El cacao del Supremo, el Gobierno y los bancos ha venido a demostrar una vez más entre tantas, el S.O.S insostenible y desesperado que los pueblos de Iberia estamos aguantando sin cesar.
En realidad el problema es un asunto de gobernanza que en un estado normal se habría gestionado desde el principio, a partir del Ministerio de Economía y Hacienda, como corresponde al caso cuando existen unas normas claras, justas y éticas que hacen prevalecer la legitimidad de los derechos y deberes compartidos, sobre los asuntos financieros de alta corrupción e ínfima calaña. Y las competencias de cada sector de gestión están desde siempre, como los principios democráticos y las leyes básicas, claramente definidas, adjudicadas y asumidas adecuadamente por los servicios políticos con las responsabilidades ad hoc.
El hecho de que el Tribunal Supremo tenga que ser el que regule las finanzas del estado y el régimen bancario, o la aplicación de decretos políticos dictatoriales, contaminando la "laicidad" jurídica de la Constitución, como también ha sucedido y sigue sucediendo en el caso de Catalunya, con el pp y sus acólitos, son signo inequívoco de que la España "política" de siempre ya está tan tiesa, inutilizada y momificada como el fiambre de Cuelgamuros que se la inventó y la dejó en herencia a las nuevas generaciones de mindundis y de aprovechados.
Ya que gobiernos y parlamento son incapaces de asumir sus funciones funerarias y de desguace de detritus, traspasan el marrón a un Poder Judicial que no solo no es mejor ni más digno de crédito que los otros dos, sino que para más inri, está al servicio descarado de los intereses políticos y financieros, ya inseparables en el país del corta y pega según se tercie el ascensor de la bolsa o las comisiones e inversiones privilegiadas de un rey emérito desatado, que como el resto de la casta gobernante, se fuma un puro con cualquier responsabilidad de la que se siente liberado por la propia Constitución. Si la cabeza visible del estropicio está en semejante plan ¿qué se puede esperar del resto de agentes derivados y en constante reverencia ante el tinglado y sus chollos? Pues exactamente, lo que estamos viendo: la caída en avalancha de todo el mejunje. Un día nos sorprende una sentencia demencial, pero al siguiente, lejos de corregirse y arreglarse, se empeora y se acelera aun más el volumen del alud in crescendo. Es como un sálvese quien pueda en un tsunami o en un incendio de dimensiones que nadie atina a cuantificar y que se hace más potente cuanto más se silencia o se trata de ocultar.
Todos miran para otro lado, que si la bolsa, que si el momento económico y político tan difícil. Eso dijeron cuando la crisis se hizo presente y eso siguieron diciendo cuando Portugal aun con más precariedad que España, -debida a la gestión ruinosa de su pp del momento-, logró salir de la ratonera y ponerse a la cabeza de la recuperación, no solo económica, sino como base de todo, social, política e igualitaria. ¿Pero, qué le va a enseñar nadie a un país tan listo, tan espabilao y tan adelantado a su tiempo, como es el nuestro, verdad? "Que cambien y mejoren ellos, que están mucho peor que nosotros. Si estamos genial. Fíjate, fíjate, cómo sube el capital, las ventas millonarias de la burbuja inmobiliaria, que es un filón. Fíjate, como suben los alquileres gentrificados...cómo se va yendo del centro la morralla y cómo acude la creme de la creme paganini, cómo crecen los autoempresarios con tres idiomas y diez másteres, en Amazon, en Glovo o en cualquier invento puerta a puerta, y cómo salen los licenciados con ganas de aventuras camino de Alemania, Canadá y Nueva Zelanda, igual que salen los millones de euros camino de Suiza, Andorra, Panamá o Las Bernudas...amparados por el aval y el ejemplo insuperable de una corona y un toison de oro, casi ná...Para que luego digan que no crecemos...Envidia cochina de las izquierdas...Pero, si por una de aquellas nos fallase la conexión inter-alcantarillas, siempre tendremos dispuesto el sofwer y la whifería del CSPJ, Supremo y TC que nos sacarán del atolladero en un plisplás, solo se trata de ganarse a los dudosos con buenos premios de prebendas y destinos como recompensa y de entronizar a los seguros y ya fieles servidores, en los cargos de más poder, para estar seguros de su agradecimiento vitalicio. "
Ya que gobiernos y parlamento son incapaces de asumir sus funciones funerarias y de desguace de detritus, traspasan el marrón a un Poder Judicial que no solo no es mejor ni más digno de crédito que los otros dos, sino que para más inri, está al servicio descarado de los intereses políticos y financieros, ya inseparables en el país del corta y pega según se tercie el ascensor de la bolsa o las comisiones e inversiones privilegiadas de un rey emérito desatado, que como el resto de la casta gobernante, se fuma un puro con cualquier responsabilidad de la que se siente liberado por la propia Constitución. Si la cabeza visible del estropicio está en semejante plan ¿qué se puede esperar del resto de agentes derivados y en constante reverencia ante el tinglado y sus chollos? Pues exactamente, lo que estamos viendo: la caída en avalancha de todo el mejunje. Un día nos sorprende una sentencia demencial, pero al siguiente, lejos de corregirse y arreglarse, se empeora y se acelera aun más el volumen del alud in crescendo. Es como un sálvese quien pueda en un tsunami o en un incendio de dimensiones que nadie atina a cuantificar y que se hace más potente cuanto más se silencia o se trata de ocultar.
Todos miran para otro lado, que si la bolsa, que si el momento económico y político tan difícil. Eso dijeron cuando la crisis se hizo presente y eso siguieron diciendo cuando Portugal aun con más precariedad que España, -debida a la gestión ruinosa de su pp del momento-, logró salir de la ratonera y ponerse a la cabeza de la recuperación, no solo económica, sino como base de todo, social, política e igualitaria. ¿Pero, qué le va a enseñar nadie a un país tan listo, tan espabilao y tan adelantado a su tiempo, como es el nuestro, verdad? "Que cambien y mejoren ellos, que están mucho peor que nosotros. Si estamos genial. Fíjate, fíjate, cómo sube el capital, las ventas millonarias de la burbuja inmobiliaria, que es un filón. Fíjate, como suben los alquileres gentrificados...cómo se va yendo del centro la morralla y cómo acude la creme de la creme paganini, cómo crecen los autoempresarios con tres idiomas y diez másteres, en Amazon, en Glovo o en cualquier invento puerta a puerta, y cómo salen los licenciados con ganas de aventuras camino de Alemania, Canadá y Nueva Zelanda, igual que salen los millones de euros camino de Suiza, Andorra, Panamá o Las Bernudas...amparados por el aval y el ejemplo insuperable de una corona y un toison de oro, casi ná...Para que luego digan que no crecemos...Envidia cochina de las izquierdas...Pero, si por una de aquellas nos fallase la conexión inter-alcantarillas, siempre tendremos dispuesto el sofwer y la whifería del CSPJ, Supremo y TC que nos sacarán del atolladero en un plisplás, solo se trata de ganarse a los dudosos con buenos premios de prebendas y destinos como recompensa y de entronizar a los seguros y ya fieles servidores, en los cargos de más poder, para estar seguros de su agradecimiento vitalicio. "
Así se lleva escribiendo nuestra historia desportillada y mugrienta, aunque con mucha solemnidad y poderío callejero, desde el año de Maricastaña o el de la picor como dicen en Valencia, tanto que hasta millones de españoles se han habituado a ella y la consideran su patria, su bandera, su esencia, a la misma altura que el jamón de Jabugo, el gazpacho, la paella, la fabada, el pulpo a feira, el cocido montañés, los toros asesinados a sangre fría en las plazas, o los embolados que se suicidan de terror y dolor contra los muros de la parroquia, o los SanFermines.
No hablo del marmitako ni de la escudella, ni del zortziko y la sardana, porque Euskal Herría y Catalunya no son nada fáciles de "patrificar" así como así, sin motivos reales, -y eso las honra- se fían menos de las tripas que de la inteligencia. Y hacen divinamente, lo que deberíamos hacer todos los demás si tuviésemos dos dedos de frente y más dignidad que orgullo , menos chulería de boquilla y resignación de ganado lanar y más lucidez.
No hablo del marmitako ni de la escudella, ni del zortziko y la sardana, porque Euskal Herría y Catalunya no son nada fáciles de "patrificar" así como así, sin motivos reales, -y eso las honra- se fían menos de las tripas que de la inteligencia. Y hacen divinamente, lo que deberíamos hacer todos los demás si tuviésemos dos dedos de frente y más dignidad que orgullo , menos chulería de boquilla y resignación de ganado lanar y más lucidez.
Aunque muchos se molesten al leer estas cosas, si son honestos y no tan berzas como podrían ser si les da por seguir el rumbo de esa españolidad de vox y votox adyacentes, como ciudadanox rivereñox y casaderox al amparo de Xan Villarejo bendito, Xanta Lola de Coxpedalia y su es-poxo Xan Hierrox venerablex del Xanto Excaqueo...(es que con ellox todo es una cruz a cuestax y atravesada, que se ataxca por donde intenta paxar)
Con semejantes costras adosadas, es un milagro que aun queden álguienes como Dani Mateo, Guayoming, Tais, Gonzo y Sandra...sin estar en chirona o en el exilio. Tal y como está el patio, en un país donde sólo si eres banquero y delinques te libras del marrón y tus víctimas pagan por ti. Olé, esa justicia campechanota. Toma ya!
Lo cierto es que si el Gobierno gobernase como cosa normal en un país democrático y en un estado de Derecho, y esto no fuese la Fonda del Postigo desde siempre, los bancos habrían tenido que pagar su rescate en 2011o bien a toca teja o bien dejando como aval del préstamo sus parques inmobiliarios para gestión pública de la vivienda y jamás se habrían facilitado por ley los desahucios. No se ha legislado en España nada parecido a esa protección social imprescindible en los estados decentes (en Francia o Alemania, como en los países nórdicos no se deshaucia ni se deja a nadie en la calle, porque se cumple su Constitución con toda normalidad, mientras aquí los ex-ministros se pitorrean hasta en la tele, de esas 'exageraciones' constitucionales que llaman "letra muerta"). Todo va con alfileres, hilvanado al albur de lo que vaya saliendo y cuando se complican las cosas mal hechas, en vez de arreglarlas para que no vuelvan a repetirse, se dejan en manos de la Justicia, que para colmo equivale, en España, a dejarlas en manos de la versión cacique de Curro Jiménez, el Algarrobo y el Estudiante. Pero de verdad, no los del relato y la serie.
Sólo el pueblo, despertando, saliendo del sopor a leñazos jurídicos y regias macroestafas que siempre le toca pagar como a un imbécil, puede poner límite a este estado de demolición a cámara lenta y hacer que se acelere el derribo, se quite el trampantojo, se vea la realidad y de una puñetera vez, SE CAMBIE la cutrez tradicional y repetidora por la inteligencia colectiva haciéndose cargo de su presente y su futuro, para que el pasado deje de rebobinarse a sí mismo como un juguete estropeado.
Estos políticos y estos jueces son obra de una educación vergonzante y de una forma terrible de entender la vida, los recursos, la justicia, la convivencia e incluso hasta las ideologías. Son obra de nuestra falta de conciencia histórica y por ello, aunque no lo queramos admitir, serán nuestro karma, mientras no decidamos cambiar de miras, de actitud y convertirnos en el karma de ellos, si no hacen lo necesario para hacer posible el bien común. Entonces pasaremos al estado del dharma, que es el estado de gracia como resultado de una vida armónica y sin cloacas. Porque ya se ha aprendido la alquimia del espíritu, que de la basura hace abono para huerto y jardín y de las tinieblas paneles fotovoltaicos que dan luz gratuita.
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