lunes, 18 de enero de 2010

VIENE A NOSOTROS TU REINO

Y seguimos la ruta de la afirmacion. De la realizacion en nuestro presente. En realidad Su Reino somos todos, cuando despiertos y enamorados del infinito, nos juntamos para celebrar la Vida sin limites. Y ya no es un deseo, es la certeza de que a pesar de todo, ese Reino ya esta dentro de cada uno. Es una semilla plantada por el Amor, el mismo amor que colorea los cielos y las tierras, los planetas y las estrellas. El que hace respirar y sentir, comprender y esperar, crear y sonyar.
El Reino es multidimensional, tiene infinitos planos de existencia manifiesta, pero la esencia es identica en todas partes. Y su perfume de luz es la huella que delata su condicion.
Cada vez que pronunciamos esta frase con el corazon estamos haciendo posible esa entrada en el Reino. La realizacion de la esperanza y la confirmacion de la fe. La expansion del gozo. Llenamos el puchero magico de la generosidad solidaria y lo dejamos repartirse por los continentes y los paises, por las ciudades y los campos. Por las calles y los hospitales.Por las escuelas y los parques del silencio, donde los minutos se hacen de oro bajo el azul o el gris de la cubierta celeste.
Su Reino es nuestra herencia. Su Reino es el denario enterrado en la conciencia, que tendremos que hacer rentable. No porque vengan inspectores eternos a pedir cuentas de la rentabilidad heredada, sino porque si hemos entendido la profundidad de los primeros contenidos de esta oracion y hemos descubierto quienes somos, ya no podremos hacer otra cosa que aumentar el capital y el valor adquisitivo de esta moneda esplendida. La medida inmedible del amor.

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