Maravillosa imagen de la marca España. Owen Jones hace un scanner exacto; así se ve desde fuera lo que no se consigue ver desde dentro.
Es imposible que los locos sean capaces de diagnosticarse a sí mismos, su locura es su "normalidad", los trastornados para ellos son los demás. Por eso necesitan ir al psiquiatra y ponerse a tratamiento dimisorio y regenerador ético cuanto antes. Es el caso español. El de la "pequeña España" del centro peninsular del "a por ellos oé". La que aún está anclada en el siglo XVI y para la que la natural plurinacionalidad períferica es traición y justificación de un terrorismo estatal. El nacionalismo sin pies ni cabeza que se nutre de banderas y tópicos sin fuste de emocionalidad manipulada que usa el concepto "patria" para esconder, justificar y arropar sus indecencias, a sus caciques y su sistema de inmundicias sin fin. Qué vergüenza da ser español, español, español...
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