Las terribles amenazas mundiales de la Gran Contra-Conspiración Global
Está dándose por buena una peligrosa reacción ante conspiraciones imaginarias homologables a esos Protocolos de los Sabios de Sion en que Hitler se inspiró para urdir su “solución final” y activar el Holocausto, aunque los actores políticos que la protagonizan crean salvar el mundo una vez más.
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“Lo malo de la paranoia es que te persiguen”, solía decir jocosamente Javier Muguerza, pero así son las cosas. Al hipocondriaco no le hace falta caer enfermo, porque ya lo está. En su intento por confirmar hipótesis que puedan explicar sus dolencias reales o imaginarias padece lo indecible y nunca logra satisfacer cabalmente sus pesquisas, al desconfiar de posibles diagnósticos y tratamientos. Estas patologías individuales no dejan de tener sus correlatos en la sociedad. El fanatismo nos acompaña desde la noche de los tiempos. Para el fanático su credo particular es una verdad incontestable que ha de ser asumida obligatoriamente por los demás.
Crece la tendencia de negar las evidencias para dar crédito a supercherías realmente absurdas, como que la tierra es plana
Las dictaduras y los regímenes totalitarios profesan sin excepción este convencimiento, al margen del ropaje institucional que adopten. El equivalente funcional en la sociedad del paranoico que se cree perseguido, es quien suscribe todo tipo de teorías conspirativas. De ahí el término conspiranoia, resultante de fusionar “conspiración” y “paranoia”. Por desgracia es una de las palabras más en boga y hay buenas razones para ello. Crece la tendencia de negar las evidencias para dar crédito a supercherías realmente absurdas, como que la tierra es plana o que los pájaros no existen porque son drones concebidos para vigilarnos.
La Biblia moderna de las conspiraciones reserva un capítulo primordial a un texto singular conocido como Los Protocolos de los sabios de Sion. Sus tortuosas páginas responden a un doble plagio que desnaturaliza los originales. Por una parte, se trastoca por completo el sentido de las tesis mantenidas por Maurice Joly en Diálogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquieu. De otra, se toma como verídico el discurso de un rabino desgajado del ficticio relato literario donde aparece. Los artífices del documento querían influir en el zar Nicolas II para justificar los pogromos y desprestigiar a los bolcheviques. Pero su recorrido tuvo un éxito monumental y jugó un papel fundamental en la propaganda nazi desde 1920 a 1945, para sostener una conspiración judía mundial que dio pie al Holocausto. Hitler cita con fervor los Protocolos en Mi lucha tomándolos como pretexto para validar su cruel racismo.
Para festejar su cumpleaños, mi amiga Ulrike organizó hace años una visita guiada por el barrio berlinés de Grunewald. Este nombre lo recibe también una inmensa zona boscosa llena de lagos por la que adoro pasear. El andén 17 de la estación ferroviaria homónima suele visitarse como memorial del terror nazi, porque se consignan las fechas en que partían vagones colmados hacia los campos de concentración. En esa visita por Grunewald se nos narró cómo Walther Rathenau fue abatido en el coche al salir de su casa camino del ministerio. Yo creía que lo mataron por sus cargos ministeriales en la República de Weimar, pero ignoraba que, según nos recuerda Norman Cohn en El mito de la conspiración judía mundial, se trató de un asesinato sacrificial y por ello se perpetró en el solsticio de verano. Sus asesinos creyeron matar a un miembro del círculo descrito en los Protocolos y muchos jóvenes alemanes subieron a las montañas al día siguiente para celebrar la muerte de un chivo expiatorio.
Ante nuestros atónitos ojos están escribiéndose nuevos capítulos para una reedición actualizada de los Protocolos
Ante nuestros atónitos ojos están escribiéndose nuevos capítulos para una reedición actualizada de los Protocolos. Ya no hay que hacerlo circular como un documento en forma de libro donde se recogían unas diabólicas actas. Ahora basta con utilizar unas enredadas Redes Sociales donde los bulos y las patrañas circulan impunemente. Trump tiene su propia red social, que responde al término inglés de “Verdad”, porque siempre se presume de lo que uno carece, y Elon Musk se compró Twitter para rebautizarla con su querida “X”. ¿Para qué controlar la prensa, como hiciera en su día el magnate que inspiró Ciudadano Kane o más recientemente Rupert Murdoch, cuando puedes vehicular a través de Tik Tok y circuitos parecidos los hechos alternativos que suplanten al dato contrastado, máxime si haces un uso ruin de la IA generativa?
Con su guerra comercial Trump está trastocando la economía mundial y las turbulencias afectan a sus propios compatriotas. Pretende cobrar deudas imaginarias con aranceles absurdos o contratos completamente asimétricos. Entiende que la Unión Europea se creó para perjudicarle y esta conspiración global tiene tentáculos por doquier, puesto que los países vecinos también le roban o pretenden diezmar a la población con drogas que se consumen compulsivamente quizá por un malestar social muy generalizado. Lo malo es que su conspiranoia está generando una Contra-Conspiración de dimensiones colosales y de incalculables consecuencias. En este mundo al revés, los victimarios pretenden ser las víctimas y reivindican el resarcimiento de sus penalidades. En esa funesta estela, Putin ordena que sus tropas traten a cualquier soldado ucranio como si fuera un terrorista y Groenlandia debe ser puesta bajo bandera estadounidense.
(*) Wikipedia
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Comentario del blog:
Esto es lo que hay y lo que nunca debería haber en un mundo sano y capaz de evolucionar en vez de involucionar revolucionando todo violentamente para que nada ni nadie evolucione. Y todo vaya a peor creyendo ser el recolmo de una "inteligencia"-estropicio, en la que el ego del "topamí" en su mediocridad descerebrada, se hace el amo de todo lo que pilla.
La única solución es que la conciencia de cada ser humano sea capaz de despertar y unirse sana y lúcidamente en el Nosotr@s que nace directamente del Bien Común, en esa preciosa Casa de Tod@s, que llamamos Humanidad, sin haber entendido ni experimentado jamás, una por uno/uno por una, en comunidad global, abierta y sorofraterna SIN FRONTERAS, lo que eso significa...
¿Cómo estaríamos ahora, si en vez de vivir en la periferia de nuestro Ser, nos hubiesen enseñado en la escuela ,en casa, en las instituciones del Estado, a entrar personalmente dentro del Ser sin cuentos ni películas alienantes ni chismes sin sentido ni valores, sino disfrutando del tesoro infinito que SOMOS, pero ignoramos, desconocemos y por ello, llevamos milenios haciéndonos puré un@s a otr@s, convencid@s de que no hay más camino que ese disparate egópata, discapaz de lo mejor y capaz de lo peor...como normalidad para acabar de arreglar el entuerto,como un curso suspenso y siempre repetido?
Hay algo fundamental que no podemos dejar sin descubrir ni resolver: Ya es tiempo de decir ¡Basta!, a lo que nos está manipulando desde la ignorancia total acerca de nosotr@s mism@s, y eso no lo va a decidir ni a descubrir nadie en nuestro lugar. Es el camino imprescindible del despertar personal, desde que llegamos a este mundo, para que esa energía pueda integrarse en la Totalidad energética de lo que ES y no sólo "está" o "parece".
Cada minuto que vivimos es único e irreemplazable, por eso hay que vivirlo sin prejuicios ni miedos ni pensamientos negativos por delante ni por detrás, ni por arriba ni por abajo, sino desde lo mejor que tenemos dentro para compartirlo fuera, hasta comprender que el fuera y el dentro son la misma dimensión, si así lo queremos y lo compartimos, como, por ejemplo, ha hecho la verdadera Humanidad en proceso de despertar, en la DANA de València, acudiendo no sólo desde el resto de España, sino también desde el extranjero. Justo el reverso del trumpantojo que estamos padeciendo por contagio y manipulación, en plan redes suicidas para esa misma humanidad, mucho más abisales e infernales, que sociales.
Un ejemplo bien palpable: L@s voluntari@s en la DANA han usado las redes sociales para compartir el Bien Común y cooperar desde su base, no para volcarse en las mentiras, ni en las amenazas, ni en los abusos, ni en los negocios tecnológicos movidos por la misma energía que potenció el nazismo heredero protocolario de "Los sabios de Sión", -menudo timo- al servicio del poder y de la pasta, que sigue siendo la cloaca letal del Planeta Tierra. Ya hasta convertida en "religiones". No olvidemos lo que significa ese concepto latino: religare = atar dos veces; en vez de liberar una por uno y así, entre tod@s, crear consciencia liberadora en común. Un proceso que no se mide en tiempos ni espacios ni juicios, porque la Supraconsciencia que lo sostiene , -como ya la llama también la ciencia médica más despierta y avanzada-, es tan universal, tan sorprendente como infinita, milagrosamente "contagiosa", energética, eterna y creadora constante. Un paso evolutivo, en el que los viejos teísmos idólatras del pasado y su ya insuficiente base ontológica y práctica, se han quedado en nada, al lado del SER INFINITO en el que todo Es y todo fluye al mismo tiempo, porque sobre todo es Amor sin límites. Como canta José Luis Perales en una de sus más acertadas, diáfanas y hermosas canciones y también nos recuerda Pierre Teilhard de Chardin en sus fenómeno humano y medio divino...
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