|
Desde
el momento en el que Trump y Netanyahu presentaron su propuesta de
“paz”, el Gobierno de España ha decidido que si hay una tregua en el
genocidio, debe ser del bando que se alegra y no del bando que pone
peros, que ya llegarán. Y en este bando, el jefe del cortijo es Donald y
hay que tragar. Después de lo de la foto, ha venido otro momento entre
Jesús Gil y Nicolás Maduro: se ha puesto a pasar lista de países
presentes y para cada uno ha soltado un comentario. Hoy el emperador
estaba de buen humor y cuando ha llegado el turno de España ya no nos
quería expulsar de la OTAN. “Estáis haciendo un trabajo fantástico”,
le ha dicho a Pedro Sánchez. Luego, en el turno de Italia, se ha
limitado a decir que Giorgia Meloni, su mayor aliada ideológica en
Europa, es “una mujer joven” (tiene 48 años) y “muy hermosa”. Y a
tragar.
En fin, lo importante hoy debería ser (y de hecho es) que los 20 rehenes israelíes que quedaban vivos han vuelto a sus casas, que los cientos de presos palestinos han sido recibidos por sus familias,
que la ayuda humanitaria va entrando en Gaza y que Israel se ha
replegado algo. En fin, que la primera fase del acuerdo se ha culminado.
El problema es que ahora no sabemos cuáles son los próximos pasos. Y todos sabemos, hasta los que no quieren poner peros, que todo esto no ha terminado.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario