La prensa estos días nos está ofreciendo sobre el tema Can Vies, en el barcelonés barrio de Sants, noticias entrecortadas, fotos y videos de vandalismo kaleborroko, incendios, agresiones de la policía y respuestas airadas de jóvenes enfurecidos a los que se ha tratado mediáticamente, como no, de violentos y antisistema. Pero casi es imposible encontrar un relato sereno y objetivo que explique qué es Can Vies y el por qué exacto de su desalojo y de su demolición.
Can Vies era un edificio que tenía más de un siglo de antigüedad, propiedad pública municipal. O sea, de todos los barceloneses. Según la historia, ese edificio se construyó para alojar las oficinas y al personal trabajador en el ferrocarril; allí muy cerca está la Estación de Barcelona-Sants. A lo largo de todo el siglo XX esa construcción ha sido usada para albergar instalaciones sindicales, trabajadoras y populares, como residencia del personal u oficinas, hasta llegar en 1997 a convertirse en un centro okupa-cultural en el que se desarrollaban actividades creativas, charlas, conciertos, asambleas de barrio, etc. Era una especie de casa de todos para el barrio y los jóvenes de izquierdas en particular. Había pasado y resistido por todos los regímenes políticos, por las luchas sociales, por la monarquía, la república, las dos dictaduras del siglo XX y por la actual democracia, que sin encomendarse a nadie, se la acaba de cargar, no se sabe con qué propósito pero estando como está el patio y gobernando CIU el consistorio, se puede colegir que las razones del derribo no son nada fiables. La especulación del suelo es un bocado muy goloso para la mentalidad piraña de determinadas ondas del poder bancario-político. Teniendo en cuenta que el Ayuntamiento y la Generalitat están en manos de la derecha catalana, que es como un pp con acento de la zona, que el centro okupado tantos años por las jóvenes izquierdas comunistas era un incordio al que no atinaban a despachar sin provocar enfado e indignación en el barrio donde Can Vies era ya una institución y un monumento reivindicativo del pasado luchador y viendo por las encuestas que nunca se publican, que Podemos iba a dar revolcón al consorcio "bi", y que Podemos se nutre en gran parte de una juventud de izquierdas, es muy posible que se planificase aposta el desalojo a la fuerza unos días antes de las elecciones al Parlamento Europeo, justo, para que las votaciones coincidiesen con las más que evidentes respuestas airadas de la juventud y del barrio, en el que la izquierda social catalana es ya un clásico desde el siglo XIX.
No ha servido de nada el despliegue de atrocidades y de abusos, ni a falta de diálogo y de escucha. Podemos ha barrido tenderetes y cooperado al por mayor a la caída en picado del bipartidismo, se ha derribado un símbolo ciudadano en venganza, Can Vies, pero ha nacido una resistencia que no se puede derrumbar con excavadoras. Querían derribar el edifico con los ideales de los jóvenes. Aniquilar un núcleo de convivencia y cultura popular. Ahora los han convertido en héroes urbanos y les han estimulado para construir y reinventar otro espacio en el que crecer como ciudadanos con conciencia. Así funcionan estos lacastícolas tan torpes como retorcidos, tan dishábiles en humanidad y lucidez como avariciosos y cleptócratas.
Se echa de menos una prensa veraz, seria, rigurosa, que deje de lado los relámpagos del flash del aturdimiento y el impacto superficial instantáneo y convoque la conciencia con responsable imparcialidad. Aunque también esa carencia mediática tiene su lado bueno, y es que para llenar el vacío de verdad, impulsa la necesidad ciudadana de investigar y ver con sus propios ojos para opinar con su propia opinión sin "orientadores mediáticos" a sueldo de la fabricación del consentimiento. Que al parecer es el negocio más próspero. La burbuja de la noticia a gusto del manipulador que paga, manda y dirige los enjuagues. Es mucho peor la mentira que la ignorancia. La ignorancia tiene solución, la mentira no, porque su única solución es la verdad y la verdad acaba con la mentira, aunque para descubrirla es necesario que la mentira con su toxicidad egocéntrica no nos haya destruido previamente la conciencia a base de erosionar el alma y la mente. Y ellos lo saben.
Can Vies antes de que la derribasen el pasado lunes 26 de mayo por orden municipal.
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Es alucinante. Han derribado medio edificio y ahora quieren dialogar, adoptar el papel de los "buenos" y civilizados frente a los malísimos "antisistema. Por lo pronto ahí el único destroyer del sistema cultural del barrio y de un símbolo del patrimonio histórico es el propio Ayuntamiento. Qué poquísima vergüenza o qué nivel borderline cognitivo. ¿Entonces qué pretendían derribándolo si había posibilidad de encontrar motivos para detener el derribo? ¿O es que cambian de idea como de camisa? ¿Qué pasa, que se les ha aparecido la Virgen de Montserrat o que están siendo una vergüenza social y han perdido el norte y no saben hacia donde mirar que no se vean en ridículo? ¿Qué plan urbanístico era ése? ¿Y ahora dejan todo a medio derribar lleno de escombros que no había y a los vecinos que lo usaban, sin local de reunión? ¿A qué han jugado con ese edificio y con ese barrio y con esa ciudad? ¿Favorecer ahora un clima de diálogo a golpe de piqueta y derribo, para conseguir qué? ¿Es de recibo emplear los presupuestos municipales para jugar así con ellos: ahora os presiono, ahora cedo y aflojo porque no quiero pasar por lo que soy, una piraña acosadora en vez de un Ayuntamiento? ¿Pero esto qué es? Con razón los okupas exigen la dimisión del alcalde pelele e incompetente...que ordena al buen tuntún cualquier cosa sin pensar primero en las consecuencias de sus órdenes. Los jóvenes okupas tienen más razón que un santo al pedir la dimisión de Trías y Martí. Por inútil y creador de conflictos urbanos absolutamente innecesarios.
La casta y la pasta están de pena. Se ve que tantos billete de 500 colocados en tantos sitios obstruyen las neuronas y no dejan pensar ni razonar más allá de la chequera y de la caja fuerte. Que asquito poddió! Pobres catalanes normales; esto no lo cura la independencia ni la soberanía sino la decencia y la lucidez de la ética social y personal, y de eso hay poco entre los oligarcas de cualquier nacionalidad peninsular, por lo que estamos comprobando; ahora resulta que Cataluyna va a ser España aunque no quiera. La misma sangre corrupta parece que corre por las venas del tejido político. A ver, si no es cosa de las nacionalidades sino de los mismos sinvergüenzas que abusan igual en todas partes...Hermanos catalanes, liberémonos juntos y solidariamente de la casta mandándola a freír espárragos y ya veréis lo fácil que resulta gobernarse codo con codo, cada uno en su lengua, en su cultura y mucho cariño para compartirlas y aprenderlas mutuamente por amor y no por la fuerza impositiva, sin los baúles rancios y podridos de tanta corrupción a costa nuestra. De todos los pueblos de Celtiberia.
Can Vies antes de que la derribasen el pasado lunes 26 de mayo por orden municipal.
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CONFLICTO EN BARCELONA
CARLOS MÁRQUEZ DANIEL / Barcelona
El ayuntamiento detiene la demolición para
"favorecer un clima de diálogo", pero los okupas exigen la dimisión de
Trias y Martí y aseguran que no quieren negociar con el consistorio (El Pêriódico)
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Es alucinante. Han derribado medio edificio y ahora quieren dialogar, adoptar el papel de los "buenos" y civilizados frente a los malísimos "antisistema. Por lo pronto ahí el único destroyer del sistema cultural del barrio y de un símbolo del patrimonio histórico es el propio Ayuntamiento. Qué poquísima vergüenza o qué nivel borderline cognitivo. ¿Entonces qué pretendían derribándolo si había posibilidad de encontrar motivos para detener el derribo? ¿O es que cambian de idea como de camisa? ¿Qué pasa, que se les ha aparecido la Virgen de Montserrat o que están siendo una vergüenza social y han perdido el norte y no saben hacia donde mirar que no se vean en ridículo? ¿Qué plan urbanístico era ése? ¿Y ahora dejan todo a medio derribar lleno de escombros que no había y a los vecinos que lo usaban, sin local de reunión? ¿A qué han jugado con ese edificio y con ese barrio y con esa ciudad? ¿Favorecer ahora un clima de diálogo a golpe de piqueta y derribo, para conseguir qué? ¿Es de recibo emplear los presupuestos municipales para jugar así con ellos: ahora os presiono, ahora cedo y aflojo porque no quiero pasar por lo que soy, una piraña acosadora en vez de un Ayuntamiento? ¿Pero esto qué es? Con razón los okupas exigen la dimisión del alcalde pelele e incompetente...que ordena al buen tuntún cualquier cosa sin pensar primero en las consecuencias de sus órdenes. Los jóvenes okupas tienen más razón que un santo al pedir la dimisión de Trías y Martí. Por inútil y creador de conflictos urbanos absolutamente innecesarios.
La casta y la pasta están de pena. Se ve que tantos billete de 500 colocados en tantos sitios obstruyen las neuronas y no dejan pensar ni razonar más allá de la chequera y de la caja fuerte. Que asquito poddió! Pobres catalanes normales; esto no lo cura la independencia ni la soberanía sino la decencia y la lucidez de la ética social y personal, y de eso hay poco entre los oligarcas de cualquier nacionalidad peninsular, por lo que estamos comprobando; ahora resulta que Cataluyna va a ser España aunque no quiera. La misma sangre corrupta parece que corre por las venas del tejido político. A ver, si no es cosa de las nacionalidades sino de los mismos sinvergüenzas que abusan igual en todas partes...Hermanos catalanes, liberémonos juntos y solidariamente de la casta mandándola a freír espárragos y ya veréis lo fácil que resulta gobernarse codo con codo, cada uno en su lengua, en su cultura y mucho cariño para compartirlas y aprenderlas mutuamente por amor y no por la fuerza impositiva, sin los baúles rancios y podridos de tanta corrupción a costa nuestra. De todos los pueblos de Celtiberia.
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