jueves, 21 de agosto de 2025

Gracias, herman@s de GREENPEACE, por este programa desmontador y limpio de bulos y enredos, que a la hora de la verdad sólo son toxinas y zancadillas de la ignorancia y del negociete que las acompañan. No hay peor veneno social e individual que la mentira normalizada como "verdad" jugando con la desinformación, con la corrupción del negociete, el miedo, el enfado, la saturación y el hartazgo sin salida ni soluciones decentes. Menos mal que en el fondo de lo más humano, limpio y lúcido está la energía de la Supraconsciencia en la base material /espiritual/psíquica/racionalemotiva/sorofraterna, inspiradora y resistente...del Nosotr@s, o sea, las pilas y las bases infinitas de la Vida verdadera, y no de sus ridículas y exterminadoras fotocopias...Ains!!!! P.D. del blog:⏰⏰⏰⏰!!!!! Es básico y urgentísimo que despertemos cuanto antes, que exijamos - sin insultos, sin ira, sin odio ni malauva- a quienes están obligados por nuestros derechos y deberes, a cumplir las funciones obligartorias que la aunténtica POLÍTICA exige para construir, mantener y sostener nada menos que el BIEN COMÚN. ¿Cómo una oposición ideologista y obsesiva con sus propios absurdos, se atreve a negarse a solucionar y acordar con todos y todas, soluciones parlamentarias, regionales y municipales, mediante acuerdos tan urgentes para el Bien Común, que es asunto de TOD@S, sean las que sean sus ideas teóricas, a la hora de la verdad? ¿Dóne está su sentido democrático y responsable, que debería ser su fundamento básico para estar en el Parlamento, en el Senado y en el Poder Judicial? ¿Tal vez estará enterrado con su fundador y patrón, la momia fachaideologista del dictador Franco? Que se dejen de comidas de tarro ideológicas, para que sean las conciencias éticas, humanitarias, políticas de verdad, y no los dineros y poderes adyacentes, los que se unan para solucionar en vez de empeorar, guerrear, encloacar, insultar, calumniar y basurizar el Estado y a sus habitantes, mientras lo convierten en la falla apocalíptica de su ridícula y cruel feria terminator. Si las causas de este desastre son el abandono de la España vaciada y los emigrantes no tienen donde asentarse, ¿No será lo más sano, humanitario, inteligente y práctico, acondicionar ese vacío humano lleno de vegetales abandonados, para que los emigrantes acogidos, ayudados y orientados por los ayuntamientos en peligro incendiario, también lo habiten, lo cuiden por anticipado y al mismo tiempo, tengan un lugar y un techo social digno para vivir, cuidando del medio ambiente, limpiando los campos y las montañas de la vegetación no arbórea que se multiplica sin parar con las lluvias torrenciales en otoño y primavera, y que al secarse en el verano con los golpes de calor y la irresponsabilidad de juergas, colillas tantas veces tiradas por las vantanillas de los coches o por una ventana de la casa, o desde la barbacoa del chalet, o por cualquier colocón pirómano, provoca los incendios, que con el actual "sistem in failure" ppepperiforme está dejando todo en la ruina, menos a sus adeptos forrados que, precisamente, viven de las rentas que producen los problemas y los conflictos ideológistas, nunca políticos de verdad. A más desastres más dinero para unos pocos y más ruina para muchísimos, que son quienes a la hora de la verdad pagan los impuestos que los ricos ideologistas y nada políticos responsables no pagan, potenciados por unos irresponsables gestores que les facilitan el negociete ganancial a cambio de sus votos y de sus apoyos mútuos para obritas interminables 'solucionadoras'(¡?) de problemas urbanos que no existen, invisibles, (como sucede en las Avenidas valencianas de Pérez Galdós, Giorgeta y Tres Forques, o en la calle Alicante, entre la Estación del Norte y la plaza de toros), con vallas eternas e inamovibles, impidiendo el tráfico, con los suelos levantados durante meses y meses, y los trabajadores que casi nunca están por allí...Un modo rarísimo de hacer obras interminables, pero que sin duda, tiene una explicación que no se acaba de dar ni de remediar en ese maravilloso antro municipal que nos desgobierna, desde El Ventorro fashion, y alucina por todas partes. No es nada extraño que en unas comunidades autónomas en manos de semejantes elementos, los incendios, las danas y los desastres sean los directores generales de escena, que cuando se montan los poyos, sólo saben echar la culpa de sus ocurrencias regionales a los Gobiernos Centrales, si no son los suyos, claro, como es el caso, mientras ellos se van de copas y comilonas a otras regiones y hasta de vacaciones a tros continentes, por "suspuestos", con el dinero que cobran por hacer un paripé constante y un desgobierno aberrante. No han entendido aún que ese mismo fuego que a ellos les importa un rábano, provocado en las Españas, por su falta de cuidados preventivos, humanos, sociales, ecológicos y técnicos, también acabará, antes de lo que imaginan, con su aberrante, loco, y sobre todo, insostenible y absurdo negociete ppeppero+voxciferante=autoterminator.Y no porque nadie les declare esa guerra que tanto les ilusiona y les pone a cien, sino porque ell@s mism@s son su propia y peor dinamita y bomba atómica🙈🙉🙊💫.


🔥 Incendios en España: desmontando bulos

Greenpeace info@email.greenpeace.es

20 ago 2025, 14:08 (hace 20 horas)



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Hola, sol:

 

Seguimos con preocupación la ola de incendios forestales que arrasan ya 350.000 hectáreas y lamentamos profundamente la pérdida de vidas así como los terribles daños que están causando.

Casi a la misma velocidad con la que se extienden las llamas, se difunden los bulos en las redes sociales. Es esencial distinguir entre hechos y desinformación para protegernos y proteger nuestro medio ambiente.

Analizamos y desmontamos algunos de los más frecuentes >>

1. “El cambio climático no influye en los incendios”

La ciencia es clara: la crisis climática multiplica la frecuencia, intensidad y duración de los incendios. Las sequías y olas de calor son cada vez más duraderas y las temperaturas más intensas, y crean condiciones más propicias a incendios como los que estamos viendo por todas partes. Negar la evidencia científica solo retrasa soluciones reales.

2. “La agenda verde entorpece la lucha contra el fuego”

No tiene ninguna lógica. Los avances en política ambiental solo buscan mejorar la adaptación de las masas forestales al cambio climático. El negacionismo, abanderado por algunos partidos políticos, ha hecho de las políticas ambientales su campo de batalla.

3. “Se provocan incendios para poner renovables”
Falso. Las plantas de energías renovables no necesitan recalificar el suelo para poder ser instaladas. Por otro lado, la Ley de Montes no permite recalificar automáticamente áreas quemadas.

 

4. “Los ecologistas no nos dejan limpiar los montes”
Los ecologistas no se oponen a la gestión forestal, justo lo contrario: reclaman que sea planificada, sostenible y basada en la ciencia. El problema real ante el abandono de los montes es la falta de políticas públicas que incentiven la gestión forestal, es decir, presupuestos y reformas fiscales favorables a la actividad forestal.

 

5. “Terrorismo incendiario”
Muchos políticos confunden los incendios intencionados con la acción de los pirómanos. Hablar de “mafia pirómana” es una forma de diluir sus responsabilidades y negar el papel del cambio climático. Tanto las fiscalías como la Guardia Civil descartan la existencia de tramas organizadas en torno a los incendios forestales.

 

6. “Los montes están descuidados por culpa de las zonas protegidas”
La mayoría de las áreas protegidas mantienen la actividad forestal y tienen planes de gestión específicos que contemplan el riesgo de incendios. Las áreas protegidas no arden más. La verdadera amenaza es el abandono rural y la falta de políticas de prevención.

 

7. “El uso del fuego siempre es negativo”
El verdadero problema son los incendios de alta intensidad que causan graves daños por su tamaño y virulencia. Pero el uso técnico del fuego por parte de profesionales puede ser una herramienta preventiva (quemas prescritas que reducen biomasa y riesgo) o puede ayudar a controlar un incendio (fuego técnico que ataca los frentes del incendio para ayudar a controlarlo).

 

8. “Los pinos y eucaliptos son responsables de los incendios”
Es un error culpar a las especies. Todas las superficies (zonas agrícolas, pastos, matorral, superficie arbolada) pueden arder, y más durante los incendios de alta intensidad. Desde Greenpeace defendemos que se ordene y planifique el monte aumentando la diversidad de especies, evitando grandes superficies continuas de masas forestales monoespecíficas que son más vulnerables al fuego.

 

9. “Ahora toca repoblar los montes”
Gran parte de la vegetación mediterránea tiene capacidad de recuperarse después de un incendio. Ahora toca esperar y evitar los efectos indeseados de las primeras lluvias. En caso necesario, la restauración de los montes debe hacerse preferiblemente con especies autóctonas y planificando un paisaje resiliente a los escenarios del cambio climático


mié, 27 ago, 11:51 (hace 5 días)



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Hola, sol:

 

Hace apenas unas horas regresé, por segunda vez en pocos días, de la evacuación de nuestro pueblo a causa del fuego. Comparto este desahogo porque aún no sé cómo describir lo que estamos viviendo: miedo, desesperación, incertidumbre, desolación. Desde luego nunca había vivido algo así.

 

Habíamos tenido incendios otros años, incluso habíamos ayudado a apagarlos, cerca del pueblo. Pero lo de ahora es diferente: son fuegos de otra magnitud. En una zona tan húmeda como ésta, cualquier incendio “normal” debería frenarse. Sin embargo, este verano los incendios son de otra magnitud. Se encoge el corazón al ver lo rápido que avanza. Es terrible ver lo rápido que se desatan y lo difícil que resulta contenerlos.

 

El esfuerzo de quienes luchan contra las llamas se concentra en salvar vidas y casas. Lo demás, será lo que suceda de modo natural, una vez desatado el monstruo. Es comprensible que la gente se resista a creerlo, y se aferran a quedarse y luchar contra el fuego “como toda la vida”, pero desgraciadamente esto es otra cosa. Aún así confío en que lo que es el casco urbano del pueblo se salve.


El fuego en Sanabria

 

Hablo de Sanabria, donde está la casa de nuestra familia. Nuestro pueblo, San Ciprián, es el más alto de la ladera, justo donde termina el Parque Natural del Lago de Sanabria. Una zona maravillosa, de esa España vaciada, o más bien abandonada a su suerte, que en verano revive gracias a los turistas y a quienes regresamos a nuestras casas de siempre, a nuestro pueblo.

 

Este verano hemos ido más tarde de lo habitual. Yo quería probar a teletrabajar desde allí, huyendo del calor sofocante de Madrid. Ya en el camino vimos iniciarse el incendio de la Carballeda, al este de Sanabria. Una vez instalados, parecía un milagro vernos rodeados por grandes incendios, este (Carballeda, Zamora), norte (León) y oeste (Ourense), todo a pocos kilómetros, pero Sanabria milagrosamente resistía. Hasta que el fuego de Galicia entró, y después comenzó el de Porto, en el otro extremo del Parque Natural.

 

En apenas media semana, el incendio de Porto fue avanzando y devorando gran parte del parque hasta llegar casi al lago. Con cada día que pasaba, más pueblos eran evacuados. Chequeamos el mapa cada día y nos pusimos como referencia un pequeño embalse: si llega ahí, nos vamos. Y llegó y siguió avanzando.


La primera evacuación

 

Esa noche de domingo decidimos irnos. No es como hacer la maleta para un viaje. Era decidir con el corazón encogido qué salvar porque no sabíamos qué nos encontraríamos a la vuelta. ¿Papeles, recuerdos, cosas útiles? Nadie nos aseguraba que volveríamos a encontrar el pueblo en pie. Cerramos todo lo mejor que pudimos y nos fuimos, pero con grandes dudas de si era la decisión correcta.

 

Aún así, mucha gente se quedó, confiando en que “aquí no va a llegar”.  El incendio siguió avanzando, pero aunque estaba cerca del pueblo, avanzó más en otras direcciones, se metió hacia León y Ourense y evacuaron otros pueblos.

 

El sábado las autoridades permitieron volver. Con miedo pero también con ganas de retomar la normalidad, regresamos el domingo. Esa misma noche salimos a ver el incendio, porque estaba cerca. Se veían las llamas por la montaña a lo lejos. El humo obligaba a usar mascarilla.

 

La segunda evacuación

Este lunes, mientras trabajaba, no paraban de sonar sirenas, hidroaviones y helicópteros Algo inaudito allí, que todo es silencio de campo. A mediodía, vi desde el balcón una gran nube de humo que crecía por minutos. Al rato, un coche de la Guardia Civil recorrió el pueblo anunciando por megáfono la evacuación. Otra vez.

 

Esta vez el fuego estaba mucho más cerca que la vez anterior. Recogimos de nuevo todo y emprendimos la marcha, ya al atardecer. Sin embargo, muchos vecinos decidieron quedarse, convencidos de que esta vez el fuego tampoco llegaría. Algunos incluso cogieron azadones “a desbrozar”. A enfrentarse al fuego “como toda la vida”.

 

El pueblo estaba lleno de guardias civiles, policía aérea (¡que ni sabía que existía!) y la UME. Les preguntamos qué harían ellos y la respuesta fue clara: irse sin dudarlo, y no volver “hasta que llueva, porque antes no se va a apagar”.

 

Con el corazón encogido, volvimos de nuevo a Madrid. Es como vivir una pesadilla que aún no ha terminado. Y lo peor es no saber cómo acabará.

 

¿Qué puedes hacer tú?

 

Ante incendios de alta intensidad, necesitamos proteger nuestros pueblos y para ello es fundamental que se cumplan los planes preventivos y de emergencia local municipales (implementados y comunicados a la población). Corresponde a cada administración local, en general, elaborar su propio plan local de prevención de incendios forestales.

 

El problema es que en muchos casos, los consistorios pequeños no disponen de recursos técnicos, humanos o económicos para la elaboración o ejecución. No puede haber responsabilidad sin recursos.

 

sol: es necesario adaptar y mejorar la gestión forestal del escenario por donde transcurren las llamas. Los incendios no esperan. La acción ciudadana tampoco debe hacerlo.


Gracias por tu solidaridad, sol.

Jose Luis

 

José Luis García Ortega

Responsable del Área de Clima, Energía y Movilidad en Greenpeace España


¿Qué puedes hacer tú?

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👩‍🚒 Apoya a quienes luchan contra los incendios.

✍️ Exige medidas urgentes.

En Greenpeace realizamos investigaciones para definir la realidad de los incendios forestales en nuestro país y exigir acciones; trabajamos para incidir en la necesidad de soluciones al riesgo de ignición y propagación, alejadas de los bulos repetidos sobre piromanía y terrorismo ambiental.

 


 
 

Muchas gracias por tu compromiso, sol.

El equipo de Greenpeace



Greenpeace es una organización independiente que no acepta dinero de gobiernos ni empresas para poder denunciar a todas aquellas personas o instituciones que amenazan el planeta. Solo personas comprometidas como tú hacen posible nuestro trabajo.    



 

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