Podemos y los 'comunes' se lanzan a explicar la plurinacionalidad a España
Aitor Riveiro
Pablo Iglesias y Xavier Domènech, en la presentación de 'Repensar la España plurinacional'.
DANI GAGO (PODEMOS)
La precampaña de las catalanas del 21 de diciembre ya está en marcha.
En Comú Podem, la candidatura que liderará Xavier Domènech, se juega en
las elecciones mucho más que su futuro político o el de Catalunya en
Comú. Los comunes, como se conoce al espacio
político que domina Ada Colau, es uno de los pilares del proyecto de
Pablo Iglesias a nivel nacional. Y uno de los principales exponentes del
concepto de plurinacionalidad que Podemos abandera desde sus orígenes
pero, sobre todo, desde que se fraguaron las confluencias para las
generales de diciembre de 2015.
Las elecciones
autonómicas del 21D convocadas por el Gobierno de Mariano Rajoy en
aplicación del artículo 155 de la Constitución se han convertido ahora
en el escaparate perfecto para un concepto que, para Podemos, implica no
solo el reconocimiento de la existencia de diferentes naciones dentro
de España. Es el significante que aglutina el espíritu constituyente con
el que se identifica Podemos desde 2014, heredado directamente del 15M.
Antes de la convocatoria, Podemos, Unidos Podemos
y Catalunya en Comú ya tenían previsto relanzar el concepto de
plurinacionalidad con una campaña que incluye una ruta de charlas por
diversas ciudades de España, con un acto central en Córdoba entre el 24 y
el 26 de noviembre.
La ruta, bautizada Cambiar España,
contará con la participación de los principales líderes de Podemos,
como Pablo Iglesias, Irene Montero, Pablo Echenique, Rafa Mayoral y
Noelia Vera, así como dirigentes de los comunes
como el propio Domènech o el teniente de alcalde de Barcelona y uno de
los principales colaboradores de Ada Colau, Gerardo Pisarello, que
asistirá a Córdoba. Además de la ciudad andaluza, la ruta pasará por La
Rioja, Navarra, Extremadura, y Castilla La Mancha.
Iglesias: "Catalunya también es plurinacional"
La precipitación de la convocatoria electoral ha modificado los planes
de Podemos y la presencia de Domènech en la gira será menor. Pero el
candidato de En Comú Podem sí ha participado en la presentación del
libro Repensar la España plurinacional, editado por el Instituto 25M
(la fundación de Podemos), en el que Domènech escribe un capítulo junto
a Pablo Iglesias, Xosé Manuel Beiras, Vicenç Navarro y José A. Pérez
Tapias, entre otros. Una presentación que ha servido de lanzamiento de
la ruta Cambiar España.
"España
es plurinacionalidad y esto no es discutible", ha sentenciado Iglesias.
"El problema", ha planteado el líder de Podemos, "es que esto plantea
problemas de técnica de Estado para hacer que converjan diferentes
sentimientos".
Con esas "técnicas de Estado" Iglesias
se ha referido a la forma de articular las relaciones
interterritoriales en España. Es decir, a cómo debería recoger una
futura nueva Constitución las relaciones entre las diferentes regiones,
autonomías y naciones que cohabitan en el Estado. Qué nueva
institucionalidad necesita España.
Una idea en la que
ha insistido varias veces Igleisas: "Una nación es una comunidad
imaginaria, una voluntad política que se articula a través de
instituciones. Eso tenemos en España: un conjunto abigarrado de
voluntades distintas y cambiantes. Y plantean un problema político
fundamental; construir una técnica de Estado para hacer a España viable
como proyecto político".
El secretario general de
Podemos no ha entrado a desgranar esas "técnicas de Estado", pero sí ha
señalado que las negociaciones en el marco de un proceso constituyentes
deberían estar impregnadas de lo que ha llamado "espíritu republicano".
Iglesias ha criticado al jefe del Estado y a la institución monárquica
por no ser capaz de ofrecer soluciones a los problemas territoriales. Y
ha acusado a los partidos de lo que Podemos denomina "bloque monárquico"
(PP, PSOE y Ciudadanos) de usar el patriotismo de bandera como
subterfugio: "A la derecha le sale más rentable una ideología monárquica
y centralista que le permite tapar su corrupción y sus privilegios con
una sola bandera".
"¿Existe la nación española dentro
de Catalunya?", se ha preguntado Iglesias ante un centenar de personas
en la Fundación Diario Madrid. "Evidentemente que sí. Catalunya también
es plurinacional", ha sentenciado.
Domènech ha
situado el inicio de la actual crisis territorial en la previa crisis
"económica, política y social". "Reabrió lo que no se cerró bien en el
78", ha apuntado.
El candidato de los comunes el
21D ha defendido la valentía de Podemos a la hora de pensar más allá de
las citas electorales y plantear soluciones "a los retos políticos del
futuro". Entre ellos, claro, el encaje territorial de Catalunya.
Domènech ha sostenido la necesidad de "negar los bloques construidos a través de identidades". Es decir, huir del esquema nacional para centrarse en el eje social.
En su opinión, el grupo confederal en el Congreso es "la máxima
expresión" de esta realidad plurinacional. "Compartimos luchas,
objetivos, formas de querernos. Es una herramienta de cambio y casi la
prefiguracion de cuál es la solución".
Además, ha
apostado por un proceso constituyente como solución: "Volver al momento
fundacional y preguntar a la gente cómo quiere compartir este proyecto
sin imposiciones".
Presentación completa:
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2-Pero ¿por qué el gobierno Rajoy no ha permitido ese referendum? Porque tiene miedo a las consultas que salen de las comunidades autónomas y que no convoca él, porque no sabría como manejarse con un resultado legítimo, legal y desfavorable a sus manejos. Y además lo considera una pérdida de poder y un pulso catalán para humillar "a España", que, evidentemente, no coincide con el ente geopolítico, sino con el pp, ese partido que entre 2006 y 2010 ha mutilado y aniquilado el Estatut, y que está convencido de que España solo puede ser Esppaña.
En realidad todo se ha reducido a un cachondeo donde los únicos fastidiados y apaleados han sido el pueblo catalán, sus políticos encarcelados, escandalosamente multados y huídos, y, cómo no, el manipulado y ridiculizado pueblo español, que se cree todo lo que le cuentan y se ha gastado una fortuna en banderas y en fletar autobuses a Barcelona para salir a la calle con la bandera de los Borbones, que seguramente fabrican empresas del entorno pepero y quién sabe si también del Pdcat. Habría que rascar datos y comprobar quiénes y cuánto han ganado los de siempre con el negocio de los sentimientos patrios heridos y manipulados con mando a distancia...por el Ibex35 y su clientela más adepta.
3-Tras el repaso al pp y a su alma gemela el pdcat, nos quedan Esquerra Republicana, un partido entrañable y romántico. Culto y sensible. Buena gente y dispuesto a todo por su sueño republicano, que comparto, pero no solo para Catalunya, sino para todo el estado. Y las estupendas CUPs, igualmente republicanas, pero más aún: municipalistas y anticapitalistas. Una pasada y marronaco, para PDCAT sobe todo.
4- PSC y IdCat. Unas antiguas glorias arqueológicas que en sus tiempos de apogeo produjeron un Pasqual Maragall de lo más honorable. Un Estatut justo y limpio. Una Catalunya que daba gusto visitar y que al regresar el clan "andorruña"-pujolero-masista, cayó en el olvido, como si el alzehimer del ex President hubiese contagiado el tejido social y político de ese territorio encantador, que desde entonces, igual que el reino embrujado de la Bella Durmiente, cayó en un profundo sopor, con el intermezzo de alguna pesadilla como las diadas o las urnas indispuestas. Y hasta hoy. IdCat se ha reducido a la honesta y única voz de Coscubiela, mientras el PSC baila en la cuerda floja con el bueno de Iceta, que no sabe si escuchar a su corazón, a su cabeza o a su conciencia, mientras los alcaldes rompen carnets, Parlon se larga, los sociatas catalanes se sonrojan y se quitan del medio y poquet a poquet se piran de un proyecto político cada vez más repulsivo y esppurio.
5- Pp y c's son dos excreciones peculiares en el Parlament, una anomalía que en democracia se admite como parte de la opinión ciudadana con menos conciencia y más primitivismo en general, ellos siempre en minoría, representan lo que en Francia es el partido de Marine Le Pen. El frente nacional catalán-franquista. Tiene su público entre lo más políticamente analfabeto y simplón, aunque repartido entre el troglodismo de Albiol y la cursilería tea party de c's. Futuro glamour, más bien poco, pero nunca se sabe si recurriendo al pucherazo psicológico no acabarán superando la decena de escaños entre los dos. Estando el pp en activo y a rienda suelta, todo es posible.
6-Finalmente queda Catalunya en Comú. Un oasis de cordura constructora de puentes fraternales y sensatos, que no discrimina a nadie salvo a corruptos inconfesos y persistentes, en medio del océano tempestuoso de las banderas, las iluminaciones deslumbrantes y fugaces, los colocones patrióticos, el desmadre garrulista Piolinófilo, la histeria colectiva y el hartazgo equidistante. Un panorama de delirium tremens social al que se suma la batalla a muerte política presentada por el pp, psoe y c's, que les tienen unas ganas quepaqué. Cuanto más equilibrio e inteligencia ponen Comuns y Podemos en el curro político para pacificar, reunir y construir vías de diálogo, más furiosas y destarifadas se manifiestan las hordas del trío ppc'spsoe. Tripartito in pectore pprepparado y acorazado ppara lo ppeor.
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Nota del blog:
Aquí dejo, para las y los interesadas/os, la reseña de un libro escrito por varios autores implicados en el asunto catalán directamente y con conocimiento de causa, como Xavi Doménech, Vicenç Navarro, Pablo Iglesias, J. A. Pérez Tapias y alguno más que ahora no recuerdo, sobre el tema de este artículo con una breve introducción de Pablo Iglesias que también está ahí abajo, y que puede ayudar a comprender de qué va la movida de Unidos Podemos y de En Comú, en medio de este zipizape cuyo bochinche confunde más que informa. Lo mejor es ir a las fuentes para no confundir churras y merinas.
Es fundamental y muy importante que nos informemos directamente para que nadie nos confunda con milongas acerca de la 'indefinición e incoherencia' de Podem, Podemos y Las Comunes catalanas. Que sepamos de qué hablamos y donde encajar lo que escuchamos, y que sólo las opiniones de Indas & Marhuendas en tantos formatos que hasta parecen otra cosa con formas distintas pero con el mismo fondo 78 fashion, o las de TVE o cualquiera de las cadenas privadas al mismo nivel de transparencia informativa que la pública,no sean sólo las únicas noticias y referencias que nos endosen sus posverdades enredadoras. A disfrutar mientras nos informamos de primera mano, compas.
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Tengo la impresión de que mayoritariamente en ciertos medios más movidos por la inercia emocional de la política del fracaso que por una visión menos dócil a "lo de siempre", se quedan en la superficie de lo que está pasando y no son capaces de dar un paso al frente con las posibilidades constructivas de los Comuns en Catalunya y de Unidos Podemos en el resto del estado.
Los tildan de ambiguos y de confusos como a Ada Colau de torpe o estrafalaria por permanecer fieles a la conciencia asamblearia y obedecer el mandato de la ciudadanía no independentista pero tampoco pepera ni afín a c's, que con sus votos les llevó al Ayuntamiento de Barcelona , como a romper el pacto de gobierno municipal con el PSC que se ha puesto al lado del pp y c's, contra la voluntad del pueblo que votó als Comuns. En realidad serán éstos la bisagra equilibradora que tras las elecciones de diciembre hará posible un pacto democrático con los actuales independentistas, precisamente porque han sabido comprender y respetar la necesidad de un referendum pactado y de rechazar con firmeza la invasión "institucional" de Catalunya por parte del gobierno central, cosa que el PSC no ha sabido o no ha querido hacer.
Y es precisamente una mayoría de catalanes la que coincide con la actitud de los Comunes: respetan la sensibilidad del independentismo, la comprenden y la estiman, pero la consideran inviable por su radicalidad en un contexto político como el actual, donde la independencia minoritaria, ilusoria y salida de madre, causaría más problemas irresolubles que beneficios para el pueblo catalán en especial.
Son los Comunes los que, precisamente, por coherencia, no se han polarizado ni han violentado conciencias a banderazos ni han hecho pactos impresentables para pillar votos, vendiendo la confianza de sus votantes y de sus conciencias. Al contrario, no han querido aprovechar el momento para hacer campaña ni demagogia y sacar votos de uno de los dos bandos. Eso les distingue del resto y marca una sanísima distancia con la burbuja oportunista de los cazavotos al precio que sea. Han apoyado la libertad e incluso algunos de ellos han votado para reivindicarla más que para separarse de España.
Yo misma, como miles de españoles, que no soy independentista, hubiese votado el 1-O por solidaridad con los represaliados violentamente y maltratados por un estado impresentable más pepero y neo-franquista que español, puesto que el hecho de votar en ese referéndum no implica estar a favor de la independencia, sino democráticamente expresar tu opinión sobre la conveniencia o no de la misma. Así, como el de muchos catalanes, mi voto, en caso de haber podido votar, habría sido "no". Como habría sido el voto de Unidos Podemos y de los Comuns. Hay que ver la diferencia clarísima que hay entre aprobar un referendum democrático, y pontificar que se vota para independizarse. No así. Se vota para expresar la voluntad popular, que con toda seguridad en el caso del 1-O habría sido un No mayoritario, algo que después de la torpe y vergonzosa gestión del gobierno central seguramente ha cambiado. Y ahí radica ahora la importancia decisiva de una formación equilibrada como els Comuns-Podem para mediar y coordinarse con la Catalunya agredida e invadida por el gobierno del pp, que ha usurpado las funciones del estado plurinacional, en plan absolutista Luis XIV total, "l'etat c'est moi!", pero...¡en el siglo XXI!, que es el colmo.
Yo misma, como miles de españoles, que no soy independentista, hubiese votado el 1-O por solidaridad con los represaliados violentamente y maltratados por un estado impresentable más pepero y neo-franquista que español, puesto que el hecho de votar en ese referéndum no implica estar a favor de la independencia, sino democráticamente expresar tu opinión sobre la conveniencia o no de la misma. Así, como el de muchos catalanes, mi voto, en caso de haber podido votar, habría sido "no". Como habría sido el voto de Unidos Podemos y de los Comuns. Hay que ver la diferencia clarísima que hay entre aprobar un referendum democrático, y pontificar que se vota para independizarse. No así. Se vota para expresar la voluntad popular, que con toda seguridad en el caso del 1-O habría sido un No mayoritario, algo que después de la torpe y vergonzosa gestión del gobierno central seguramente ha cambiado. Y ahí radica ahora la importancia decisiva de una formación equilibrada como els Comuns-Podem para mediar y coordinarse con la Catalunya agredida e invadida por el gobierno del pp, que ha usurpado las funciones del estado plurinacional, en plan absolutista Luis XIV total, "l'etat c'est moi!", pero...¡en el siglo XXI!, que es el colmo.
Precisamente es en momentos de dificultad extrema cuando se puede calibrar la valía, la honestidad y la lucidez de las personas y de los colectivos. La crisis catalana está demostrando como nunca y dejando en evidencia las cualidades y las bajezas de los partidos políticos de esta apaleada Iberia. No hay nada como los malos momentos vividos en común para conocer la condición, las motivaciones y la disposición de cada uno.
Personalmente, de momento y en este sentido, las conclusiones de mi análisis sobre la dinámica catalana que estamos viviendo son estas:
1- Al independentismo le han sobrado ilusiones, legítimas pero en un contexto ultra e hiperdimensionado, y por ello irrealizables, le ha faltado conocer a fondo la realidad que pisa y que le rodea, no sólo en el estado español, sino fundamentalmente en la base de la propia Catalunya. Con una sensibilidad emocional y sentimental que, unida al descontento social producido al alimón entre las torpezas, recortes y corrupciones del pp y de pdecat, se ha confundido con una materialización imposible, en medio de un conflicto más ético y moral que político y sociológico. Ese impulso liberador y tan frágil, se ha mirado a sí mismo tanto que no ha visto su verdadera dimensión comparada con el resto de espacio político-social catalán y no sólo español. En ese independentismo se han mezclado sensibilidades éticamente incompatibles; nadie puede entender un gobierno ni un proyecto compartido entre PDCAT, Equerra y las CUPs, que son entre sí oposición, aunque sólo sea por no 'sucar corrupció'. Es impensable una independencia catalana donde sólo quepan tres miradas y el resto se quede fuera. A dos millones de habitantes indepes les faltan otros cinco para ser realidad completa. Es un hecho indiscutible, y mucho más contundente que las barbaridades del gobierno Rajoy. Por eso, la propuesta del referendum pactado que han hecho Podem-Comuns y Unidos Podemos, tiene tanto sentido práctico y hubiera sido en su momento la única manera de demostrar que Catalunya al completo no es independentista.
2-Pero ¿por qué el gobierno Rajoy no ha permitido ese referendum? Porque tiene miedo a las consultas que salen de las comunidades autónomas y que no convoca él, porque no sabría como manejarse con un resultado legítimo, legal y desfavorable a sus manejos. Y además lo considera una pérdida de poder y un pulso catalán para humillar "a España", que, evidentemente, no coincide con el ente geopolítico, sino con el pp, ese partido que entre 2006 y 2010 ha mutilado y aniquilado el Estatut, y que está convencido de que España solo puede ser Esppaña.
En realidad todo se ha reducido a un cachondeo donde los únicos fastidiados y apaleados han sido el pueblo catalán, sus políticos encarcelados, escandalosamente multados y huídos, y, cómo no, el manipulado y ridiculizado pueblo español, que se cree todo lo que le cuentan y se ha gastado una fortuna en banderas y en fletar autobuses a Barcelona para salir a la calle con la bandera de los Borbones, que seguramente fabrican empresas del entorno pepero y quién sabe si también del Pdcat. Habría que rascar datos y comprobar quiénes y cuánto han ganado los de siempre con el negocio de los sentimientos patrios heridos y manipulados con mando a distancia...por el Ibex35 y su clientela más adepta.
3-Tras el repaso al pp y a su alma gemela el pdcat, nos quedan Esquerra Republicana, un partido entrañable y romántico. Culto y sensible. Buena gente y dispuesto a todo por su sueño republicano, que comparto, pero no solo para Catalunya, sino para todo el estado. Y las estupendas CUPs, igualmente republicanas, pero más aún: municipalistas y anticapitalistas. Una pasada y marronaco, para PDCAT sobe todo.
El entusiasmo de estas dos honestas formaciones se ha derrochado en un proyecto inviable y que la participación del pdcat ha degradado y dejado hecho unos zorros, por lo incompatible del destrozo social que la reciclada Convergencia está perpetrando aun en Catalunya en todos los espacios sociales: sanidad, educación, servicios ciudadanos, economía, seguridad social, etc, etc...
4- PSC y IdCat. Unas antiguas glorias arqueológicas que en sus tiempos de apogeo produjeron un Pasqual Maragall de lo más honorable. Un Estatut justo y limpio. Una Catalunya que daba gusto visitar y que al regresar el clan "andorruña"-pujolero-masista, cayó en el olvido, como si el alzehimer del ex President hubiese contagiado el tejido social y político de ese territorio encantador, que desde entonces, igual que el reino embrujado de la Bella Durmiente, cayó en un profundo sopor, con el intermezzo de alguna pesadilla como las diadas o las urnas indispuestas. Y hasta hoy. IdCat se ha reducido a la honesta y única voz de Coscubiela, mientras el PSC baila en la cuerda floja con el bueno de Iceta, que no sabe si escuchar a su corazón, a su cabeza o a su conciencia, mientras los alcaldes rompen carnets, Parlon se larga, los sociatas catalanes se sonrojan y se quitan del medio y poquet a poquet se piran de un proyecto político cada vez más repulsivo y esppurio.
5- Pp y c's son dos excreciones peculiares en el Parlament, una anomalía que en democracia se admite como parte de la opinión ciudadana con menos conciencia y más primitivismo en general, ellos siempre en minoría, representan lo que en Francia es el partido de Marine Le Pen. El frente nacional catalán-franquista. Tiene su público entre lo más políticamente analfabeto y simplón, aunque repartido entre el troglodismo de Albiol y la cursilería tea party de c's. Futuro glamour, más bien poco, pero nunca se sabe si recurriendo al pucherazo psicológico no acabarán superando la decena de escaños entre los dos. Estando el pp en activo y a rienda suelta, todo es posible.
6-Finalmente queda Catalunya en Comú. Un oasis de cordura constructora de puentes fraternales y sensatos, que no discrimina a nadie salvo a corruptos inconfesos y persistentes, en medio del océano tempestuoso de las banderas, las iluminaciones deslumbrantes y fugaces, los colocones patrióticos, el desmadre garrulista Piolinófilo, la histeria colectiva y el hartazgo equidistante. Un panorama de delirium tremens social al que se suma la batalla a muerte política presentada por el pp, psoe y c's, que les tienen unas ganas quepaqué. Cuanto más equilibrio e inteligencia ponen Comuns y Podemos en el curro político para pacificar, reunir y construir vías de diálogo, más furiosas y destarifadas se manifiestan las hordas del trío ppc'spsoe. Tripartito in pectore pprepparado y acorazado ppara lo ppeor.
Sólo quienes sean capaces de resistir sin entrar a matar ni hacer daño sino construyendo bien común, ética y civismo, convivencia transparente y justicia, saldrán indemnes y recompensados por el pueblo catalán en particular y español en general.
No es que sea militante de Podemos ni de els Comuns, que no lo soy, -el sólo termino "militar" o "militante" me horroriza-, es el panorama que veo actualmente. Y me alegro de que al menos tengamos una vía abierta a la esperanza, y que no sea Aguirre, xd!
Ánimo, Catalunya, ánimo a esa España plurinacional, sin más bandera en ristre que la del bien común y el abrazo fraternal de los seres libres e iguales.
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Nota del blog:
Aquí dejo, para las y los interesadas/os, la reseña de un libro escrito por varios autores implicados en el asunto catalán directamente y con conocimiento de causa, como Xavi Doménech, Vicenç Navarro, Pablo Iglesias, J. A. Pérez Tapias y alguno más que ahora no recuerdo, sobre el tema de este artículo con una breve introducción de Pablo Iglesias que también está ahí abajo, y que puede ayudar a comprender de qué va la movida de Unidos Podemos y de En Comú, en medio de este zipizape cuyo bochinche confunde más que informa. Lo mejor es ir a las fuentes para no confundir churras y merinas.
Es fundamental y muy importante que nos informemos directamente para que nadie nos confunda con milongas acerca de la 'indefinición e incoherencia' de Podem, Podemos y Las Comunes catalanas. Que sepamos de qué hablamos y donde encajar lo que escuchamos, y que sólo las opiniones de Indas & Marhuendas en tantos formatos que hasta parecen otra cosa con formas distintas pero con el mismo fondo 78 fashion, o las de TVE o cualquiera de las cadenas privadas al mismo nivel de transparencia informativa que la pública,no sean sólo las únicas noticias y referencias que nos endosen sus posverdades enredadoras. A disfrutar mientras nos informamos de primera mano, compas.
Estefanía S. Vasconcellos
Responsable de Comunicación I25M
+34 657450960 || prensa@instituto25m.info
Dosier de prensa
Colección Argumenta
Repensar la España
plurinacional
Ficha técnica
Título:
Repensar la España plurinacional
Autores:
Pablo Iglesias, Xavier Domènech
et al.
Editores:
Instituto 25 de Mayo para la
Democracia (I25M) e Icaria editoria
Fecha de publicación:9 de octubre
Páginas:192
Ilustraciones: José Delgado Periñán
PVP:13,50 euros
«Repensar el Estado español supone asumir el derecho del pueblo catalán a decidir su futuro en un referéndum.Y, a partir de ahí, discutir en Catalunya y en España un modelo de Estado que no solo reconozca la nación catalana, sino que apueste por una conformación estatal donde se refleje y se asuma (de una vez) nuestra realidad plurinacional; sin olvidar, por supuesto, que dicha ordenación debe poder articularse también a través de medios administrativos nuevos que obedezcan a un proyecto de país ligado a la justicia social y a la soberanía popular.Y lo que vale para Catalunya es extensible a Euskadi y al resto de naciones históricas, si así lo exigen la mayoría de sus ciudadanos y de sus organizaciones de la sociedad civil.
Necesitamos construir un espíritu republicano de fraternidad, el de la res publica, como motor de un impulso constituyente; un impulso que late en todo el país desde el 15M, un proceso general español que no será posible sin la colaboración de las hermanas y los hermanos catalanes».
Pablo Iglesias
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