sábado, 29 de noviembre de 2014

Un ejemplo de la nueva economía de transición

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Marta y Jeremy viven en Catalunya. Son creativos de profesión e inteligentes sociales de condición. Componen música, escriben libros, cultivan la tierra, hacen shows, doblajes, y pueden dar clases de inglés o hacer talleres de música educativa. También elaboran productos cosméticos con las plantas de su bosque. Porque, como un hada y un elfo, viven en el bosque desde hace años y se llevan con él de maravilla. Jabones, aceites, esencias, cremas que sanan y embellecen y un champú en formato sólido.  También en una gama especial para animales, a los que adoran. Champús en pastilla, para evitar el plástico de los envases. En fin, una pasada. Y una palpable demostración de que se puede vivir muy bien cuando se coopera con la naturaleza en vez de esquilmarla. La vida les facilita las cosas porque ellos facilitan las cosas buenas de la vida. Por ejemplo, Marta ha adoptado un perrito de Murcia al que iban a sacrificar y al ponerse en contacto con la Protectora de Animales para adoptarlo, le comentaron los problemas que tenían con la higiene y los champús químicos irritantes. Marta les regaló su champú sólido a base de plantas y productos naturales. Y ellos ahora le compran todo lo que necesitan...Por ahí van los nuevos negocios prósperos. Por buscar el bien común y la cooperación del ser  solidario con el medio que se habita y  se comparte. Otra forma de entender los vínculos, las necesidades, la producción, la inversión, el tipo y el orden de  prioridades. La resiliencia que hace posible la bifurcación del sistema de la entropía hacia la nueva creación de otro sistema mucho más racional, inteligente y humano. Es sólo un ejemplo para reconfortar. Pero hay muchísimos. Cada vez más. Afortunadamente. 

A veces la poesía se encarna y transforma realidades con iniciativas que serían imposibles sin ella.

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