martes, 8 de enero de 2019

Una definición perfecta de la homeopatía, muy propia de quien está acostumbrado a trotar por los espacios siderales sin hacer pie ni por equivocación: el astroministro Pedro Duque. Esperemos que lo suyo no sea contagioso y nos quedemos sin gobierno antes de tiempo...Volando voy, volando vengo, flotando estoy...Ains!


(Público)

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Este patético episodio viene que ni pintado después del post sobre los 10 avisos de Chomsky, acerca de los métodos del neocapitalismo para descerebrar a la ciudadanía tratándola como si fuera una criatura pequeña o deficiente mental en caso de ser adulta.
Razones para la reprobación ciudadana de semejante esperpento valleinclanesco en los bancos del hemiciclo:

Primera: ¿acaso el señor Duque es ministro de sanidad para meterse a criticar temas de salud y medicina de las que no tiene ni idea ni competencias para interferir en asuntos ajenos a su ministerio y en el congreso nada menos?

 Segunda: ¿acaso este Gobierno no ha hecho ya bastante ridículo en la UE con su visión "científica" de la homeopatía como pseudociencia?

Tercera: tratar  con ese desprecio a las ciudadanas y ciudadanos que se tratan y se curan con homeopatía, como a los médicos que se dedican a estudiar y curar con ese método científico, sí, centífico, es una falta absoluta de respeto por una rama de la ciencia médica que obviamente no conoce quien se atreve a descalificarla sin tener ni idea de lo que habla. Si la tuviera no lo haría.

Es como si los que nunca hemos salido de la Tierra en un viaje espacial nos burlásemos de ese ministro volador diciendo que sus salidas al espacio seguramente fueron una película hecha en un simulador y que su trabajo como astronauta habría que venderlo como un TBO para niños en los kioscos, en plan Mortadelo, Filemón y la Tía. Porque como ministro de educación no pasa grotescamente de ese nivel.

En fin, que nos gustaría que los ministros de este gobierno fuesen más dignos de valorar y tomar en serio, y que Pedro Sánchez debería conocer mejor el material que elige para su gabinete. Y que se lea a Chomsky, porfa, antes de tomar decisiones siguiendo consignas neocapitalistas si es que  de verdad pretende nada menos que "ser la izquierda" y que nos lo creamos a la hora de votar.
Creo que no es mucho pedir. ¿O tal vez, sí?
A base de cosas tan lamentables e impresentables como ésta, no vamos a poder apoyar al Psoe ni queriendo hacerlo con la mejor voluntad. ¿Cómo fiarse de un gobierno tan destarifado y torpe y del presidente que lo gestiona y lo elige? Estamos hartas de votar con la nariz tapada. Necesitamos respirar.

No hay comentarios: