Atención al veredicto del político más honesto e íntegro; habla de italianización porque es un experto en ello: el escanner redivivo de Bettino Craxi, pero con mejor fortuna giratoria.

El expresidente del Gobierno, Felipe González, este viernes. / Atlas / U. Martín

González vaticina la ‘italianización’ de la política española

Anabel Díez Madrid 67

El expresidente del Gobierno avisa de la fragmentación del voto y pide a los partidos que no metan miedo a la gente.

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Qué poca vergüenza tienes, González. Y disculpa el exabrupto, pero es lo más suave y benevolente que he encontrado para definirte sin cruzar las líneas rojas de la verdad histórica y de la buena educación que recibí en mi casa, en la Escuela Pública y en la crítica ITE, en el Instituto Público y en la Universidad Pública. Es lo bueno que tiene el sector estatal de la enseñanza aún en plena dictadura, que no se muerde la lengua ni la decencia de los valores imperecederos, incluso en los peores tiempos,incluso enseñando con el ejemplo vivo y trasnparente lo que no se puede explicar con las palabras prohibidas en determinadas épocas de determinados países. En contraposición a lo que ocurre en esos mismos países determinados cuando se pueden decir sin tabúes todas  las palabras que prohibieron los dictadores, pero al mismo tiempo se pueden contradecir y desactivar con el ejemplo práctico opuesto a sus significados.

Llamar 'italianización' a la pluralidad democrática, como reducir el concepto democrático a un juego de ajedrez parlamentario entre dos polos con matices diversos pero de la misma cuerda, te define mucho mejor que cualquier calificativo sinónimo de lo que ya tú sabes miamol. Así que me callo para que resuene tu pensamiento oblicuo, pringaíllo y transversal, in the sound of the silence. Ains!