Parece que una capa del sector informativo aún no acaba de juntar las piezas del puzle. Anoche, por ejemplo,en la entrevista que Ana Pastor en El Objetivo, le hizo a Alberto Garzón, volvió a salir el mismo mantra, con el que parte de los medios nos ronronean constantemente: ¿no es mucho más importante y urgente la preocupación por el paro, los recortes, la precariedad, los desahucios, etc, que esta manía por reclamar un referendum sobre el régimen del Estado y un debate entre monarquía y república?
Resulta un poco repetitivo y cargante, que una gran parte de periodistas parezca que no entiendan todavía la envergadura y el desarrollo del cambio social y político al que están asistiendo como espectadores remotos, como asomados al balcón de la curiosidad, mucho más que como elementos vivos de ese mismo cambio, que les va afectar, lo quieran o no, como a todos los ciudadanos.
Aclaremos algunos aspectos que debemos tener claros a este respecto:
1) El movimiento de conciencia ciudadana que comenzó su andadura en 2011 con el 15M, precisamente se inició y se ha curtido en esos gravísimos problemas, y se ha ido ocupando de ellos, de las personas y de sus derechos machacados, con iniciativas solidarias de barrio, de círculo, de banco de alimentos, de marchas por la dignidad, por la justicia, en mareas por sectores, hasta formar plataformas de apoyo social para impedir desahucios, acoger reivindicaciones, acompañar damnificados por el desempleo, el abandono, los recortes, la desinformación, pero todo eso es una labor callada y humilde que no se cacarea porque no la hacen los partidos, sino los ciudadanos.
2) Cada vez que los ciudadanos en este proceso de organización solidaria se han enfrentado y se enfrentan, a la administración para reivindicar algo, se han encontrado puertas cerradas, malos tratos, presiones, amenazas y falta de recursos por culpa de un Estado corrupto hasta las cejas, donde han ido descubriendo un trust de intereses enredados entre poder político pervertido y degradado por los intereses financieros y giratorios de sus miembros integrantes y nada íntegros. Lógicamente lo primero que han descubierto es que este desgraciado estado de dolor que soportan está causado no sólo por las circunstancias internacionales de una crisis, sino porque el Estado deshecho por la corrupción y la irresponsabilidad, por el gasto despilfarrador en altos cargos y el derroche y la rapiña de un trust mafioso-político-financiero, ha no tiene herramientas para gestionar dicha crisis, y ha llevado al país entero a un pozo sin fondo, del que no saben como salir, porque ni siquiera les preocupa. La prueba es que para ellos la urgencia no es el paro, ni los recortes, ni los sufrimientos, sino proteger la monarquía corrompida, obsesionarse con los votos y encuestas y acelerar a todo trapo la sucesión para que nada pueda cambiar en ese estado ruinoso para la ciudadanía, pero un chollo para ellos.
3) Una vez comprobada in situ tal evidencia, el paso siguiente de la ciudadanía ha sido descubrir la necesidad de un cambio de régimen inaplazable, que ha comenzado por la demostración de que el bipartidismo en estas condiciones es un miserable muro que impide el contacto natural entre ciudadanos y representantes, porque los partidos no mayoritarios son convidados de piedra en el hemiciclo. No se tienen en cuenta, no se les escucha ni se les hace el menor caso. Son inútiles y así pretenden pp y psoe que siga la cosa, lo mismo que el Jefe del Estado, cuya inutilidad para intervenir y ejercer sus funciones arbitrales y su poder de intervención en casos gravísimos como éste, ha sido además de manifiesta, trágica. Esa situación ha ido incubando en la ciudadanía el espíritu del cambio y la reforma del Estado, precisamente impulsado por la debacle del drama social, no para desentederse de él sino, sino todo lo contrario, para poderlo aliviar y resolver, exigiendo la eliminación de las causas derivadas de la pésima gestión de un Estado que no ha sabido superar la Transición y se ha quedado preso en ella, como en una red de inercias de la que no puede salir, y que han dado en llamar "estabilidad". Entonces los ciudadanos han dado el paso cuarto de este proceso:
4) Han tomado la iniciativa que los gestores no saben o no pueden o no quieren tomar, y aprovechando la abdicación del rey y la oportunidad para revisar el proceso del cambio generacional, creen que es un buen momento para plantearse que la respuesta sana a los efectos de la crisis económica pasa por reconocer y sanar el tejido enfermo, ciego y corrompido de las instituciones del Estado, que aún arrastra la soga de una monarquía que se "aceptó" a la fuerza y en un tiempo de oscuridad y de carencias democráticas absolutas, en el que hubo que inventarse un sistema endeble y pseudo democrático para salir del paso, algo provisional, pero que como todos se acomodaron a él se ha confundido con una verdadera democracia, cuando sólo ha sido una plutocracia más cerca de una mafia política que de un estado de derecho, en el que los ciudadanos han sido súbditos y nunca protagonistas de su historia, como si aún estuviésemos en el siglo XV o en el XIX, que para el caso fueron casi lo mismo a efectos evolutivos.
5) Lo que ahora exige la ciudadanía es que el poder que le corresponde debe ejercerlo para que esto sea una democracia y no una pantomima que, camuflada de "crisis", que ya amenaza con hacerse crónica, arruina a la mayoría y hace multimillonaria a la minoría dominante, lo cual indica la precariedad y la infatuación de ese pretendido "estado democrático", donde el bien común es una entelequia irrisoria. Cavilando y dialogando, estudiando y reflexionando, los ciudadanos libres y no afiliados a la nada partidócrata, han decidido que ya basta de estafas y después de debatir muy en serio, también se han decidido por hacerse presentes en el Estado por medio de Podemos. Es el primer paso, que hasta que se han convencido, no les apetecía dar, porque están asqueados del montaje y no querían ni tocarlo, pero al fin han visto que si no se plantan con las mismas herramientas, nunca podrían hacer ningún cambio ni ejercer su condición de empresarios estatales, o sea, los que contratan gestores para que les ayuden a llevar la empresa y a los que pagan con sus impuestos y a los que hay que despedir cuando no cumplen sus contratos; y en ello están y lo harán, por medio del voto y la participación activa en las reivindicaciones. En la medida que vayan despertando los ciudadanos, los partido al uso se irán vaciando de votos y hasta los que nunca votan, votarán con ellos. La mayoría natural será el bien común y no ideas partidistas que separan en vez unir, que deshumanizan en vez humanizarse y por eso se corrompen con tanta facilidad.
6) Lo que cierta prensa parece no haber captado aún es que si el cambio de modelo de estado es ya una reivindicación tan fuerte, a la altura de los problemas más urgentes, por algo será. No es por huir de esa realidad, sino para cambiarla y hacerla tan humana, que los problemas de los ciudadanos sean también los del Estado y no al revés, o sea, que el Estado hecho migas y pegado con cinta cello, como nos está sucediendo ahora, sea el principal problema para los ciudadanos.
Me dejó perpleja la tontuna de pregunta en la que Ana Pastor se lució: "¿Cómo podéis decir que hay una mayoría que quiere el referendum si hay muchos ciudadanos que no han salido a la calle a manifestarse por ello?" seguramente la chica no ha caído en la cuenta de que los que no salen en manifestación, también votan...Desde luego puede estar segura de que ese 1.250.000 votos de PODEMOS nunca se ha manifestado junto. Ains, hija, poddió!
Hoy acaban de publicar unas encuestas en las que PODEMOS bate el récord, pero el pp sigue ganando un montón de escaños aunque menos de los que tiene ahora. No es creíble lo del pp ni de coña. Sólo hay que preguntar por la calle,en el super, en las tiendas, en el metro, qué opinión tienen del gobierno y si le volverían a votar, sin nombrar siquiera a otros partidos, y anotar el número de respuestas. Veréis lo que hay y compararéis con lo que nos cuentan. Yo también hago mis encuestas y os invito a todos a que las hagáis y anotéis los resultados para contrastar y que los inventores del cuento chino se enteren de que les hemos pillao con el carrito del helao una vez más, esos que no dejan votar en el extranjero a nuestros hijos porque saben lo que van a elegir. Andan locos infiltrándose en los medios, en las encuestas, añadiendo números a las expectativas de voto y borrando pruebas en los procesos judiciales, metiendo en losmedios a presión pperos "modelnos" como el Borjamari ubícuo que debe ser el único menos impresentable y lo van a desgastar de tanto usarlo en plan canto rodado, de tertulia en tertulia, de ronda en ronda. Pobre chaval, parece honrado, pero ya despertará cuando le baje el subidón del "nene, tú vales mucho" y las urnas le enfrenten al shock de la dura realidad.
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