del caciquismo y de la garrulez de la derechona impresentable que se filtra hasta en lo más granadito de la izquierda. 
Ponernos a disposición de Alemania como una empresa filial cuya gestión sea compartida no estaría nada mal. Los españoles somos trabajadores y no le tememos al esfuerzo ni al riesgo. Tenemos seriedad en los compromisos y nos gusta hacer bien nuestras tareas. Por otra parte Alemania es muy respetuosa y civilizada, le gustamos mucho, valora más que España a los profesionales que aquí no encuentran trabajo y ella acoge sin pensárselo dos veces, porque no es tonta y sabe lo que vale el capital humano bien preparado y trabajador. De hecho media Alemania se ha comprado en España su segunda vivienda y habla y entiende español. Seguramente no estaría nada mal llegar a un acuerdo con ella y cooperar desde dentro en vez de hacerlo desde fuera. Llegar a un pacto social, político y económico de socios preferentes. Ellos gobiernan España, reestructuran la economía, nos permiten reformar nuestra constitución democratizándola y adaptándola al nuevo sistema cooperativo y federal de los nuevos tiempos. Respetando un sistema orgánico de asambleas ciudadanas autogestionadas, con las que sustuiríamos el actual bipartidismo. De modo que Alemania manejaría las inversiones y regularía la relación con los mercados y España se ocuparía de conseguir un país modélico en trabajo productivo, cuidar de la riqueza natural, conseguir la repoblación forestal, habilitar las viviendas vacías y sin dueño que ha dejado la burbuja ppera para que a buen precio las puedan adquirir ciudadanos del resto de Europa, ser uno de los productores más importantes en agricultura ecológica y energías renovables, también el lugar bien cuidado donde acoger  a los pensionistas, enfermos y personas necesitadas de cuidados especiales de toda la UE, dado el clima, los balnearios incontables y la condiciones estupendas que tiene y la cantidad y calidad de su parque sanitario y especialmente en terapias alternativas. Un lugar magnífico para universitarios e intelectuales, desde donde se pueden gestar proyectos sociales y culturales de gran altura, escuela y cantera básica para deportistas con unas buenas universidades deportivas, y cómo no,  acompañado todo ello de las aportaciones educativas alemanas que son estupendas, con lo que nuestro nivel sería mucho más completo aún. Con un estatuto mutuo, los dos países funcionarían como uno sólo. Cada uno aportando, aprendiendo del otro lo que le falta. Se podría firmar un proyecto cooperativo de este tipo, a largo plazo y renovable si va bien. Por ejemplo, por un veintenio. En dos décadas se verían los resultados y podrían modificarse las cosas que no hubiesen  ido bien y añadir otras que faltasen, o suprimir el pacto si ya no interesase. 
Creo que una solución de ese tipo, sería sanísima. Nada traumática y muy útil para todos. Además sentaría un precedente de gobernabilidad federativa, para casos en que se produzca una situación anómala como es un país con gran potencial pero obstruído por unos mecanismos sociopolíticos y económicos, desastrosos, inoperantes y anacrónicos, donde los ciudadanos sólo son sujetos pacientes de una clase gobernante sin escrúpulos ni capacidades para organizar el país y ese problema recae en toda la posible federación de estados. No se es menos español por hacerse un poco más alemán, y si eso nos ayuda a mejorara a todos, a quitar los toros y a gastar el dinero de las corridas en escuelas, mucho mejor. Yo me apunto a trabajar con Merkel antes que estar viendo como estos Don Tancredos se caen a cachitos y nos hacen papilla con el impacto de su peso insostenible.

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