martes, 27 de septiembre de 2011

La rehpuehta de la Ehpe

Está claro que el rap es un subgénero protestón que le sienta fatal a los plenos poderes asumidos. A lo mejor es que nacido de la realidad menos pura y más dura, de ese ejército multicolor apaleado y desarmado, aunque nunca vencido, tiene la virtud de sacar de quicio a los cuarteles generales del poderío. Y entonces nunca falta una Ehperanza que levante la bandera y el grito anatema del miedo: "El 15M es el germen de un golpe de estado". Y se quede tan pancha.
Doña Ehpe se columpia estrepitosamente una vez más, para no olvidar sus honorables meteduras de pata en los tiempos en que fue ministra de cultura (¡!)
Vamos a recordarle unos cuantos detalles que su pésima memoria histórica y un tanto histérica, ha olvidado, o tal vez ni siquiera ha olvidado, simplemente esos datos no los conoció, ni los estudió ni los tuvo ni los retuvo. Seguramente por eso no los reconoce cuando los tiene delante e incluso es protagonista de ellos.

Para empezar, los golpes de estado nunca los dan los pobres, doña Ehpe. Porque no tienen poder ejecutivo ni fáctico, porque no tienen ejército ni carros blindados, ni cañones ni misiles, ni generales levantiscos ni iglesia que los bendiga y los saque bajo palio a pasear, porque nadie les escucha, porque la pobreza no tiene glamour ni patria que defender, ni bancos y negocios que santificar, ni millonarios en la retaguardia que los mantengan por interés, no por patriotismo, por supuesto. Le recuerdo, Doña, que aquí en la España moderna y contemporánea, los golpes de estado siempre los han dado los ricos, los "nobles" y los intrigantes que se apuntan a un bombardeo. Los que tienen más miedo y menos vergüenza. Por quedarnos sólo con el siglo XX, le sugiero que se repase la historia y relea qué pasó en los años 20 con el general Primo de Rivera y en el 36 con el general Franco y en los 70 con la operación galaxia y en el 81 con los generales Armada, Milans y su tte coronel Tejero de tan penoso curriculum compartido.

Hay que ser muy ignorante, muy miope y bastante tonta, doña Ehpe, para afirmar lo que usted afirma. Sin embargo sí que hay un atisbo de lógica en su premisa amenazante que delata por donde va el PP: los pobres que protestan y desobedecen a los gobiernos injustos son la excusa para que ese poder se anime a dar golpes de estado, endurecer medidas, recortar libertades, gobernar a golpe policiaco y represor, para aplastar lo que se ha provocado con la injusticia y no se está dispuesto a solucionar con el diálogo y la ética social, porque el poder para tales mentes dinosáuricas es un derecho de pernada y no servicio a la sociedad. Y esa estrategia es propia de ustedes. Los ultraconservadores. De modo que en realidad todos los golpes posibles en la historia, vienen de ustedes, señores de carcundia, incapaces de ver en perspectiva el futuro a que están condenando a la humanidad. Ustedes quieren una sociedad de consumo infinito, que les enriquezca cada vez más, infinitamente, que al mismo tiempo va erosionando y deshaciendo los recursos del planeta en el que vivimos todos, no sólo ustedes. Y hay millones de ciudadanos del mundo que se están dando cuenta de ese detallejo insignificante de la insostenibilidad de un sistema que para ustedes es el único posible. Pero que gracias a Dios, no lo es en realidad. De modo que aunque ustedes golpeen una vez y otra en el mismo punto, no pueden ni podrán conseguir jamás que la conciencia del hombre, a base de esos mismos golpes, se despierte, pierda el miedo y diga ¡basta! y no dé ningún golpe de estado, porque no es necesario, sino que se ponga a vivir de modo que el estado injusto de la cuestión no interfiera en su vida. Una desobediencia civil, una objeción fiscal, un cooperativismo solidario de comunidades al margen de las administraciones corruptas, un sistema de trueque, asociaciones de autodefensa frente a la extorsión de la banca...en fin, tantas cosas como produce la creatividad de las conciencias despiertas a fuerza de abusos. Que se asocien y resuelvan por su cuenta lo que ese estado chapuza e incapaz no consigue arreglar, porque sólo está interesado en mandar y mantenerse mandando y se ha olvidado de gobernar lo que los ciudadanos le encomendaron en las urnas. Y entonces pueden ocurrir dos cosas: o bien el poder público, se recupera a sí mismo como verdadera democracia, no como teoría a lo Sabater, y retoma su responsabilidad de ser la parte de la ciudadanía encargada de velar por el bien común y no sólo por el bien parcial de los compadres, o se queda al margen de la corriente de la vida, se enroca en su fanatismo y provoca una ruptura social y al mismo tiempo su caída en picado, porque deja a la vista la vergüenza de su desgobierno real. Vease, Doña Ehpe, lo que está pasando en Inglaterra con su admirado Cameron, en Francia con su querido Sagkò, en Italia con su íntimo Berlusconi o en Alemania o Dinamarca con los gobiernos despistados y anancrónicos de Merkel y el recién caído de Copenhague.
¿De dónde han salido Lehman Brothers, Madoff, Murdoch, Wall Street, etc? Le aseguro, que si estudia usted geografía económica o simplemente lee la prensa, va a comprender en seguida que no los ha promovido el 15M. Que no han nacido de ningún colectivo de afectados por las hipotecas.
Reflexione un poquito, si es que entre la pelu, el lifteeng, el peeling, elegir trajecitos, zapatos y bolsos, el color de las mechas y los juegos malabares para esconder la gürtel bajo la minifalda, le queda algo de tiempo. Seguramente que si consigue mirar la realidad sin las anteojeras del dogmatismo que ha heredado, consigue ver lo que pasa. Y que el verdadero origen del 15M son ustedes, los pésimos políticos asustados, cobardes, llenos de prejuicios y de inmadurez social y humana, que están metidos en una noria o en una montaña rusa que no pueden detener ni frenar ni reconducir. Porque para poder hacerlo hay que tener cualidades que ustedes no tienen aún desarrolladas, como la humildad para ver que uno se equivoca y rectifica, como para admitir que la vida en la tierra no es ya lo que era, porque los recursos se agotan, el consumismo es un cáncer para la vida, porque no se trata de tener mucho y seguir igual de idiotas, insatisfechos, cerriles e infelices, intratables, hipócritas, corruptos, manipuladores, egocéntricos e inútiles. Que no se trata de dedicar la inteligencia a depredar lo que hay y a reprimir lo que no entendemos, sino a descubrir que se es mucho más feliz, sabio y rico cuando se descubre que la verdadera riqueza no está en los dividendos ni en el éxito empresarial o ejecutivo, ni en llegar a la Moncloa aunque para ello haya que cargarse la estabilidad social y el bien común. Sino que el futuro ya está apuntando en otra dirección, que de momento ni el PSOE ni el PP han conseguido otear en el horizonte humano, quizás porque están muy lejos de él todavía.

Yo que usted, Doña Ehpe, me quitaría el miedo y la máscara autosuficiente que le esconde su fragilidad y la nada de su discurso. Me volvería simple y humilde, como Sócrates, y me empezaría a hacer preguntas, primero de historia, luego de sociología, después de ética y cívica, después de psicología humanista, por ejemplo leería a Erik From, a Maslow, a Jung, a Annie Marquier, a Gandhi, a José L. Sampedro, a Hessel, a Jordi Pigem, Arne Naess, Raimon Panikkar y como católica podría conectar con Hans Küng y sus Propuestas para una nueva ética mundial . Y después de leerles volvería a revisar qué es el 15M y de donde ha nacido su impulso.
Seguramente tras esa lectura consciente, usted sería capaz de invertir sus dineros y hasta subastar el edificio de la Puerta del Sol, desde donde gobierna, para poder mantener una educación pública para todos, gratuita y capaz de formar ciudadanos competentes, responsables, inteligentes, independientes, solidarios y honestos. Con ello se acabarían la delincuencia, la marginalidad y la miseria. Se ahorraría en cárceles y en procesos judiciales. Porque la mayor riqueza y garantía de una sociedad sana, ética y autosuficiente, son los ciudadanos que han sido educados, no por fanáticos religiosos ni por ratas de archivo bibliotecario, sino por una escuela pública capaz, preparada, con virtudes activas, no teóricas, empeñada en hacer que el saber ocupe lugar en la práctica diaria de la convivencia y de la gestión comunitaria y privada. Que el saber, se convierta en conocimiento de sí mismo y de las reglas sanas y justas para el juego de la vida compartida y cogestionada con los demás.

No tenga miedo, Doña Ehpe, anímese y quítese la careta de old barbie lideresa con todos sus prejuicios y ya verá, ya verá qué sorpresas tan bonitas encuentra en el mismo corazón del 15M. Y quién sabe si no les pediría el favor de montar una tienda de guardia permanente en Sol, delante de su balcón, para que le recuerde cada mañana, donde está el Norte que conduce al Sur y en como reconocer el Sur para llegar al Norte. Quizás así los políticos de "profesión" no estarían tan lejos de la realidad que pretenden gobernar ni tan perdidos en el vacío de sus ambiciones estúpidas y sin porvenir.

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