Sin duda, hoy es un gran día; no todos los días un pueblo, un Estado y millones de conciencias en un mismo continente, múltiple y diverso tienen la oportunidad de expresar en las urnas sus necesidades y sus mejores deseos personales y comunitarios, eligiendo a l@s más adecuad@s para la gestión pública. ¿Imagináis que esto mismo se hiciese en África, Asia, América y Oceanía? ¿Imagináis que esto mismo se pudiese hacer en la ONU, en toda la Tierra convertida en una espléndida República Federal Planetaria? Pues ese es el futuro de nuestra especie si así lo queremos y lo realizamos. Votemos por un mundo mejor, mucho más sano, ecológico, justo, inteligente y creativo para el Bien Común y cariñosamente igualitario en lo diverso y, por ello, tan ético y respetuoso, como pacífico, libre y sorofraternal.
Recordemos que libertad no es hacer lo que nos da la gana sin pensar en l@s demás, sino en comprender y realizar que el ejercicio de los propios derechos pasa por el deber de respetar los derechos ajenos, que también forman parte parte inseparable del tejido de los propios...
Derechos sin deberes son solamente despotismo y tiranías. La Ética es el vínculo que unifica ambos planos de la conducta humana.
Votemos desde la conciencia y no desde las ideas fijas que nos comen el tarro y nos inculcan la costumbre de llevar siempre el mismo cántaro a la fuente, hasta que se rompe, claro, sin descubrir que ya podemos tener grifos y la fuente en casa...
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