lunes, 25 de enero de 2021

Una estupenda noticia, sobre todo para quienes conocimos y sufrimos en la infancia, adolescencia y juventud a estrenar, un Puertollano contaminado hasta lo inimaginable por la ENCASO/REPSOL que produjo durante más de medio siglo miles de enfermos crónico y muertes de origen medioambiental. Saber que ahora ese enclave contaminador se está convirtiendo en un centro Biollano, es una de las mejores noticias que se pueden recibir en un momento global tan devastador como este presente,que sin duda, ha derivado de un pasado tan inconsciente, ávido e ignorante, como para dar lugar a un verdadero apocalipsis planetario del que nuestra historia de imperios enloquecidos es la principal responsable. Pero no olvidemos que la historia la hacen los seres humanos y la escriben sus conductas.Ahora se trata de corregir la bioescritura de nuestros ancestros y volver a empezar la narración desde un plano mucho más humano e inteligente que depredador y trumpantojo


La planta de Ence, Biollano, ha producido en 2020 230GWh con un consumo de 215.323 toneladas de biomasa

Graci Galán Puertollano
Diario Lanza digital 
Planta de biomasa de Ence en Puertollano / G.G.

Planta de biomasa de Ence en Puertollano / G.G.

La producción de energía se ha producido fundamentalmente en el último semestre del año una vez que finalizó la recepción provisional de la planta inaugurada hace un año y acababa la fase de pruebas en esta empresa

La planta de biomasa de Ence, Biollano, ubicada en la ciudad de Puertollano, ha cumplido su primer aniversario este mes de enero. En este tiempo complicado en el que ha comenzado a funcionar esta planta ha conseguido, a pesar de la difícil situación que se ha producido en este 2020 por la pandemia y sus consecuencias, una producción de 230 GWh que se ha llevado a cabo sobre todo en el segundo semestre del año, una vez que se formalizaba la recepción provisional y acababa la fase de pruebas en esta empresa. Para ello ha consumido un total de 215.323 toneladas de biomasa.

No obstante, la capacidad de producción estimada de esta planta puede llegar hasta los 325.000 MWh/año con un consumo de 238.000 toneladas al año de biomasa, entre las que se encuentra el orujillo, sarmiento y arranque de vid, hoja de olivo y restos forestales o agrícolas leñosos.

Por otro lado, según las estimaciones de la propia empresa, la planta de Biollano genera en torno a 1.500 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos (según los últimos datos de APPA Biomasa, una planta de generación renovable con biomasa genera 30 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos por cada megavatio (MW) instalado).

En estos últimos meses de pandemia donde la realidad económica ha sido cambiante según las circunstancias del país, Ence no ha dejado de trabajar, es más, debido al carácter esencial de las actividades que realizan han mantenido la operación de sus biofábricas de celulosa -base de productos higiénicos y sanitarios, básicos para la sociedad- y de sus plantas de energía renovable esenciales también para garantizar la demanda eléctrica.

Uno meses en los que la seguridad ha sido y sigue siendo prioritaria para la compañía. «La adopción temprana de un riguroso protocolo de seguridad, ya desde el mes de febrero, ha permitido asegurar la seguridad de las personas que, de forma directa e indirecta, trabajan en Ence», explican desde la compañía. Este protocolo se continúa aplicando tanto para quienes desarrollan su labor en las plantas, como para las oficinas y para quienes trabajan a pie de campo. Unas buenas prácticas que han hecho posible mantener el empleo y seguir poniendo su celulosa y su energía renovable al servicio de la sociedad.

Este 2020 ha sido un año intenso para Ence, si bien adquirió la central de Termollano a Iberdrola en el año 2019 en esta misma localidad finalmente ha procedido a la venta de la misma en este pasado año. No obstante, Ence quiere ser un referente en el desarrollo de la bioeconomía en España y piensan que «la salida de la crisis y la recuperación económica solo serán posibles de la mano de la sostenibilidad. Estamos convencidos de que esa es la dirección en la que debemos ir», apuntan.

Así, operaciones como la venta de Termollano refuerzan la posición financiera de Ence para potenciar y diversificar su crecimiento tanto en energía renovable como en biomateriales y recientemente ha culminado la venta de una participación minoritaria, del 49%, en el capital de Ence Energía al fondo de infraestructuras Ancala Partners.

«Nuestra previsión es seguir creciendo: Ence cuenta con una cartera de proyectos renovables maduros de 405 MW, lista para construir a finales de 2021 y que supondría multiplicar por 2,5 veces su capacidad instalada actual, contribuyendo con ello a la transición ecológica de España hacia una economía neutra en carbono».

Desde Ence se ha puesto en valor que el sector de las energías renovables aporta unas oportunidades únicas en competitividad y en creación de empleo y riqueza en España, un país con un alto potencial en recursos eólico, solar y, sobre todo, en biomasa. «La biomasa, además, tiene un impacto muy importante en la generación de empleo rural, en la reducción de incendios y en la economía circular», subrayan.



  • No hay comentarios: