La Puerta Azul (Documental Completo)

  

¿Puede funcionar bien un país que se comporta de este modo con los emigrantes/refugiados?

Quienes carecen de conciencia, de sensibilidad y de capacidad gestora para tratar con sus semejantes de diversas etnias y procedencias y para organizar desde la ética y los derechos humanos unas normas políticas decentes y justas, compasivas y acogedoras que traten igualmente a cualquier persona en dificultades y peligros, no están capacitados para gobernar nada, ni para hacer leyes, ni para presidir instituciones y estamentos que deberían, ante todo, estar al servicio del bien común y no como felpudos y herramientas del poder, solamente ocupado de sí mismo y de sus intereses de partido. Y cuando escribo "bien común" no me refiero solamente a al bien de los españoles, ya sean valencianos, vascos, catalanes, madrileños o andaluces, etc, sino al bien de toda la comunidad humana, sin excepciones.

Convertir en cárceles los centros que deberían ser de acogida no tiene excusa. Cuando detienen a un emigrante por la calle, sólo por su aspecto y para comprobar si tiene papeles y no los tiene, la policía no sabe si es delincuente o no lo es. No debe detenerlo y menos llevarlo a una prisión camuflada de CIE, sino tratar de ayudarle a regular su situación, acompañándole a un centro de acogida para esos casos como los de ACCEM, Cruz Roja o CEAR. Que haberlos haylos. Para quitarle la libertad necesitaría tener informes previos, denuncias, datos y pistas comprobables. Entonces ¿por qué se les encarcela en una celda cerrada con llave donde se les da una botella de agua para compartir con otros tres presos más, no pueden ir al baño, ni moverse por el edificio para informarse o preguntar lo que necesitan saber acerca de donde están y por qué? Ellos no tienen ni idea de lo que puede ocurrirles ni de los malos tratos y vejaciones por parte de una policía que por desgracia tiende al racismo, al desprecio y la persecución filonazi de los extranjeros pobres Lo sano y normal sería que esos centros no fuesen de castigo sino de acogida, no un encierro en  celdas y malos tratos que no se imponen a los delincuentes españoles en las cárceles porque están prohibidos por los DDHH y las leyes. 

España ha sido, y sigue siendo, un país de migrantes, que, lo mismo que los seganeleses, congoleños, nigerianos o guineanos, huían y siguen huyendo de un país sin alma, basado en las mismas desigualdades y en el caciquismo de los poderosos, de la pena de cárcel por robar para comer  y el aplauso para quienes mediante su corrupción hacen posible que no haya comida, ni trabajo, ni casa ni atención ni educación. ¿Quién no tiene entre sus antepasados un bisabuelo o tatarabuelo o un tío lejano, que no tuvo más remedio que emigrar? ¿Qué habría pasado si en las tierras a las que llegaban les hubiesen tratado como lo hace España a día de hoy con los emigrantes que huyen de la guerra, de la persecución política o religiosa, del hambre y la miseria, que seguramente no padecerían en sus países si España y el resto de la Europa parásita y los USA, como las plagas devoradoras, no los hubieran saqueado durante siglos hasta nuestros días hasta usándolos como basureros, una vez que se les han arrebatado y agotado sus rescursos naturales? ¿Tanto cuesta hacernos responsables del mundo que hemos heredado y ahora nos toca asumir y hacerlo en las mejores condiciones para todos y todas? El imperio español, "legal y ¡legítimamente!", robó, invadió, arrasó, mató, comerció con seres humanos esclavizados, durante siglos. Lo menos que podemos hacer es curar esa herida histórica que nos ha maleducado y acostumbrado a tal barbaridad, para ser eternamente los amos del cortijo de la basura. 

No es nada extraño que viendo como "normalidad" situaciones tan devastadoras y crueles sin que les afecten lo más mínimo, mientras no les pase a ellos, los mismos elementos que cometen con toda naturalidad esos delitos de lesa humanidad, en paralelo, se corrompan, vayan a la suya, se apuñalen por la espalda y pongan por delante sus intereses personales como los de sus partidos y sus mitos religiosos,  que están al servicio de esos intereses personales, haciendo de toda la sociedad española una verdadera cloaca sistémica.

Hoy mismo acabo de ver el farisaico escándalo de Vox en Granada -cuyo Ayuntamiento gobierna el Psoe-, ante unas cruces luminosas puestas al revés y supuestamente satánicas, para celebrar la Navidad. Curiosamente, las mismas que han puesto en Zaragoza, donde nadie ha dicho nada porque el Ayuntamiento es del pp. No se puede ser más zafios y manipuladores.

Sin embargo, esas cruces del revés tienen todo el sentido, son pura justicia poética: la denuncia espiritual materializada, de que la Navidad tal y como se celebra en nombre de un Jesús que nada tiene que ver con esos tinglados, es la manifestación descarada del anticristo. Pues la Navidad real y que tenga sentido, para empezar, no es la época del nacimiento de Jesús, que fue en primavera, sino la celebración cristianizada del pagano e imperial solsticio de invierno, las fiestas Saturnales,  de los antiguos romanos en homenaje al sol, cuyo derroche y desmadre, la Iglesia Católico/Imperial convirtió  la celebración del nacimiento de Jesús en todo lo contrario que debería ser: una fiesta humilde y feliz, de puertas abiertas, para compartir con los hermanos y hermanas más pobres lo que nos gastamos en excesos de todo tipo. ¿Cuántas familias de La Cañada Real, de la Olla del Pastor, de La Coma o de La Fuensanta podrían comer varios días o pagarse la luz, con lo que tirarán y desperdiciarán los celebrantes "cristianos" en los atracones navideños y en los regalos bajo el árbol de Navidad o en el día de Reyes, con la agresión medioambiental que suponen las compras, envases y envoltorios a mansalva y las luces a lo bestia sostenidas por combustibles contaminantes? Celebrar el nacimiento de quien vino, precisamente, a enseñar como cambiar el rumbo de la humanidad y fue crucificado por ello, como en el Occidente maravilloso actual , se sigue crucificando a los que son y viven como vivió Jesús. Es de locos, además de un trampantojo indecente.

¿Puede celebrarse de verdad y con un sentido real, el nacimiento en un paupérrimo pesebre, del liberador de Nazaret, que -como él mismo afirmó- no tenía lugar  en el que reposar la cabeza ni nido en el que refugiarse como las liebres o  pájaros? ¿Tiene sentido que quienes son capaces de crear, mantener y costear  los CIES y sus malos tratos devastadores a nuestros hermanos migrantes, como lo más normal lo hagan además con los fondos públicos que deberían usarse para acoger, orientar e integrar a los refugiados/migrantes, que además serían muy bien acogidos y muy necesarios en la España vaciada? 

Posiblemente celebrar el timo del anticristo tenga más sentido que enfadarse por las luces satánicas de las cruces al revés (el apóstol Pedro pidió ser crucificado al revés porque no se creía digno de estar a la altura de su maestro y desde luego, no era satanista); la verdad está dejando al descubierto la basura amontonada en el prostíbulo de la Gran Ramera, que describe el Apocalipsis, revelación cada vez más evidente, con pelos y señales. Tal cual. Pura justicia poético/evangélica, para que quienes tengan ojos,vean,quienes tengan oídos escuchen y quienes tengan dos dedos de frente aten cabos y comprendan el por qué de lo que nos está pasando. No es un castigo de ningún dios vengativo y oxímoron de sí mismo, sino el resultado de lo que se hace y no se debería hacer y de lo que no debería hacerse y se hace sin parar. Ni más ni menos.