Así estamos, tal cual...Ains!!!!!

Es el mercado, amigo

 Caen los mantras liberales uno tras otro en la Unión Europea —primero la austeridad, ahora el laissez faire— pero aquí nos siguen comiendo el tarro con que al mercado se le mira y no se le toca 

 Javier Gallego

eldiario.es/Carne cruda

Mientras Europa se dispone a intervenir el mercado energético, Francia nacionaliza la mayor eléctrica europea y Alemania hace lo propio con la filial alemana de Gazprom, en España se lía parda porque Yolanda Díaz y Alberto Garzón les piden a los grandes supermercados que renuncien a parte de sus márgenes millonarios y bajen el precio de la cesta de la compra. Hasta la ministra de Defensa, Margarita Robles, les dice a sus compañeros, la ministra de Trabajo y Economía Social y el ministro de Consumo, que no hagan esas propuestas “que no les corresponde”. La ministra de Defensa. Es para reírse si no fuera tan serio. 

Europa se ha vuelto bolivariana, Francia comunista y Alemania es Venezuela, según el consenso mayoritario en nuestro país donde a la socialdemocracia de Unidas Podemos se le llama ‘extrema izquierda’. Caen los mantras liberales uno tras otro en la Unión Europea —primero la austeridad, ahora el laissez faire— pero aquí nos siguen comiendo el tarro con que al mercado se le mira y no se le toca. Aquí nos siguen repitiendo que subir el salario mínimo paraliza la economía aunque ha ocurrido lo contrario las dos veces en las que el Gobierno lo ha elevado. 

Yolanda Díaz quiere subirlo una tercera y les recuerda a los empresarios que quienes más tienen, más deben aportar, pero se le rebelan. Les pide que firmen subidas salariales en los nuevos convenios colectivos y se levantan de la mesa de negociación. En auxilio de los patronos sale (oh, sorpresa) la derecha, pero también el Banco de España, que debería llamarse ‘la Banca de España’. El Ejecutivo presenta esta semana una propuesta de ley para aprobar un impuesto extraordinario a la banca y a las eléctricas por la crisis que estamos viviendo y no se creerán quién se opone: también la derecha y la ultraderecha. Contra todo pronóstico. Quién lo hubiera dicho. 

Pero seamos justos. Los liberales de este país también están preocupados por el precio desorbitado de la luz. Esta semana le han enviado al Gobierno una propuesta: hacer que las eléctricas rebajen la factura a quienes reduzcan su consumo. ¿Es que se han vuelto socialcomunistas? No, amigos, la idea es que la rebaja la pague el Estado, o sea, nuestro dinero, para que las eléctricas no pierdan un duro. No es una rebaja a nuestro bolsillo, es quitárnoslo de otro bolsillo como vulgares trileros. Es para reírse si no fuera tan serio.  

Todos estos que defienden al mercado por delante de los ciudadanos se autodenominan ‘constitucionalistas’. Me permito recordarles que “toda la riqueza del país en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general. Se reconoce la iniciativa pública en la actividad económica. Mediante ley se podrá reservar al sector público recursos o servicios esenciales, especialmente en caso de monopolio y asimismo acordar la intervención de empresas cuando así lo exigiere el interés general”. Es el artículo 128 de la Constitución Española, no la cubana. Los constitucionalistas son los que menos se la han leído.

La petición, que no imposición, de Díaz y Garzón a las grandes superficies para que reduzcan la cesta de la compra renunciando a un pedazo de sus beneficios debería ir acompañada de ayudas al pequeño comercio para que no salga dañado. Es una propuesta mejorable pero abre un debate necesario sobre quién soporta el peso de la inflación y la crisis. Abre un debate que en España no se permite, a saber, si el Estado debe intervenir para proteger a la población. Europa y nuestra Constitución dicen que sí, pero en nuestro país aún rige la máxima de Rato: ‘Es el mercado, amigo’. Al mercado, no se le discute, se le obedece. 

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Comentario del blog: 

Preguntas de examen:

¿De qué sirven los Estados si cuando hay problemas gordísimos, resulta que precisamente el Estado solo funciona como rehén de un sistema intocable social y económicamente un depredador  feudalismo, que genera los peores problemas? Se puede comprobar a lo largo de la Historia de nuestra especie que ningún sistema político ha logrado jamás solucionar la base de las problemáticas "intocables", como son el poder y el dinero patológicas  adicciones "naturales" y desnaturalizadas. Inhumanas. Bueno, se habla de Buthan como rareza planetaria en esa especialidad, pero habría que ir a comprobarlo más allá del relato. A estas alturas ya es imposible creer en lo que personalmente no se puede comprobar en vivo y en directo. 

¿Acaso la función primordial de un Estado democrático no es gestionar las condiciones de vida de la ciudadanía para facilitar la existencia de tod@s en las mejores condiciones posibles, evitando  conflictos a base de ética, equidad, diálogo, proximidad, equilibrio entre derechos y deberes exigiendo y educando en una responsabilidad igualitaria, según las condiciones y los recursos de cada ser humano que forma parte de una conciencia colectiva in crescendo , sin hacer excepciones basadas en castas y clases sociales?

¿No será que hasta ahora se ha estado manteniendo un concepto de Estado y de sociedad y de tópicos culturales que no se corresponde con el plano evolutivo y las necesidades actuales de nuestra especie, y del Planeta que nos alberga, que no es de nuestra propiedad, sino solo una estación en el viaje evolutivo, porque ni la Naturaleza ni la Vida son propiedad de nadie, sino los planos necesarios para transitar ontológicamente? 

¿No debería ser el Estado la base pedagógica de la humildad y el servicio común de la verdadera inteligencia que hace posible la Vida? No se equivocaba Platón en su planteamiento de que el poder para servir de los estados debería ser cosa de los más sabios, no de los más soberbios, narcisistas delirantes, tan "listos" como idiotas (recordemos que idiota no es solo sinónimo de tonto, sino sobre todo, de egocéntrico obsesionado consigo mismo, incapaz de comprender lo que sobrepasa sus apegos ansiosos, algo que realmente es la mayor de las tonterías, porque nos hace perder la orientación y el sentido de la misma vida, que acaba por convertirse en miedos, sufrimientos, rivalidades, celos, envidias, complejos, fanatismos, adicciones y delirios sin fuste cuando no se encuentra en nuestro interior el eje que nos conecta con nuestra familia humana y sus espacios vitales. O sea, el wifi infinito del que procedemos y al que regresamos constantemente cuando nuestra conciencia particular se despierta y  se reconoce integrada en el Todo de Tod@s. El Amor. Que no solo no es una fantasía utópica, sino la única orientación con todos los puntos cardinales del ser y el existir, disponibles y coordinados. 

Un Estado sin Amor, - o sea, sin Ética, sin altura de miras y de sentimientos sanos y universales, es una debacle asegurada perpetrada por suicidas a lo loco. Ojo, y no nos autoengañemos, que el Amor no es el Eros del deseo sexual ni seducción ni "ilusión" ni afán de conquista para machos peripuestos ni de jueguecitos coquetones para hembras maquilladas a la misma altura del mismo paripé, encayados en los rifirrafes de género, número y caso, esa gramática parda del Juan Palomo, yo me lo trajino y yo me lo como, corriendo constantemente como niñ@s caíd@s del guindo y gritando sin rumbo, tropezando y cayendo  por los bordes de la existencia, entre llantos risas por igual, con las manos ansiosas por agarrar todo en plan zarpa mientras gritan sin parar ante cualquier cosa que les mole o les fastidie: "¡Mío, mío, mía, mía, ehto pamí, tóio pamí, pod eso aquí mando yo, que soy el dey del mambo, la deina de copas, la sota de bastos, el pínsipe de las madeas, la zeñodita Dottenmeyed, Heidi y Pipi Calzaz Ladgaz, hale!", todo ello adobado estatalmente -como mandan las leyes intocables y ejemplares de la Judicatura esppañola- reunido y cocinado por los mejores masterchefs en el patio del recreo de la ONU, de la OTAN, de la UE, de los par-lamentos, de las bancas y sus canicas endiabladas, y todo todito el caos, pada luego, en cuatdro días modidse...Qué Jardín de las Delicias tan kuki, ¿a que sí? Qué pedazaco de deshumanidades, xd! 

Y también qué alegría póstuma descubrir que en realidad Spain no era tan different! Sino  solo una adelantada histórica en experimentos demoledores, ahora que el Planeta empieza a disfrutar plenamente  lo que desde hace siglos en los Imperios Esppañol e Inglés, ya era tradición, sobre todo en Spain donde nunca se puso el sol en unos meses, gracias a Magallanes y Elcano.

Qué terrible cutrerío, ¿no? Y qué bien vendría en el siglo XXI ir aprobando asignaturas pendientes para la humanidad, leer y asimilar desde la escuela y la familia, el barrio y las redes sociales aquel crítico, herético  y 'disparatado' Elogio a la locura de Erasmo de Rotterdam, el holandés pensante y nada errante que sabía desde dónde y por dónde tirar, y ya si el horizonte se amplía  hasta Baruc Spinoza para avanzar y reciclando a Descartes, para alcanzar a Kant y a Hegel, miel sobre hojuelas, o sea, mejor todavía. Venga, familia, hagamos los deberes, porfis!, antes de que volvamos a suspender por enésima y última vez el mismo curso de marras...Ains!!!

Somos de lo que no hay y si no resulta creíble, solo hay que leer la prensa cada día para flipar in colours, of course, dear people...

                     

                           El Jardín de las Delicias. El Bosco.