Ante la falta de control de las administraciones españolas
Madera manchada de sangre
|
El
comercio de madera procedente de talas ilegales es un negocio muy
lucrativo. Mueve miles de millones de dólares al año, degrada los
bosques y está detrás de graves violaciones de derechos humanos. Ante
la falta de controles eficaces, nuestro país se ha convertido en una de
las puertas de entrada de madera ilegal a la Unión Europea.
Esta misma semana denunciamos cómo un importador gallego, a través del puerto de Vigo, ha introducido en el mercado de la Unión Europea una partida de madera procedente de una empresa multada reiteradamente por tala ilegal y que, además, está envuelta en una matanza de colonos
en el municipio de Colniza, estado de Mato Grosso (Brasil). Aunque las
autoridades portuarias de Vigo han querido desprestigiarnos negando los
hechos, finalmente han tenido que reconocer que la madera llegó a ese puerto.
Se trata de otra pequeña victoria de nuestros socios y socias. ¡Hazla tuya también!
La Xunta de Galicia, por su parte, no está haciendo nada por
investigar al importador de este cargamento de madera manchada de
sangre y evitar este comercio ilícito. Ello a pesar de que las distintas
administraciones autonómicas están obligadas a
controlar que las empresas importadoras que operan en su territorio
cumplan los requerimientos para evitar este comercio perseguido por la
ley. Por eso es importante que presionemos a nuestras autoridades, como la Xunta de Galicia, para que asuma su obligación y establezcan inmediatamente controles a los importadores de madera.
Las talas ilegales son el primer paso para la deforestación de los
últimos bosques primarios del planeta. Se estima que el 30% de la madera
que se comercializa en el mundo es ilegal, y movió entre 50 y 152 mil millones de dólares en 2016.
Se trata del primer delito medioambiental, según la ONU. La importancia
de esos bosques para la salud del planeta es enorme y su destrucción
nos afecta también aquí. La responsabilidad no es solo de los países que los albergan, sino también de los que reciben la madera.
Hemos evidenciado que la madera manchada de sangre se cuela en Europa por el puerto de Vigo. Pero tenemos que seguir trabajando. Ayúdanos a seguir presionando a las administraciones y seguir denunciando el comercio de madera ilegal. Porque la salud de los bosques afecta a todo el planeta.
|
|
|
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario