Esto es lo que pasa cuando el Evangelio se entiende y se "practica" al revés...Ains!!!!

 

Las joyas robadas en la catedral de Plasencia están valoradas en más de un millón de euros

Las joyas robadas en la catedral de Plasencia están valoradas en más de un millón de euros

• "Duele en el alma", dice el obispo de Plasencia sobre el robo en el museo de la catedral
  

 Religión Digital

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Nota del blogg:

 Por contraste, deducimos que los mejores tesoros jamás se pueden robar como ha sucedido en la catedral de Plasencia, y como, por contraste,  no sucede con ese caudal cordobés compartido por todo el pueblo, que es la antigua Mezquita, y, evidentemente, como sucede con el amor divino en contraste con la egopatía más torpe y cegata.

¿Habrían podido robar el tesoro de la catedral de Plasencia si ese pastón se hubiese empleado en eliminar la pobreza y crear el equilibrio de la justicia social y verdaderamente jesusiana?(*)? La mejor catedral del mundo es el edificio de la generosidad, de la atención constante al "pueblo de dios", que es la humanidad enterita, por encima de cualquier religión o creencia sólo interesada en salvarse a sí misma, mientras la familia humana padece lo peor y lo más injusto como sistema "normal", comenzando por el olvido que sufren l@s bienaventurad@s, es@s que no tienen donde reposar la cabeza, como Jesús, y que son las eternas víctimas crucificadas por la injusticia, la avaricia, el egoísmo, la crueldad normalizada -¡hasta "legalizada"- y de la ignorancia travestida de "inteligencia", cuando sólo es autoengaño, frivolidad estúpida y obstinada ceguera autodestructiva, porque todo el daño y el dolor que se causa acaba siendo un búmeran para l@s causantes.

Los 10 tesoros de Córdoba que cobran vida en Semana Santa

 Córdoba como sociedad, es el contraste ejemplar. Ni oro ni plata, ni joyas peripuestas que se puedan robar. Sino trabajo y construcción de unos seres humanos que invierten en luz arquitectónica a través del tiempo y del espíritu. Una riqueza inmensa que no se puede robar jamás, porque consiste en compartir en vez de acumular patrimonio de siglo en siglo. 

Hay un paso adelante que dar en el caso cordobés: Convertir el edificio religioso en Mezquita, Catedral y Sinagoga, -como la antigua Toledo medieval- para que las tres religiones en guerra constante a través de los siglos, se conviertan de una vez y para siempre, en abrazo fraternal, en la Casa de Tod@s. 

Cuando demos ese paso antropológico y consciente de verdad, podremos descubrir y disfrutar el Nuevo Cielo y la Nueva Tierra, donde no hay nada  que robar porque el cielo y tierra son el Bien Común de toda la Gran Familia Universal ya despierta y liberada, que es el verdadero tesoro. Sin duda alguna! 

Y por último: no olvidemos que todo lo que pueda robarse, perderse o destrozarse. aunque valga tanta pena, no vale ni  la alegría, la paz, ni la feliz armonía  que son parte del verdadero tesoro infinito en el que estamos incluid@s e insert@s. Me vienen a la memoria nuestro hermano Ricardo y nuestra hermana Simona, que piden limosna en la puerta de dos supermercados, aquí en barrio. No se conocen y sin embargo son, psicoemocional y espiritualmente, herman@s gemel@s. Carecen de todo, pero en realidad no les falta de nada: son felices, e inexplicablemente, nunca se van con las manos vacías e incluso ayudan y comparten lo que reciben, con quienes no han recibido nada o muy poco. ¿Cómo se podría dudar de la bondad, de la salud emocional y de la conciencia infinita contemplando y escuchando los masteres  entrañables, humildes y preciosos que recibimos de unos seres tan completos como sencillos, inocentes y amorosos, que son la demostración materializada de las Bienaventuranzas? 

Si las catedrales y sus gestores "pastorales" fuesen como Simona, Ricardo y tant@s otr@s,  nunca les robarían, más que nada porque no poseerían nada que sea robable en vez de compartible. Seguramente, como en el caso de la Catedral de Plasencia, la justicia poética universal, de repente, puede hacer de repartidora de lo que, evidentemente,  a unos pocos les sobra y a la mayoría les falta, tratándose nada menos que de un teórico almacén de evangelismo bla,bla,bla, inexplicablemente forrado...¿No habría que preguntarse cuál es el delito: a) amontonar lo que sobra para que la iglesia esté guapísima y millonaria mientras la pobreza y su miseria hacen estragos o b) ir a buscar  y compartir lo que falta y se necesita para que el reino de los cielos se manifieste en la tierra mediante la igualdad, la justicia social y la sorofraternidad? ¿Quien es más delincuente, quien provoca el delito amontonando lo que desborda sus necesidades, o quien lo perpetra apoderándose de lo que necesita y nadie le ofrece? Tal vez no haya tanta diferencia entre los dos fallos...

Nada ocurre por casualidad, pero todo sucede por causalidad...Basta con descubrirlo para entenderlo y que este mundo destarifado empiece a cambiar sin necesidad de enfrentarse ni matarse, ni atracar ni castigar, y que baste con comprender, empatizar y así corregirse un@ mism@, para poder perdonar como cada un@ necesita ser perdonad@, por tantas cosas constantemente.

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  (*) Perdonad que use este término, porque creo que es el más adecuado a la realidad que al relato pasado por tamices y filtros posteriores a Jesús, llamándole "el ungido", en griego 'ò kristós'. Jesús no necesitaba ser ungido por nadie para Ser quien era y sigue siendo más allá de formatos determinados religadoramente. No hay que imitar a Jesús obligatoriamente, porque todas y todos somos su misma energía, Hijos e Hijas únic@s de la misma estirpe infinita, que no es ningún 'dios' idolatrable,  sino todo lo contrario: la Energía espiritual y materialmente paterna y materna que nos hace posibles, que es sencillamente Amor consciente, creador, y sorprendente innovador constante, por encima de todo. Jesús no es un mito ni un "modelo" para utilizar en las fiestas religiosas y vacacionales, como excusa para el turismo negociante y para gastarse una pasta en tonterías que hoy son regalitos y mañana basuritas contaminantes. Jesús es la expresión completa y divinamente humana, que forma parte constante de lo mejor de nosotr@s mism@s. De ese legado infinito que nos sostiene y nos posibilita evolucionar, si así lo queremos, tanto en la Tierra como en el Cielo, descubriéndolos no como lugares para conquistar, manipular, degradar y divertirse haciendo papilla todo lo que se encuentre y/o hacer negocios de todo lo nada divino y cada vez menos humano. Jesús es la manifestación vital del Nosotr@s elevado a la enésima potencia del Ser.   Es el espejo de la luz, de la vida y la gracia que llevamos dentro y aún no hemos descubierto ni imaginado, entretenid@s con tantísimas fotocopias de nuestro propio despiste enredado en su propio laberinto, y por ello confundiendo nuestro origen y destino verdadero, por los siglos de los siglos, que ya es el colmo, con el egregor del pesadísimo Minotauro y sus derivados, como los define el espiritismo del cuento chino convertidos en el suplicio de Tántalo en plan serie de tv a domicilio, donde todo parece estar al alcance pero no hay manera de que  una vez alcanzado el cofre de los deseos más kukis, se pueda encontrar en él la felicidad y la plenitud sin fin, dentro del codiciado envase, que obviamente somos nosotros...in the parra sempiterna fashion por propia decisión y euforia emocional insaciable y agotadora, lejísimos de la Vida, del Amor y de la verdadera Luz, que danza y celebra todo lo que pilla, al ritmo sano, humilde, cariñoso, transparente y siempre feliz de las Bienaventuranzas, pase lo que pase, en Él/ELLA/ELLO, siempre hay un transvase....Ainsss!!!!!