viernes, 11 de junio de 2021

Quiero compartir con la familia infinita estos versos que he dedicado a nuestros médicos homeópatas, que también son poetas, creo que sin la poesía es imposible que funcione la medicina. Todo buen médico es poeta. Unos escriben versos y otros no, pero todos respiran y comparten la terapia poética, si no fuese así no comprenderían a Hipócrates ni cómo y por qué cura la homeopatía


BENDITO HIPÓCRATES

Conciencia, alma y poesía un tríptico de luz
para hacer que la sombra se despierte
saltando del dolor y del miedo
hasta el reposo,
del ciclón a la calma y de la noche al día.
Eterna medicina sin fronteras,
bálsamo sanador
y homeopatía
que de la compasión es la sustancia.

Fuera de ese paisaje que nace en los adentros
y crece en el contagio que nos hace familia universal,
la vida se ennegrece, se enturbia y se corrompe,
el vivir es sufrir, el prójimo enemigo,
la bondad un absurdo
sin bienes gananciales, ni rentables,
la libertad un timo o un insulto,
y la felicidad un imposible,
el mundo una cloaca, y amor una utopía
para bobalicones en la inopia… 

Un absurdo feroz
que de la enfermedad hace su imperio
y de la medicina(¡?) para autómatas
un negocio brutal de ceguera perenne.

Amar es otro estado, es otra esencia.
El amor regenera y compadece
en presente continuo, cura, limpia y restaura
no pide relevancia ni fama ni caché
ni alabanzas ni títulos ni aplausos ni vitrinas,
porque la recompensa viene ya rebosante
desde la luz impresa en ese mismo amor que repartimos


Porque somos amor aun sin saberlo,
una dulce y divina sorpresa
que solo al compartir su esencia,
que es la nuestra, descubrimos.

No hay comentarios: