martes, 23 de enero de 2024

Maravillosa apología de lo más necesario para la humanidad: la conciencia, el alma, la luz y la verdadera vida que sólo nos puede dar el Amor, que todo lo explica, todo lo arregla y todo lo puede 😇😇😇😇😇🙏🙏🙏🙏🙏

  Leonardo Boff: "El Papa ha iniciado una verdadera revolución" :: Mundo ...

"O damos este paso o nos devoraremos unos a otros…" La urgencia de un humanismo mínimo

Religión Digital
 
El amor forma parte del ADN humano

"Mi sentimiento del mundo me dice que posiblemente nunca en la historia de los últimos tiempos hemos vivido, a nivel universal, tanta inhumanidad"

"Estimo que la causa principal de la inhumanidad actual e histórica reside en la erosión de la Matriz Relacional … no es el materialismo o el ateísmo: es el desenraizamiento"

"Hoy tenemos que volver a nuestra propia esencia para refundar un humanismo mínimo … abrirnos a aquella Energía poderosa y amorosa que intuimos en nuestro propio ser como razón y soporte de toda la realidad"

"Las religiones la llaman Dios, los cosmólogos, Abismo alimentador de todos los seres, o lo que prefiero, 'aquel Ser que hace ser a todos los seres' … Olvidemos los nombres y concentrémonos en esa Energía Inteligente y Suprema que sustenta y subyace a todos los seres y fenómenos. Es una visión humano-espiritual de las cosas"

Mi sentimiento del mundo me dice que posiblemente nunca en la historia de los últimos tiempos hemos vivido, a nivel universal, tanta inhumanidad. Cuando hablo de inhumanidad quiero expresar el total desprecio del valor del ser humano para otro ser humano diferente, ya sea de etnia (negros, indígenas, palestinos), sea político (fundamentalistas, conservadores), sea de religión (musulmanes, umbandistas), sea de género (mujeres y personas LGBT+). Por unas zapatillas se mata a una persona. Una pequeña discusión de tráfico puede terminar en un asesinato a tiros. 

Sin hablar de la guerra Russia-Ucrania (por detrás estan los USA y la NATO), toda la humanidad está presenciando la más terrible inhumanidad, a través de los medios digitales, a cielo abierto: la destrucción de todo un pueblo, los palestinos de la Franja de Gaza, con miles de niños inocentes sacrificados por la furia vengativa del actual primer ministro israelí Benjamín Netanyahu. Su ministro de Defensa declaró explícitamente que los palestinos de la Franja de Gaza (especialmente el brazo militar de Hamas que perpetró un acto terrorista contra Israel el 7 de octubre de 2023 con más de mil víctimas) son como animales, son sub-humanos y así deben ser tratados, eventualmente, exterminados.

Cercados por todas partes, como en un campo de exterminio, los que viven en la Franja de Gaza están siendo atacados permanentemente de día y de noche, por tierra, mar y aire por las fuerzas de guerra del gobierno israelí. Muchos mueren de sed, de hambre bajo los escombros y de sus heridas, pues les es  negado todo.

Ni de lejos se alimenta la idea de que todos somos humanos, del mismo género de seres y, por lo tanto, que existe un lazo innegable de hermandad entre todos. Todos respiramos, todos pisamos el mismo suelo, todos recibimos los mismos rayos de sol y las gotas de lluvia. Todos, por altos que sean sus cargos, tenemos que atender las necesidades de la naturaleza. El rey de Inglaterra no puede decir a su servidor: vete a hacer pipí por mí. En este punto reina la más radical democracia en grado cero, que incluye a reyes, reinas,  papas, millonarios, gente sencilla del pueblo, hombres y mujeres, niños y ancianos.

¿Por qué somos incapaces de tratarnos humanamente? Es decir, de acogernos como miembros de la misma especie homo, respetarnos en nuestras distintas formas de organizar la vida social y personal, los hábitos, tradiciones, expresiones religiosas y prácticas  sexuales. ¿Qué existe en nosotros que nos hace enemigos unos de otros, homicidas, fratricidas, etnocidas y últimamente biocidas? Hay algunos que afirman que el hombre de Neandertal, también un humano pensante, habría sido exterminado por el homo sapiens.

Los bioantropólogos ya han observado que somos una especie extremadamente activa, inquieta, violenta y posiblemente con poca duración sobre este planeta. Por otro lado, genetistas y neurólogos (cf.Watson, Crik, Maturana) constatan que pertenece a nuestro ADN el amor, la solidaridad, el sentimiento de pertenencia. ¿Hay cómo  encajar estos datos aparentemente contradictorios? ¿Por qué hemos llegado a los niveles de inhumanidad actuales?

No conozco ninguna respuesta satisfactoria. Lo que podemos decir, como han sostenido tantos pensadores, es que el ser humano, por su condición existencial, es simultáneamente sapiens y demens. Está movido por impulsos contradictorios que conviven en la misma persona, uno de destrucción y otro de construcción. He trabajado con dos categorías: la dimensión sim-bólica del ser humano (la que une y congrega) y la dimensión dia-bólica (la que desune y desagrega). Ambas conviven, se enfrentan y aportan dinamismo a la historia.

En ocasiones, por múltiples razones que no podemos exponer aquí, predomina la dimensión simbólica. Así surge una sociedad de convivencia pacífica y colaboradora. En otras, impera la dimensión dia-bólica que desgarra el tejido social, produce violencia e incluso guerras. Temo que estamos en este momento bajo el predominio de lo dia-bólico, pues prevalece el pensamiento fundamentalista, fascista y de uso de la violencia para resolver los problemas humanos.

No basta describir esta fenomenología de dualidad. Tenemos que cavar más hondo. Estimo que la causa principal de la inhumanidad actual e histórica reside en la erosión de la Matriz Relacional (Relational Matrix). Es decir, a lo largo de la historia, lentamente pero finalmente de forma cabal, rompemos el sentimiento de que todos estamos interligados, de que se instauran relaciones entre todos los seres, formando el gran todo de la naturaleza, de la Tierra e incluso del cosmos.

Con la irrupción de la razón y su uso como poder de dominación, hemos roto con la Matriz Relacional. Nos hemos considerado señores y dueños de las cosas. Podemos usarlas sin el menor escrúpulo en benefício nuestro, con el falso supuesto de que ellas no poseen valor en sí mismas y, por eso, carecen de propósito, inclusive el planeta Tierra. Así se fundó el paradigma de la modernidad.

Esa ruptura se muestra hoy extremadamente dañina, pues la naturaleza, o la Tierra, están volviéndose contra nosotros, enviándonos eventos extremos, una gama de virus letales y, en los últimos tiempos, el calentamiento global, que ya no tiene vuelta atrás. Ha iniciado una nueva y peligrosa fase del planeta Tierra y de la historia humana.

La ruptura de la Matriz Relacional con los seres de la naturaleza llevó a una ruptura con su origen, con el Creador de todas las cosas. Lo que se llamó “la muerte de Dios” significa que perdimos aquel Eslabón que daba cohesión y sentido de plenitud a nuestra vida y la existencia de un Sentido último de la vida y de la historia. La proclamación de la muerte de Dios (su ausencia en nuestra  conciencia personal y colectiva) dio origen a seres humanos desenraizados y hundidos en una profunda soledad. Lo opuesto a una visión humanístico-espiritual del mundo, que sustenta que la vida tiene sentido y la historia no termina en el vacío, no es el materialismo o el ateísmo: es el desenraizamiento y el sentimiento de que estamos solos en el universo y perdidos, cosa que una visión humano-espiritual del mundo impedía.

Hoy tenemos que volver a nuestra propia esencia para refundar un humanismo mínimo. Quiero decir, colocar como marcos orientadores de nuestra existencia y coexistencia en este planeta el cuidado de unos a otros y de la comunidad de vida, el amor como la mayor fuerza congregadora y humanizadora de todas las relaciones, desentrañar de nuestro interior nuestra potencia de solidaridad especialmente con los que quedaron atrás, una opción colectiva por la co-responsabilidad sobre el destino común, y, finalmente, abrirnos a aquella Energía poderosa y amorosa que intuimos en nuestro propio ser como razón y soporte de toda la realidad. Podemos darle mil nombres o ninguno. Las religiones la llaman Dios, los cosmólogos, Abismo alimentador de todos los seres, o lo que prefiero, “aquel Ser que hace ser a todos los seres”. Olvidemos los nombres y concentrémonos en esa Energía Inteligente y Suprema que sustenta y subyace a todos los seres y fenómenos. Es una visión humano-espiritual de las cosas.

Sobre estos presupuestos podremos fundar un humanismo mínimo, mediante el cual todos nos reconoceremos como compañeros del mismo  caminar en este planeta y como hermanos y hermanas de todas las cosas (pues tenemos la misma base genética) y unos de otros. Para ser realistas, el dato sim-bólico y dia-bólico estará presente, pero bajo la regencia de lo sim-bólico.

De esta forma construiremos una convivencia humana en la cual no será tan difícil acogernos los unos a los otros y en la que podrá florecer la solidaridad esencial y el amor “que mueve el cielo, todas las estrellas” y nuestros corazones. O damos este paso o nos devoraremos unos a otros…

*Leonardo Boff ha escrito Tierra madura: una teología de la vida, São Paulo, Planeta 2023.

 

Traducción de María José Gavito Milano 

 

                                 

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Comentario del blogg:

Una vez más, mil gracias a Leonardo Boff por insistir en la urgencia del cambio renovador ya urgentísimo de la des-humanidad de atrezzo en verdadera humanidad. La primera urgencia es salir de la mentira para entrar en la realidad.

¿Cómo podremos sanar la enfermedad global si personalmente no reconocemos ni sanamos la enfermedad personal y vamos por el mundo en un constante baile de disfraces intentando parecer lo que no somos y con ello causando sólo desastres sin parar? Conocerse honestamente por dentro para equilibrarse por fuera es la única medicina que nos cura y hace posible la manifestación del Ser, que las religiones vienen llamando "dios" desde hace milenios, sin que esa denominación implique algo más que fanatismos, imperialismos y negación práctica de lo que afirman las palabras repetidas sólo de memoria y por costumbre más que por amor, compasión y conocimiento profundo. El cambio urgentísimo es personal, en primer lugar, para que pueda ser común. Para que haya pandemias son necesarios l@s enferm@s un@ por un@, si la mayoría están san@s y vacunad@s por su propio crecimiento responsable y consciente del 'gnothi seauton' (el 'conócete a ti mism@' de Sócrates e Hipócrates, unido al amor imprescindible que aporta Jesús de Nazaret) no hay pandemias. 

La injusticia, la desigualdad, la crueldad, las venganzas autómatas, los odios, la violencia, la discriminación y la inhumanidad convertidas en 'inteligencia artificial'(¡?) que suplante al alma y a la conciencia inoperantes, no pueden seguir llevando el timón de ese Titanic tan absurdo como ciego y estúpido, al que, sin duda, se ha confundido con "la verdad" y "la realidad", "la ciencia y el conocimiento absolutos que jamás se equivocan", cuando el totum revolutum resultante sólo es un engendro sacadineros y drogaconciencias perdidas en la nada, utilizando ideologías, negocios, religiones, 'magias', la tecnología más "avanzada" para herir y matar, locuras miserables y autodestructivas como las guerras actuales en Gaza, Ucrania, Siria, Líbano, África, Mar Rojo, Ecuador, etc, etc...y como causa y resultado, el vacío alucinante de verdadero AMOR, la energía clave del SER para poder existir; y que le llamen "dios" o como quieran llamarle, pero que no lo confundan con un letal y esperpéntico teatro de títeres y a su imaginario "cielo" con Wall Street,  sus 'templos' con Manhattan y Hollywood, o al camino del Evangelio -la buena noticia- con la ruta 66...Ainsss!!! 

Gracias, hermano Leonardo, por seguir remando en el Lago de la Galilea infinita, repartiendo por el mundo los alquímicos y humildes panes y peces del espíritu...el alimento más nutritivo, inofensivo, ecológico y saludable de que dispone nuestra especie! 

P.D. Quiero manifestar mi apoyo y cariño por el hermano Francisco, el servidor no sólo de los católicos vaticanistas, sino de toda la humanidad que sufre injusticias, guerras y masacres, discriminaciones, abandono, olvido, crueldad, venganzas, abusos, engaños, racismo, hipocresías muy rentables, con el resultado de hambre, miseria, discriminación, racismo -solo para pobres, claro, los ricos y millonarios jamás son discriminados por sus etnias ni culturas ni religiones- y tanto dolor recurrente que no alcanzan a  expresar las palabras. No tiene ningún sentido que "cristianos" seguidores teóricos del Evangelio y de Jesús de Nazaret, insulten, critiquen y no comprendan a Francisco, cuando si fuese verdad en ellos esa fe que tanto cacarean, lo primero que harían sería agradecer al Ser Infinito esta oportunidad de avanzar y cambiar para mucho mejor, y hacer lo mismo que hace Francisco, agradeciendo  a ese "dios" del que tanto hablan y tan poco conocen, que un hombre como él haya podido llegar al Vaticano para cambiar de orientación y de modelo los zapatos de lujo papal por "las sandalias del pescador". ¡Ánimo, hermano Francisco!, tú sabes, en primera persona, que seguir a Jesús de verdad en un mundo como éste y en una iglesia como ésa, tiene  consecuencias muy duras de pelar, igual que Jesús sabía lo que pasaría si iba a Jerusalén a celebrar la Pascua...Los fanáticos son especialistas en el tema a base repetir siempre lo mismo, para ellos Teilhard de Chardin, por ejemplo,  era un  hereje por unir los cables entre Fenómeno Humano y Medio Divino...Pero qué te voy a contar a ti, heredero directo del mismo soplo espiritual y temporal...Adelante, Francisco, hermano querido, la verdadera humanidad bienaventurada está contigo y en ti, porque te ocupas mucho más que te preocupas, como nuestras hermanas aves y flores...¿qué te voy a decir que tú no sepas sobre el tema a estas alturas, verdad? Sólo lo digo para disfrutarlo contigo y con toda la familia humana...

             Imágenes Arte Pinturas: Cuadro Pintado con Flores y Pajaros 

Mateo 6:26-30 RVR1960

Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba que hoy crece en el campo y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más por vosotros, gente de poca fe? 

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Bueno, lo de "gente de poca fe", no parece que sea aplicable a Francisco, pero tampoco debo mutilar el texto que, en realidad, está más dirigido a quienes se preocupan por Francisco,  que al propio Francisco...



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