Querido pp, nos encantaría que todos tus delitos de corrupción fuesen como este crimen de lesa humanidad andalusí, perpetrado por Tere Rodríguez, un ejemplo malísimo para tu forring office sin límites. Ya te vale...
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Un síntoma indudable y preocupante de nuestra errática transición es la actitud del pp y de vox, su socio y heredero, en las denuncias contra Podemos y la actitud del Poder Judicial admitiendo el trámite con toda normalidad.
¿Cómo es posible que un partido corrupto hasta las trancas que tuvo que ser apartado del Gobierno por su corrupción insoportable, con la sentencia incluida del TS, se pueda admitir como denunciante creíble de nada ni de nadie? Un partido que está tratando de convertir en delito lo que no lo es, por ejemplo, el hecho de que los gestores públicos de Podemos tengan el compromiso ético, propuesto y votado en su día por todos los círculos asamblearios, de aportar una parte de sus sueldos políticos para la creación de un fondo para la ayuda social en barrios y sectores socialmente necesitados y olvidados por las instituciones?
También se entiende que no crean posible la donación de fondos en unos políticos que como ellos consideran y perpetran, están ahí para forrarse, ya que, como Rafael Blasco dejó cristalino, son capaces de usar el dinero de la ayuda a ONGs para montarse una empresa inmobiliaria privada con el presupuesto del dinero público. No es una broma, es por desgracia el delito que le llevó a la cárcel, los tribunales amigos no pudieron ningunear la evidencia. Y claro, piensa el ladrón que todos son de su condición. ¿Quién va a ser tan tonto, que pudiendo forrarse regale medio sueldo a los demás, dónde se ha visto algo semejante, quién va a ir de chulito compasivo para dejar en evidencia que forrarse con el dinero público es indecente si hasta el rey lo ha hecho y no pasa nada, de qué van estos niñatos comunistas, terroristas, separatistas y podemistas para acabarlo de rematar?
También se entiende que no crean posible la donación de fondos en unos políticos que como ellos consideran y perpetran, están ahí para forrarse, ya que, como Rafael Blasco dejó cristalino, son capaces de usar el dinero de la ayuda a ONGs para montarse una empresa inmobiliaria privada con el presupuesto del dinero público. No es una broma, es por desgracia el delito que le llevó a la cárcel, los tribunales amigos no pudieron ningunear la evidencia. Y claro, piensa el ladrón que todos son de su condición. ¿Quién va a ser tan tonto, que pudiendo forrarse regale medio sueldo a los demás, dónde se ha visto algo semejante, quién va a ir de chulito compasivo para dejar en evidencia que forrarse con el dinero público es indecente si hasta el rey lo ha hecho y no pasa nada, de qué van estos niñatos comunistas, terroristas, separatistas y podemistas para acabarlo de rematar?
Ya fue tremendo el caso de la denuncia y ataque sin fuste al Presidente socialista de la Diputación de València, culpándole de una corrupción indemostrable hasta la fecha de hoy, precisamente una denuncia perpetrada por el pp valenciano, que junto al de Madrid no tienen nada que envidiar a la mafia siciliana o a la ndragheta napolitana. Está claro que la Justicia en España es otro territorio comanche como asignatura pendiente de la ínclita transición de marras, indudablemente contaminada por la misma normalización de lo corrupto, convertida en quiste inextirpable del sistema.
Estas tremendas anomalías donde se mezclan inercias dogmáticas, amoralidad institucionalizada, irresponsabilidad que no distingue ni tiene capacidad de comprender lo que Motesquieu llamó L'esprit des lois y que al parecer en la cultura española pasada por el franquismo y su monarquía derivada no se ha comprendido o no se ha estudiado lo suficiente. Parece imposible que abogados pasados por la Universidad no hayan alcanzado a entender qué significa el Derecho y el Deber, -al margen de cualquier ideología o interés personal o de grupo- ni qué valor pueden tener unas leyes aplicadas sin ética alguna, ni qué autoridad auténtica y respetable aportan aplicaciones corruptas de las leyes manipulables a gusto del cacique de turno. Este deterioro "legalista" pero tan inhumanamente ilegítimo como éticamente ilícito, es el resultado sociológico de cuarenta años de indecencia, en los que la ley solo fue la fregona y la bayeta de una dictadura que solo supo sostenerse a base de manejar el terror, la prisión y la pena de muerte como armas defensivas de su discapacidad gestora. Su filosofía mixtificada durante la interminable transición, para el pp, y el poder judicial a su servicio mediante un estado de connivencia campechanísima consiste en convertir la justicia en un mercadillo y la abogacía en un método para pervertir precisamente el espíritu de las leyes a favor del sistema que permite hacer de las capas sayos ad hoc. Pues unas leyes desprovistas de la inteligencia ética del espíritu solo son trampas y zancadillas con que tumbar los recursos de la propia justicia para tener sentido y razón de ser.
Estas barbaridades que resultan horripilantes a las conciencias despiertas y en activo, para ese compendio de nulidades éticas y verdaderamente tóxicas que está expandido como una mancha de aceite por el mapa patriotero, son el pan suyo de cada día y una enfermedad crónica para la sociedad española, que se balancea entre la connivencia de los gerifaltes y sostenedores domesticados de esa estrambótica "normalidad" y los que no la entienden pero la desprecian y se burlan de ella, de sus enredos, de su postureo y de su cinismo, mientras en la tierra de nadie se quedan las víctimas, es decir, los que por error y no por delito se han equivocado y en vez de ser asesorados, reeducados y corregidos por la misma ley, acaban siendo condenados y desprestigiados por ella, en manos de unos gestores de Justicia que están para el arrastre, pero que como pasa con la monarquía, son intocables y sus interpretaciones terribles de las leyes, quedan impunes como absolutos.
De nada sirve poner el cascabel al gato si los ratones han sido adiestrados para bailar al son del cascabel e incluso para aplaudir al gato que se los come constantemente, algo que los ratones se han habituado a considerar "normal". Ese panorama anómalo, política y socialmente enfermo, es el que domina esta sociedad, que en su ignorancia asumida como hábito normal confunde anarquismo con desorden y caos, libertad con egoísmo deplorable y república con catástrofe nacional, mientras se entronizan como virtudes más valoradas una monarquía de oscuras procedencias, corrupción, procesiones, banderas, fútbol, colocones, chanchullos y compadreo de complicidades turbias que den beneficios sin mirar las consecuencias ni las causas son los valores intocables del cotarro, que es en sí mismo un desorden básico de valores, un caos "ordenado", una calamidad bendecida y convertida en romería o en corrida de toros o en pelea de gallos o en granja depredadora de animales maltratados o en reyes sin vergüenza ni gota de pudor que huyen con el botín sin que l'esprit des lois les importe lo más mínimo.
En semejante encebollado es imposible que una democracia pueda tener sentido ni realidad verdadera ni implantación natural, porque la conciencia está missing y su lugar lo ocupa la "estabilidad" de un sistema de togas, puñetas de encaje y monarcas sacados de un comic de humor negro, pillado con alfileres y chinchetas a la realidad inevitable que lo sacude sin parar.
Este mismo mejunje de confusiones y carencia de valores sólidos y pedagógicos es el que hace posible que Pablo Iglesias haya perdido las garantías de credibilidad con su numerito de Galapagar, que no es delito ni mucho menos, pero sí es una grave incongruencia que socava los valores creíbles de Podemos. ¿Habría tenido Julio Anguita el cariño, la admiración, el respeto y la credibilidad que tuvo siempre si se hubiese comprado un chalet en La Moraleja o en Galapagar? Si a pesar de su humildad, de su inteligencia y su impecable transparencia ejemplar, la corte de los milagros le llamaba " el califa"...cuando los califas eran los que impedían que el mensaje y el ejemplo de Julio alcanzase el lugar que le correspondía y España necesitaba como el comer...
Hay que estar muy ciegos para dejarse embaucar por las glorias y pompas de semejante "democracia". Y los medios de comunicación deberían ser los primeros en darse cuenta y comprender el campo minado que pisan a la hora de fomentar la misma confusión endémica que padece esta tierra desnortada.
Sólo en esa olla podrida tiene explicación que lo más sano que ha hecho Podemos: crear un fondo de ayuda social para compartir en proyectos solidarios con parte del dinero que ganan y no necesitan para vivir, -Teresa Rodríguez es un ejemplo palpable- ¡y que eso sea considerado delito!, mientras la basura del pp sigue intacta sin que la Justicia lo impida, teniendo en cuenta que debería ser un partido inhabilitado para las funciones públicas por su historial, como lo debería haber sido el Psoe de Felipe González y Alfonso Guerra, Luis Roldán, el BOE, el GAL, etc, etc...
Psoe y pp, con un curriculum como el que arrastran, deberían haberse disuelto y refundado hace años con elementos más decentes, por orden judicial, algo que tal vez sería posible en una república democrática con un federalismo municipalista cooperativo que les exigiera unos niveles imprescindibles de decencia representativa, algo realmente inasequible en una monarquía en la que el Jefe del Estado puede ser Rinconete, Cortadillo, Arsenio Lupin, o Luis Candelas sin que eso tenga la menor importancia, mientras, por supuesto, se siga llamando Borbón.
Si se vive en una cloaca no se puede esperar que esa cloaca no apeste ni contamine todo lo que toca y que todo lo que está pensado y realizado por ella esté impecable y sea ejemplar. Los cactus no producen jazmines ni la medusas dan besitos sin producir urticaria.
De todos modos, Podemos, la izquierda social y la ciudadanía más decente y menos teledirigida, no deberían/deberíamos creerse/nos a salvo del lodazal, porque todos los españoles y españolas actuales hemos recibido el mismo legado, en la calle, en la escuela, en el instituto, en la facultad, en el parque, en el bar de la plaza, en la tienda, en el taxi, en el cortinglés, en la parroquia o en gimnasio y hasta en la biblioteca o en la sede del "partido" hemos respirado el mismo aire de alcanfor y telarañas normalizadas y bendecidas, y hemos desarrollado mecánicamente una necesaria capacidad de adaptación al medio en que hemos nacido sin poderlo evitar y que nos ha modelado el modo de ver y de mirar el mundo desde nuestro terraplén.
Por eso no bajemos la guardia en nuestro mundo personal, es muy fácil derrapar y seguir rutinas conductuales y no dar valor a la conciencia en pro de "ganar" terreno, poder, influencia, razones y herramientas que tantas veces son fines poco recomendables disfrazados de medios "necesarios" y hasta "justos" y aprendidos a veces como algo valiente y ejemplar sin que se sea conscientes en realidad de que ese aprecio es posible porque se ha visto en personas queridas y admiradas, más que por un juicio objetivo de los hechos en sí. No nos educa lo que nos cuentan, sino el ejemplo que vemos en la gestión práctica. Y con demasiada frecuencia a lo afín se le exige mucha menos garantía y credibilidad que a lo diverso y más si es lo opuesto.
La "lucha" y el enfrentameinto constante por el poder solo produce egopatía ganadora y rencor perdedor. Torpeza estéril, que por una miserable egolatría que considera "honra" destroza todo lo que no es lo propio aunque sea mejor y más avanzado. De modo que una legislatura no deja aportar nada nuevo y necesario, porque se pierde en remendar rotos y descosidos sin que importe siquiera si en realidad no es un ritual de soberbia estúpida lo que entretiene el tiempo y no permite gobernar, desgobernando, para ponerse a sí mismos en el podium del desastre. Ese es el juego más torpe y destructivo del bipartidismo:enteder la oposición como un combate de boxeo que deja KO al gobierno en activo. Una oposición que solo sabe hacer acoso y derribo del bien común y que cuando gobierna aumenta la riqueza de una minoría a costa de un aumento escandaloso de la pobreza, la explotación y el abuso social, no está en condiciones de gobernar nada mientras no aprenda a cooperar en vez de torear.
Es deplorable y deberían existir leyes en la Constitución que permitiesen la expulsión de gobiernos y oposiciones tan inútiles como indignas, de partidos declaradamente invotables en todo estado que sea demócrata de verdad.
No luchemos contra nada ni contra nadie: realicemos, pongamos en marcha, sembremos y cultivemos lo que que queremos ser para mejorar lo que hemos heredado y no queremos repetir. Así innovaremos en el terreno del que depende el éxito verdadero y eficaz de nuestra misión: conócete a ti mismo y conocerás al Otro, para eso hay que salir del feto social y mediático en que naces y aprender mediante una educación sana a descubrir el potencial humano que respira y vive en ti, más allá de lo aparente, para que la manifestación de algo sea auténtica y válida, primero se tiene que descubrir el valor sólido y firme de ese algo dentro de nosotros mismos, no somos solo deseo, fijación, seguridad, rabietas, aplausos, dogmas y circunstancias, para que todo eso sea válido y tenga sentido, y no se quede en ilusiones, en solo efectos que vienen y van, hay que estar internamente despiertos y vigilantes con nuestras conductas, nuestras ideas y nuestras emociones, tendencias e inclinaciones y decisiones, porque no vivimos solos, con la ética como maestra incansable y el bien común como mapa y brújula, muy atentos a los motivos y a la canalización hacia fuera de todo el conjunto. Siendo un mix entre Parménides, el de la tortuga y Aquiles, y Heráclito, el del panta rei = todo fluye.
La filosofía vital, como la verdadera espiritualidad, no es teoría, no es una vía previa e imprecisa de escape, para hablar de algo, es el pan consecuente que la realidad amasa con nuestras manos y cuece en el horno de la conciencia y que luego reparte gratis como un bocata de aroma contagioso que despierta y regenera lo que envuelve, penetra sin forzar nada y por ello nutre y sana. Es el compromiso de un aprendizaje auténtico y práctico de la realidad, no la excusa para elucubrar y enredar conceptos, sino para aclararse y aclarar. Lo mismo puede aplicarse a las ciencias políticas antes de ponerse a fundar partidos o presentarse a unas elecciones.
El aprendizaje es constante o no es aprendizaje, sino un simulacro, un camelo. Así que , al tajo. Porque sí se puede. Pero no solo por poder mandar, sino sobre todo por ser capaces de respetar y servir al pueblo que te vota desde unos parámetros que para ser políticos y jurídicos e institucionales, primero y antes que nada, deben ser éticos. Y si esa conditio sine qua non no se consigue, antes que ir a los tribunales contra nadie para aplastarlo y quitarle el escaño o el encargo estatal, se debería aprender a dimitir cuando "no se puede". Y esto vale para todos, Vox, PP, Psoe, Podemos, C's y toda la santa compaña. Desde el analfabetismo moral es imposible gobernar nada dignamente, porque desde la amoralidad tanto en lo público como en lo privado, solo se puede ser depredadores y corruptos.
Uy, casi se me olvida una última sugerencia, la clave esencial para el cambio de la enfermedad a la salud ciudadana ...
El mejor remedio homeopático para la confusión de poderes, de instituciones y de gestión política empieza por unas buenas dosis de Belladonna Respublicana
Estas barbaridades que resultan horripilantes a las conciencias despiertas y en activo, para ese compendio de nulidades éticas y verdaderamente tóxicas que está expandido como una mancha de aceite por el mapa patriotero, son el pan suyo de cada día y una enfermedad crónica para la sociedad española, que se balancea entre la connivencia de los gerifaltes y sostenedores domesticados de esa estrambótica "normalidad" y los que no la entienden pero la desprecian y se burlan de ella, de sus enredos, de su postureo y de su cinismo, mientras en la tierra de nadie se quedan las víctimas, es decir, los que por error y no por delito se han equivocado y en vez de ser asesorados, reeducados y corregidos por la misma ley, acaban siendo condenados y desprestigiados por ella, en manos de unos gestores de Justicia que están para el arrastre, pero que como pasa con la monarquía, son intocables y sus interpretaciones terribles de las leyes, quedan impunes como absolutos.
De nada sirve poner el cascabel al gato si los ratones han sido adiestrados para bailar al son del cascabel e incluso para aplaudir al gato que se los come constantemente, algo que los ratones se han habituado a considerar "normal". Ese panorama anómalo, política y socialmente enfermo, es el que domina esta sociedad, que en su ignorancia asumida como hábito normal confunde anarquismo con desorden y caos, libertad con egoísmo deplorable y república con catástrofe nacional, mientras se entronizan como virtudes más valoradas una monarquía de oscuras procedencias, corrupción, procesiones, banderas, fútbol, colocones, chanchullos y compadreo de complicidades turbias que den beneficios sin mirar las consecuencias ni las causas son los valores intocables del cotarro, que es en sí mismo un desorden básico de valores, un caos "ordenado", una calamidad bendecida y convertida en romería o en corrida de toros o en pelea de gallos o en granja depredadora de animales maltratados o en reyes sin vergüenza ni gota de pudor que huyen con el botín sin que l'esprit des lois les importe lo más mínimo.
En semejante encebollado es imposible que una democracia pueda tener sentido ni realidad verdadera ni implantación natural, porque la conciencia está missing y su lugar lo ocupa la "estabilidad" de un sistema de togas, puñetas de encaje y monarcas sacados de un comic de humor negro, pillado con alfileres y chinchetas a la realidad inevitable que lo sacude sin parar.
Este mismo mejunje de confusiones y carencia de valores sólidos y pedagógicos es el que hace posible que Pablo Iglesias haya perdido las garantías de credibilidad con su numerito de Galapagar, que no es delito ni mucho menos, pero sí es una grave incongruencia que socava los valores creíbles de Podemos. ¿Habría tenido Julio Anguita el cariño, la admiración, el respeto y la credibilidad que tuvo siempre si se hubiese comprado un chalet en La Moraleja o en Galapagar? Si a pesar de su humildad, de su inteligencia y su impecable transparencia ejemplar, la corte de los milagros le llamaba " el califa"...cuando los califas eran los que impedían que el mensaje y el ejemplo de Julio alcanzase el lugar que le correspondía y España necesitaba como el comer...
Hay que estar muy ciegos para dejarse embaucar por las glorias y pompas de semejante "democracia". Y los medios de comunicación deberían ser los primeros en darse cuenta y comprender el campo minado que pisan a la hora de fomentar la misma confusión endémica que padece esta tierra desnortada.
Sólo en esa olla podrida tiene explicación que lo más sano que ha hecho Podemos: crear un fondo de ayuda social para compartir en proyectos solidarios con parte del dinero que ganan y no necesitan para vivir, -Teresa Rodríguez es un ejemplo palpable- ¡y que eso sea considerado delito!, mientras la basura del pp sigue intacta sin que la Justicia lo impida, teniendo en cuenta que debería ser un partido inhabilitado para las funciones públicas por su historial, como lo debería haber sido el Psoe de Felipe González y Alfonso Guerra, Luis Roldán, el BOE, el GAL, etc, etc...
Psoe y pp, con un curriculum como el que arrastran, deberían haberse disuelto y refundado hace años con elementos más decentes, por orden judicial, algo que tal vez sería posible en una república democrática con un federalismo municipalista cooperativo que les exigiera unos niveles imprescindibles de decencia representativa, algo realmente inasequible en una monarquía en la que el Jefe del Estado puede ser Rinconete, Cortadillo, Arsenio Lupin, o Luis Candelas sin que eso tenga la menor importancia, mientras, por supuesto, se siga llamando Borbón.
Si se vive en una cloaca no se puede esperar que esa cloaca no apeste ni contamine todo lo que toca y que todo lo que está pensado y realizado por ella esté impecable y sea ejemplar. Los cactus no producen jazmines ni la medusas dan besitos sin producir urticaria.
De todos modos, Podemos, la izquierda social y la ciudadanía más decente y menos teledirigida, no deberían/deberíamos creerse/nos a salvo del lodazal, porque todos los españoles y españolas actuales hemos recibido el mismo legado, en la calle, en la escuela, en el instituto, en la facultad, en el parque, en el bar de la plaza, en la tienda, en el taxi, en el cortinglés, en la parroquia o en gimnasio y hasta en la biblioteca o en la sede del "partido" hemos respirado el mismo aire de alcanfor y telarañas normalizadas y bendecidas, y hemos desarrollado mecánicamente una necesaria capacidad de adaptación al medio en que hemos nacido sin poderlo evitar y que nos ha modelado el modo de ver y de mirar el mundo desde nuestro terraplén.
Por eso no bajemos la guardia en nuestro mundo personal, es muy fácil derrapar y seguir rutinas conductuales y no dar valor a la conciencia en pro de "ganar" terreno, poder, influencia, razones y herramientas que tantas veces son fines poco recomendables disfrazados de medios "necesarios" y hasta "justos" y aprendidos a veces como algo valiente y ejemplar sin que se sea conscientes en realidad de que ese aprecio es posible porque se ha visto en personas queridas y admiradas, más que por un juicio objetivo de los hechos en sí. No nos educa lo que nos cuentan, sino el ejemplo que vemos en la gestión práctica. Y con demasiada frecuencia a lo afín se le exige mucha menos garantía y credibilidad que a lo diverso y más si es lo opuesto.
La "lucha" y el enfrentameinto constante por el poder solo produce egopatía ganadora y rencor perdedor. Torpeza estéril, que por una miserable egolatría que considera "honra" destroza todo lo que no es lo propio aunque sea mejor y más avanzado. De modo que una legislatura no deja aportar nada nuevo y necesario, porque se pierde en remendar rotos y descosidos sin que importe siquiera si en realidad no es un ritual de soberbia estúpida lo que entretiene el tiempo y no permite gobernar, desgobernando, para ponerse a sí mismos en el podium del desastre. Ese es el juego más torpe y destructivo del bipartidismo:enteder la oposición como un combate de boxeo que deja KO al gobierno en activo. Una oposición que solo sabe hacer acoso y derribo del bien común y que cuando gobierna aumenta la riqueza de una minoría a costa de un aumento escandaloso de la pobreza, la explotación y el abuso social, no está en condiciones de gobernar nada mientras no aprenda a cooperar en vez de torear.
Es deplorable y deberían existir leyes en la Constitución que permitiesen la expulsión de gobiernos y oposiciones tan inútiles como indignas, de partidos declaradamente invotables en todo estado que sea demócrata de verdad.
No luchemos contra nada ni contra nadie: realicemos, pongamos en marcha, sembremos y cultivemos lo que que queremos ser para mejorar lo que hemos heredado y no queremos repetir. Así innovaremos en el terreno del que depende el éxito verdadero y eficaz de nuestra misión: conócete a ti mismo y conocerás al Otro, para eso hay que salir del feto social y mediático en que naces y aprender mediante una educación sana a descubrir el potencial humano que respira y vive en ti, más allá de lo aparente, para que la manifestación de algo sea auténtica y válida, primero se tiene que descubrir el valor sólido y firme de ese algo dentro de nosotros mismos, no somos solo deseo, fijación, seguridad, rabietas, aplausos, dogmas y circunstancias, para que todo eso sea válido y tenga sentido, y no se quede en ilusiones, en solo efectos que vienen y van, hay que estar internamente despiertos y vigilantes con nuestras conductas, nuestras ideas y nuestras emociones, tendencias e inclinaciones y decisiones, porque no vivimos solos, con la ética como maestra incansable y el bien común como mapa y brújula, muy atentos a los motivos y a la canalización hacia fuera de todo el conjunto. Siendo un mix entre Parménides, el de la tortuga y Aquiles, y Heráclito, el del panta rei = todo fluye.
La filosofía vital, como la verdadera espiritualidad, no es teoría, no es una vía previa e imprecisa de escape, para hablar de algo, es el pan consecuente que la realidad amasa con nuestras manos y cuece en el horno de la conciencia y que luego reparte gratis como un bocata de aroma contagioso que despierta y regenera lo que envuelve, penetra sin forzar nada y por ello nutre y sana. Es el compromiso de un aprendizaje auténtico y práctico de la realidad, no la excusa para elucubrar y enredar conceptos, sino para aclararse y aclarar. Lo mismo puede aplicarse a las ciencias políticas antes de ponerse a fundar partidos o presentarse a unas elecciones.
El aprendizaje es constante o no es aprendizaje, sino un simulacro, un camelo. Así que , al tajo. Porque sí se puede. Pero no solo por poder mandar, sino sobre todo por ser capaces de respetar y servir al pueblo que te vota desde unos parámetros que para ser políticos y jurídicos e institucionales, primero y antes que nada, deben ser éticos. Y si esa conditio sine qua non no se consigue, antes que ir a los tribunales contra nadie para aplastarlo y quitarle el escaño o el encargo estatal, se debería aprender a dimitir cuando "no se puede". Y esto vale para todos, Vox, PP, Psoe, Podemos, C's y toda la santa compaña. Desde el analfabetismo moral es imposible gobernar nada dignamente, porque desde la amoralidad tanto en lo público como en lo privado, solo se puede ser depredadores y corruptos.
Uy, casi se me olvida una última sugerencia, la clave esencial para el cambio de la enfermedad a la salud ciudadana ...
El mejor remedio homeopático para la confusión de poderes, de instituciones y de gestión política empieza por unas buenas dosis de Belladonna Respublicana
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