domingo, 19 de diciembre de 2010

De película

Qué bien! Valencia ya es "moderna". Tiene un AVE a su disposición que se llevará a los turistas a Madrid en una horita y media, o menos - lo que tardarían en llegar a Alcoi, por ejemplo, en uno de los trenes-carreta de los ferrocacarriles de tercera regional-. ¿No es emocionante que los turistas - ricos of course- tengan esa posibilidad estupenda, además de ver las sardinas claudicantes y el tiburón dopado en el Oceanografic, las papeleras desvencijadas y las bolsas de mercadona bailando en el aire marino y americascup o tener la posibilidad de freirse al sol veraniego sobre el cemento implacable del circuito de fórmula 1 de la ex capital del Turia? Emocionante es poco. Es otra dimensión. Otro registro. Valencia ha sobrepasado las barreras del imposible. Is't to much. O esto es massa, valencians i valencianes. ¿Qué nos queda ya por alcanzar en estos parámetros de gloria, pompa y circunstancia? A lo mejor, un poco de conciencia. Un buen chute de lucidez y una falla que queme para siempre el ninot estúpido de la resignación y de ese cuerpo jotero que mientras tenga un casal fallero al lado, una paella, orxata y fartons que trasegar, un petardo a mano y una mascletá con la que colocarse, no saldrá jamás del sopor. Y así le venden la cabra cada día. Mientras dos docenas de turistas -con mucha suerte- y otras dos de ejecutivos millonetis, tendrán diariamente un milagro ultrarápido a su disposición, miles de ciudadanos normales, con sueldos modestos y pensiones en la cuerda floja, ya no tendrán trenes de media o larga distancia, a precios y velocidades normales y se verán forzados a viajar en autobús y en coche. A colapsar carreteras y rotondas, a correr el riesgo de los accidentes de tráfico y a aumentar el vertido de CO2 en la atmósfera. ¿No somos líderes mundiales en energías alternativas? ¿Pero no estábamos preocupadísimos por el cambio climático?
Este AVE tendría sentido si la red de ferrocarriles se modernizase de verdad, es decir, tuviese cobertura adecuada, con trenes actualizados que no dejasen sin comunicación regiones y comarcas enteras, porque las personas que las habitan no son rentables para el turismo. Y sin embargo son la verdadera riqueza. El hombre. En función de quien tiene sentido el progreso. ¿Vale de algo el dinero y el prestigio si la base de la sociedad está oprimida, abandonada a su suerte, que no sólo es "suya" sino adjudicada por el trust de la pela? No sé como todavía no vemos lo que ocurre ni a qué estamos esperando para comprender que si no despertamos seguiremos siendo el pienso del corral para alimento de las bestias que manejan lo que no entienden. Con el permiso y la aceptación de casi todos. La mayoría que llena las urnas con el voto del miedo, tal vez con el de la esperanza o con la irresponsabilidad de la abstención. La democracia en paises anestesiados, es la dictadura encubierta. Un pueblo despierto nunca puede ser sometido por ningún sistema. Un pueblo dormido convierte la democracia en dictadura. Estados Unidos es un ejemplo clarísmo. Con ellos empezó el sistema liebraldemócrata a hacer parroquia en el mundo occidental. Y con ellos hemos visto la decadencia en picado de la libertad y de la democracia. Obama es el prisionero utilizado para que todo aparente cambiar y seguir lo mismo, e incluso peor. El sistema del club de mandos, ha sido dejar que la esperanza crezca al máximo para que se frustre por completo y los pueblos se sometan en vista de que nada se puede cambiar. Manejando los dineros se maneja la política y la propaganda mediática. El comercio de los intereses privados que se nutren de exprimir lo público. Se compran voluntades y se domestica la granja y el gallinero. Se adolece de una sanidad indecente, de una escuela inadecuada, de unas instituciones opacas e injustas, de una administración irresponsable y de una pésima gestión de recursos, mientras se ve pasar de lejos un AVE ultraveloz medio vacío, que hemos pagado entre todos y al que quizás nunca podremos subir, porque no podemos pagar el billete. Eso sí, nos podremos unir, con el xiulet y el tabalet, a la fallera mayor, al alcalde y la banda municipal tocando "El postiguet" en el andén del apeadero ya sin más posibilidad que ver la estela del AVE, mientras los juniors de la parroquia saludan con sus pañuelos el paso del cometa ferroviario. Como en una secuencia eterna de un eterno "Bienvenido Mister Marshall". Ay, San Berlanga que estás en los cielos....

2 comentarios:

Rafa Monterde dijo...

Ay, San Berlanga que estás en los cielos....

¡Cuánta razón hay en esto!

Es una pena que sólo podamos comentar los posts...

Un saludo, Rafa.

Sol Ruiz dijo...

Eres libre de comentar lo que quieras, aunque parezca que no venga a cuento. Siempre es interesante compartir.Y me encantará si lo haces aunque sea otra cosa distinta al post.

Saludos a vuelta de correo.