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Si ocurriera un accidente, las consecuencias serían terribles, y no solo para las 17 millones de personas que dependen directamente del mismo agua potable que estaría expuesto a derrames tóxicos; también para la población de orcas que viven en estas aguas, que podría extinguirse por completo.
Los científicos lo tienen claro: si esta obra llega a entrar en
funcionamiento, los patrones de alimentación de las últimos 75 orcas
residentes del sur se verían interrumpidos, lo que las llevaría a su
desaparición.
Pero el BBVA, junto con otra decena de bancos internacionales, sigue relacionado con estas empresas. El próximo mes de febrero tienen la oportunidad de revisar su “política verde” y desvincularse totalmente de la destrucción del planeta, por eso tu ayuda es más necesaria que nunca. En Greenpeace no aceptamos dinero de gobiernos ni empresas para poder denunciar a todas aquellas personas o instituciones que amenazan el planeta. Solo personas comprometidas como tú hacen posible nuestro trabajo. Con tu apoyo podremos seguir diciéndole al BBVA y el resto de bancos internacionales que el planeta no necesita más petróleo. Aunque nos espíen. |
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George Orwell: «En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario».
sábado, 2 de febrero de 2019
Desde Greenpeace llegan noticias tan malas como miserables. El sistema depredador está que se sale y en España hace el agosto constantemente;para demostrarlo están las cloacas infinitas que ya Felipe González hace treinta años definía como "necesarias" en el sistema de desagüe democrático(¿?¡!) EEUU no sería el paradigma de la corrupción 'deshonoris causa' global, sin tanto alumno aventajado que reproduce sus enseñanzas con tanto fervor..como los estados que hacen posibles tanta fontanería villanareja. Ains!
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