El misterio de los 10 votos a PP y C's: ¿quién les apoyó y no lo dice?
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En algún momento este pueblo de ovejas deberá comprender que pertenece a la raza humana, que tiene el don del raciocinio y la capacidad y el deber de hacer uso de sus derechos. Por ejemplo, el derecho y el deber de reprobar con legítima insumisión actos vergonzosos del calibre de estos atentados contra la democracia, de no obedecer a gobiernos vergonzantes que son elegidos constantemente a base de pucherazos, que ya de antemano se contemplan en las propias leyes y normas como lo más natural. Solo así es posible que un grupo de parlamentarios, por ley, tengan la prerrogativa de aprobar o impedir la formación de grupos en el Parlamento, en una democracia en la que la igualdad y la dignidad de todas las opciones políticas deben tener idénticos derechos a la hora de ser portavoces y representantes elegidos tan legítimamente como los mayoritarios. ¿Qué democracia verdadera se puede arrogar el poder cacique y parcial de favorecer o impedir la formación de grupos en las Cortes, sabiendo que con ello rompen la igualdad y se favorecen caprichosamente a los "clientes" ideológicos que apoyan sus ideas cobrando en privilegios y arrinconando la diversidad?
Solo en un corral de vacas habitado por deficientes sociológicos se puede admitir como normalidad política esta forma de opresión asquerosa y estúpida. Caciquil. Tras seis meses de humillar y ningunear a la ciudadanía con dimes y diretes, estrategias demenciales e inútiles peleas y debates interminables sobre las líneas rojas de los sillones, que en el fondo es la única preocupación de esas señorías del pan pringao, llegan otras elecciones en las que se echó de menos la transparencia bajo la capa turbia de un ministerio de Interior completamente pillado con las manos en la mierda más repugnante: el espionaje, la corrupción gangsteril y la persecución de los cuerpos de seguridad del Estado a todo bicho viviente sospechoso de vete a saber qué, y en manos de una policía corrompida, tramposa y dividida en bandos a favor o en contra del gobierno, y que encarga a dedo la gestión electoral a una empresa pringada hasta el cuello en todas las tramas más importantes de corrupción pepera. Solventado el asunto del primer pucherazo de la temporada con los resultados evanescentes del 26J, ahora llega el segundo, con los votos sin votantes, votos por generación espontánea o reproducidos por esporas, como las setas.
Pero ya en el Congreso no hay que elegir nada tan tajante como en las elecciones legislativas, por ello, el voto de nuestros portavoces en la constitución de la mesa y de los grupos, debe ser público, a mano alzada y en voz alta. La ciudadanía tiene todo el derecho y el deber de conocer qué y a quienes votan sus representantes y de comprobar que ese voto se corresponde con la voluntad del pueblo y no con su traición como acaba de ocurrir en el juego sucio del pp con los nacionalistas de derechas catalanes y vascos, a quienes debería abochornar hasta que se les propusiera ese voto en sucio, por parte de lo más corrupto, opaco y podrido que hemos conocido hasta hoy en eso de gobernar. Sólo ceder ante propuestas tan miserables ya debería descalificar la propia representación de esos Judas. Pero, con la bazofia sociológica amaestrada por el franquismo ex illo tempore, hemos topado, Sancho amigo. ¿Hay conciencia suficiente en el corral y en el establo para comprender y valorar la falta de ética, de decencia y de honestidad? Si fuese así no habríamos llegado a este penoso estado de desecho.
Esta casta impolítica, ignorante de lo que importa y doctora en lo que forra, trepa, manipula y corrompe, no estaría ahora mismo al cargo de las instituciones fundamentales del Estado, cuya buena gestión está a millones de años luz de sus discapacidades innumerables más que demostradas hasta la fecha. Y eso significa que estos pueblos tan celosos de lo suyo, sea de su lengua, de su tierra, de su cultura(?), de sus potajes, sus manías y fijaciones y de sus dogmas inoculados más por costumbre que por conciencia, no dan para más en su actual estado evolutivo; si la cantinela del "sentido común y los valores" del pp son los que más tirón electoral están teniendo desde 2011 para acá, es evidente que este pueblo español está para el arrastre y que se merece todo lo que le pasa.
Pero ya en el Congreso no hay que elegir nada tan tajante como en las elecciones legislativas, por ello, el voto de nuestros portavoces en la constitución de la mesa y de los grupos, debe ser público, a mano alzada y en voz alta. La ciudadanía tiene todo el derecho y el deber de conocer qué y a quienes votan sus representantes y de comprobar que ese voto se corresponde con la voluntad del pueblo y no con su traición como acaba de ocurrir en el juego sucio del pp con los nacionalistas de derechas catalanes y vascos, a quienes debería abochornar hasta que se les propusiera ese voto en sucio, por parte de lo más corrupto, opaco y podrido que hemos conocido hasta hoy en eso de gobernar. Sólo ceder ante propuestas tan miserables ya debería descalificar la propia representación de esos Judas. Pero, con la bazofia sociológica amaestrada por el franquismo ex illo tempore, hemos topado, Sancho amigo. ¿Hay conciencia suficiente en el corral y en el establo para comprender y valorar la falta de ética, de decencia y de honestidad? Si fuese así no habríamos llegado a este penoso estado de desecho.
Esta casta impolítica, ignorante de lo que importa y doctora en lo que forra, trepa, manipula y corrompe, no estaría ahora mismo al cargo de las instituciones fundamentales del Estado, cuya buena gestión está a millones de años luz de sus discapacidades innumerables más que demostradas hasta la fecha. Y eso significa que estos pueblos tan celosos de lo suyo, sea de su lengua, de su tierra, de su cultura(?), de sus potajes, sus manías y fijaciones y de sus dogmas inoculados más por costumbre que por conciencia, no dan para más en su actual estado evolutivo; si la cantinela del "sentido común y los valores" del pp son los que más tirón electoral están teniendo desde 2011 para acá, es evidente que este pueblo español está para el arrastre y que se merece todo lo que le pasa.
Ante un pp horrendo, y antes que nada, lo primero y básico es votar para echarlo. Conditio sine qua non para que esto funcione y se despeje la mugre casposa que ha inundado todo haciéndonos retroceder cuatro décadas en calidad de vida social y económica, en derechos y en libertades. Echarlo es mucho más que salirnos con la nuestra, mucho más que una revancha o una pataleta de enfurruñados, es una necesidad imperiosa para sobrevivir como estado democrático; es una profilaxis, una cirugía a vida o muerte. Pero cuando ha habido esa oportunidad para cambiar el 20D, los zánganos de colmena de Podemos y del Psoe se han comportado como peperos de poca monta, enredado en sus celdillas de panal, escarbando en estupideces insensatas y juegos de poder mentecatos, sobre todo porque antes de jugar con el poder al pilla pilla, lo primero es alcanzarlo; y antes hay que saber dominar la propia soberbia, la propia prepotencia sin fundamento, las propias pulsiones hegemónicas e inútiles cuando no hay nada que rascar aún; a la siguiente ronda electoral, los más irresponsables y estúpidos de este desgraciado gallinero, escarmentados por la nada obtenida de aquellos a los que votaron esperando algo, han hecho igual que ellos: abstenerse y dejar manos libres a la conjuración de los tontos para gobernar, pero muy listos para robar y especular con la cooperación de la estupidez de los fans, con los cargos políticos obtenidos a base de aforamientos, enchufes y favores y el manejo malsano de los dineros públicos hasta convertirlos en privados mientras dejan a la ciudadanía tiritando; hoy mismo le han atizado otro sablazo de 1000.000.000 de euracos a la hucha de la Seguridad Social. Y eso que aún no gobiernan del todo...
Este es el mapa que ve esa parte de la ciudadanía que aun conserva algo de lucidez y de coherencia. Y lo ve como un fracaso total del proyecto democrático, donde la inteligencia y la honestidad de la política auténtica se reducen a cuatro gatos: esos que nunca llegan a gobernar porque la mayoría de los posibles votantes no confía en que tan poca gente que nunca ha gobernado porque nunca se le ha dado la oportunidad por roja y venezolana o cubana o iraní, puede hacerlo mil veces mejor que esa pandilla de expertos en la torpeza ruinosa y en desequilibrio, a los que ya se han acostumbrado. ¿Cómo no ver el paralelismo entre estas conductas electorales y las del ganado en rebaño, que solo se guía por la inercia de obedecer a los mismos pastores aunque los lleven a un precipicio, sin plantearse nada serio? El ganado no piensa, solo sigue el instinto de la manada y solo reconoce la voz de su amo, aunque ese amo sea torpe, ciego, perverso y, por ello, finalmente, su verdugo terminator.
Un rebaño de hinchas cretiniformes sigue con la misma "ilusión" y "seducción" a un equipo de fútbol, a un papa dicharachero, a un conjunto de rock, a un caudillo "protector" (cacique armado) o a un partido político al que se habitúa a seguir y a escuchar en la tele mientras los media, tacita a tacita, van comiendo el tarro social y abriendo paso al emperador en bolas, que desde la pantalla parece llevar con un porte estupendo el mejor traje del mundo mundial. Ains, qué cansino es esto, XD!
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