martes, 24 de noviembre de 2015

La voz de Iñaki


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¿Hemos de actuar militarmente contra Daesh?

EL PAÍS  

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Vaya por Dios, Iñaki, ¿tú también? Bueno, en todas partes cuecen habas y tienes todo el derecho del mundo a interpretar la realidad a tu modo, que, en efecto, no es el mismo modo en que te situaste en 2003. Dices que aquella guerra estuvo pre-fabricada y es verdad, que todo se basó en la mentira y en la intriga política. Creo que además nos indignó absolutamente sufrir una represalia a causa de un ataque a Irak, que en España, excepto el pp, nadie deseaba. Simplemente, creo que entonces nosotros estábamos en el mismo caso de Hollande. Se atacó Irak con Aznar y el boomerang volvió, como ha pasado en París. Solo que nuestra respuesta política fue sacar las tropas de Irak en vez de bombardearlo a saco en represalia por el 11M. Una respuesta lúcida, sana, ética y humanitaria, que siempre agradeceremos a Rodríguez Zapatero y a su equipo.

En cuanto a las mentiras y trapisondas, no creo que haya una sola guerra que no las tenga en el fondo de sus intereses y chanchullos, en sus propósitos, en sus cábalas y en sus métodos. Es obvio que funcionando desde la transparencia y la cordura no se acaba nunca a bombazos. No hay guerras justas. Es imposible. La guerra siempre es el resultado de una falta gravísima de Justicia. Y no la soluciona el sumar más injusticia "justificada", para más inri.
Apelas, Iñaki, a que tal vez bombardear los enclaves del Daesh sea una opción conveniente posible y aplicable al caso; me pregunto si será tan fácil tener la seguridad de que bajo las bombas y los misiles aire-tierra no habrá civiles, pueblos enteros, que fenezcan en los bombardeos. ¿Quién asegura que sólo se bombardeen estrictamente objetivos tácticos y materiales bélicos? ¿Te fiarías de las 'verdades' que nos cuentan los mismos genocidas que han  asesinado sin compasión en Irak, Afganistán o Libia, alegando que allí había armas de destrucción masiva? 
No sé si una civilización merece ese nombre ni vale la pena, cuando para prevalecer sobre todas las cosas debe arrasar a otras civilizaciones sin escrúpulo alguno, tratando a los seres humanos, sus semejantes, a pesar de  la diversidad cultural, como a una plaga de insectos peligrosos. Primero te exprimo, me apodero de tus recursos, machaco tu integridad territorial, violo tus derechos, y cuando protestas y devuelves los golpes, te extermino a base de mi superioridad económica y tecnológica. Soy el primo de Zumosol, por si no habías caído en la cuenta.
¿Acaso no es también nuestro sistema económico y de producción arrasadora, una plaga devastadora para el Planeta, que otras culturas más sencillas sufren y soportan mientras que de acuerdo con sus dictadores y tiranos "amigos"son esquilmadas de materias primas, se contaminan sus tierras con nuestros detritus radiactivos y venenosos mientras ellos se contagian de nuestras maravillas de plástico y toxicidades múltiples?

Me falta la ética en todo esto, ¿o es que cuando las cosas se dificultan con armas la ética se convierte en estorbo en vez de ser la brújula y el mapa del trayecto, precisamente cuando la gravedad es más hiriente? Con Sócrates me pregunto si una vida tan banal y primitiva, tan inhumana y estúpida como para degradarnos con todas las razones ad hoc, habidas y por haber, vale la pena. Si resulta que la ética la dejamos para las tesis doctorales y los discursos eruditos o demagógicos y cuando se trata de aplicarla en lo más urgente y grave, en lo más esencial, se mira para otro lado y se vuelve al estado rupestre. A la caverna de Platón, atados de pies y manos de espaldas a la luz y frente al muro de las tinieblas, en el que se proyectan sólo las sombras de la realidad. Como en una película constante. Parece mentira que aún estemos viviendo así, y que hasta hayamos hecho del cine la realización de aquella metáfora, en vez de emplearlo para despertar del sopor y de un estado de esclavitud interior que es mucho peor que la esclavitud externa, porque nos priva de la visión, de la intuición profunda y de la lucidez. 

Lo de Siria y el Daesh no es una película de buenos y malos, no es un videojuego. Son vidas humanas como las nuestras, iguales. Son derechos pisoteados, son malos tratos políticos, económicos, sociales y culturales. Se ha llegado a prohibir que las mujeres musulmanas lleven su velo,alegando que es un tabú religioso, pero, en cambio, lo de nuestras monjas no tiene importancia, porque no es un tabú religioso sino el símbolo del poder de la religión (!?). Es un ejemplo solamente, para señalar la falta de sensibilidad y de delicadeza con la diversidad cultural; es esa superficialidad la que nos separa, la que nos cuartea y discrimina, la que hace posible el odio de las comunidades marginales. Y creer que ese factor básico no está en la base de la guerra y de los ataques, junto con los intereses económicos y estratégicos es no ver la realidad en su conjunto. A la guerra solo se llega así, con el desprecio por el otro, con el desconocimiento, pensando lo peor por adelantado, dando por supuesto que nosotros somos la repera  y la cerrazón en que nuestras razones siempre son "la razón", la única, la verdadera. Y cuando al otro lado de la diferencia encontramos culturas tan obtusas y cerradas como la nuestra, con las mismas fijaciones , fallos y prepotencias, en vez de vernos en su espejo y apresurarnos a cambiar de actitudes, la emprendemos a tiros y a bombazos para que nadie se nos adelante en la iniciativa.
Para ser lo más desarrollado del Planeta y lo más próspero, la mentalidad occidental es muy pobre en visión y muy contundente en calentarse y atizar, en justificar su barbarie a la sombra de la barbarie de los otros. Debería plantearse que dos no pelean si uno no quiere y que tanta guerra no es normal si Occidente fuese lo que pretende e imagina ser. Y que también es hacer la guerra aprovecharse de otros países más pobres y sacrificarlos para obtener beneficios de su debilidad o de su desconocimiento y que las dos guerras mundiales y el rosario de conflictos "de baja intensidad"-según Kissinger- que derivaron de ellas, no habrían sido posibles si la actitud de Occidente no hubiese sido tan beligerante, cosa "normal", por otra parte, teniendo en cuenta que es el negocio de armas y tecnología en comandita, lo que le da la superioridad económica, financiera y mercantil. La moneda que compra las armas y las tecnologías del exterminio es mucho más cara que el dinero. Son las vidas humanas y de eso nuestra civilización(¿?) debería darse cuenta ya, aunque solo sea por egoísmo y por coherencia con la declaración universal de los supuestos Derechos Humanos, que se pasa por la suela de la bota militar y financiera. 
Habría que revisar las posturas que justifican la guillotina para el enemigo y la absolución para el camarada. Pablo Iglesias dixit.
Llamar "buenismo" a la reflexión que plantea la inutilidad letal de los conflictos armados ya es el colmo de los tópicos irreflexivos. Y de la actitud destroyer. Siempre hay soluciones posibles y esfuerzos que hacer y hay que agotarlos todos y cuando se agoten, crear más puertas que abrir y más caminos que transitar. Pero eso sólo se consigue con verdadera inteligencia que posibilite una limpieza de miras y abandonando la pillería y el pillaje camuflados de política. Haciendo posible que sea la decencia de los sabios la  que intervenga en las conversaciones de paz y no los birlibirloques deshonestos de los negociantes y traficantes en vidas humanas. 

Y para terminar una pregunta: ¿qué nos está pasando para que siendo  capaces de hacer viajes espaciales, de inventar el automóvil, el submarino, la telefonía, la tv e internet, los satélites artificiales, las vacunas y fármacos maravillosos o los aviones, no seamos capaces de impedir y desactivar las guerras? ¿Qué estamos haciendo tan sumamente mal? ¿No será un gravísimo error considerar justo y necesario un genocidio disfrazado de 'legítima defensa' si nosotros hemos provocado y facilitado el conflicto con nuestras políticas manipuladoras y ávidas de poder y ganancias? ¿Tan torpes andamos que sólo vemos los resultados pero no vemos las causas de lo que nos pasa?? Da la impresión de que se actúa en estos casos, como los malos médicos, que sólo se fijan en los síntomas para curar las enfermedades, pero nunca investigan los porqués de la sintomatología y no preguntan al paciente por su modo de vida, por su descanso y su reposo, por su alimentación, por sus actividades, por sus adicciones, por sus preocupaciones, por sus relaciones humanas o por su genética

Creo, desde mi modesta reflexión, que hemos ido construyendo la casa desde  el tejado y no nos damos cuenta de que sin cimientos esa casa no se sostiene por muy estupendo que nos parezca el diseño y extraordinarios los materiales.
Humildad, sabiduría y acierto, van de la mano. Igual que prepotencia, estupidez y fracaso.  

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Tal vez, la derecha debería hacerse mirar su incapacidad para relacionar causas y efectos y preguntarse por qué son precisamente su mentalidad y sus intereses lo que provoca, anima, justifica y jalea los conflictos más horribles de la humanidad. ¿Quizás porque el dinero que se gana en las guerras va a sus bolsillos directamente, ya que son los fabricantes y mercaderes de las armas asesinas? ¿Quizás porque es incapaz de concebir un mundo que aprenda a entenderse sin tener que matarse primero y dividiendo la única realidad que reconocen, como "vencedores y perdedores"? ¿No es acaso el gusto enardecido por la guerra una inclinación mucho más propia de los neanderthales que de los 'buenistas' civilizados? ¿No será que tú y tus colegas, Pablo Casado, sí que deberíais revisar vuestro viaje al futuro, porque seguramente habéis venido directamente del paleolítico,  inferior, obviamente, y estáis sobrepasados por lo que no entendéis y emocional e intelectualmente os desborda?
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El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, descalifica el manifiesto suscrito por alcaldes, activistas y personalidades de la cultura
Defiende como "irreprochable" la actitud de Rajoy desde que se produjeron los atentados en París
Casado ve "irresponsable" el texto 'No en mi nombre' contra los bombardeos y lo enmarca en el "buenismo" de la izquierda


El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, ha calificado de "irresponsable" el manifiesto 'No en nuestro nombre' que han suscrito activistas, personas del mundo de la cultura y alcaldes llamados 'del cambio' contra los bombardeos en Siria. El dirigente del PP enmarca la iniciativa en el "buenismo retrógrado" de la izquierda.
"Ese complejo de la izquierda europea de intentar buscar causalidad al terrorismo es algo que se tiene que hacer mirar", ha declarado Casado durante su intervención en el foro 'Jóvenes con Talento' organizado por Europa Press, al que han asistido otros dirigentes del PP como la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy.
Además, Casado ha defendido la actitud "irreprochable" que está manteniendo Mariano Rajoy desde que se produjeron los atentados de París, manteniendo informadas a todas las fuerzas políticas, y ha criticado que en algunos dirigentes de la oposición se "empiece a vislumbrar cierto partidismo".

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