Me acaba de llegar la confirmación de un pirateo en una suscripción gratis por internet al diario Lanzadigital, en Ciudad Real. Me di de alta hace unos días y me sorprende ayer mismo que no conste en las condiciones de la inscripción la obligatoria posibilidad de darse de baja, envío la reclamación a los gestores y la respuesta es desconectar el correo que consta como enlace con la redacción y la gestión informática. Lo dejo escrito aquí para que conste y se sepa lo que hay, mientras consulto a los técnicos de la Guardia Civil que investigan fraudes en internet. Sobre todo teniendo en cuenta que el promotor de la sección es un banco, una Caja Global, que nadie sabe de donde ha salido...El correo autoinhabilitado es este joaquin@thinkingsize.com.
Finalmente, y aconsejada por la prudencia de quienes saben lo que hay, al haber desaparecido la dirección del correo intermediario y al no recibir respuesta a mi demanda, he cancelado la suscripción con Lanzadigital, una pena, sí, pero a veces es preferible la pena de la distancia a una proximidad tan poco, o nada, clara, más bien turbia. Y, gracias digitales, por lo que he aprendido en esta experiencia.
En mi filosofía particular guardo el mismo agradecimiento para los maestros del sí, (aquellos que con su praxis muestran el lado ejemplar de la existencia y el modo de trabajarlo) como para los maestros del no (aquellos cuya trayectoria indica lo que nunca debemos hacer si queremos una vida que valga la felicidad de la luz en vez de la pena del caos) Ambos son imprescindibles en la escuela de la vida, sin los dos paradigmas simultáneos y opcionales entre los que poder elegir libremente nunca aprenderíamos de verdad.
¡Gracias a la vida!
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