Magnífica exposición y análisis de una situación difícil y complicada: la manipulación de la enfermedad como negocio, por parte de los intereses sin ética ni deontología. Y como siempre, gracias a nuestro estimado amigo y maestro, el Dr. Gonzalo Fernández-Quiroga, que como siempre y "hablando de homeopatía" ilumina el panorama de lo incomprensible, como lo es el hecho de que quienes en teoría se dedican a fabricar remedios para eliminar o aliviar la enfermedad, se acaben convirtiendo en especuladores y empresarios de la enfrmedad misma como negocio hasta inventable. Tal vez el peor de los virus y pandemias sea nuestra propia especie cuando se empeña en apoderarse de todos los conocimientos habidos y por haber, sin que sus integrantes se conozcan previamente a sí mismos, algo que ya advertía la medicina griega que practicaba Hipócrates, dando a los pacientes la mejor y más segura de las recetas: "Gnothi seautón". O sea, "conócete a ti mismo" ...y ya no me necesitarás tanto como médico y disfrutaremos mucho más como amigos. Gracias, Gonzalo por esa pedagogía terapéutica, cada día más necesaria y urgente. Yo diria, que de UCI cognitiva y ética. Ains!

 

Cómo y por qué se inventan enfermedades

 

 

¿Puede una enfermedad ser “inventada”? ¿ha pasado alguna vez? ¿sucede en el presente? ¿qué consecuencias tiene? A todos nos interesa este asunto, a pacientes y médicos, y más, incluso, a los que, además, nos entusiasma la comunicación, el uso de las palabras con un determinado fin (a veces, muy alejado de su significado original). Y[…] 

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(como ya es habitual, para leer el post completo pinchad en el título que lo encabeza. Lo siento, family, como dirían en Matrix...es cosa del sistem in failure, seguramente porque no he tomado ni la píldora azul ni la roja...😂😂😂, qué despiste!)

 

P.D.

Es muy raro que desde hace semanas no encuentre ningún comentario publicado en el blog "Hablando de homeopatía" . No es creíble que nadie comente nada en tanto tiempo y con varios posts tan interesantes de por medio, y por supuesto que no aparezcan mis comentarios tampoco resulta normal. En fin, me pregunto, ¿es posible que las enfermedades inventadas afecten también al sistema informático que rige los destinos de la comunicación? A ver si después de todo, va a resultar que Aldous Huxley tenía razón...Quindi, chi lo sa!