Sencillamente, no queda otra. ¿Qué otra cosa se puede hacer en un caso como este? ¿Cómo dialogar con quienes desconocen el diálogo y lo considera una bajada de pantalones, una flojera miedosa y una claudicación?
Este recurso tan legal y político como legítimo y ya éticamente imprescindible, lejos de ser un emocional puñetazo en la mesa por saturación, es un recurso de la inteligencia y de la responsabilidad política tras haber soportado rayando ya la irresponsabilidad institucional y hasta constitucional, meses y años en la encrucijada de lo insostenible, en el límite ya agotado de la propia democracia pisoteada y violada constantemente por argucias y prevaricaciones infinitas que claman al cielo de la coherencia decente en cualquier país, y que en las manos del pp se va deshaciendo como una pastilla de jabón hundida en agua cada vez más sucia y ppodrida.
Demasiado ha aguantado y estirado las cuerdas del andamio desgobernante este gobierno que ha querido poner en pie la ciudadanía en medio del desastre mediante del diálogo, la escucha, y los pactos que hacen posible el bien común y minimizan en lo posible el dolor social . Demasiado han esperado lo imposible, que es como intentar ordeñar un pedrusco o hacer que una vaca o un toro de mihura den un discurso en el Parlamento, que se les entienda y se les vote. Un disparate. Un trastorno mental colectivo programado a posta y sostenido hasta "constitucionalmente" con el apoyo de unas leyes sacadas de la manga mayoritaria "del señorito" en su cortijo todoppoderoso, y con su espectacular sentido de la ppolítica más innovadora: "cuanto mejor para mí peor para vosotros y al revés, cuanto mejor para vosotros peor para mí".Marianus dixit et punctus finalis. O sea, que amén.
Es imposible que el analfabetismo político y social dé como fruto el diálogo, que en España está condenado por gónadas a ser solo un monólogo, o bien de la inteligencia que habla sola sin que la escuchen sin sabotearla o bien de la ganadería más cerril que rebuzna habitualmente entre cabestros y manadas ¿Por qué? Porque diá (prefijo que en griego significa más allá) y lógos (pensamiento inteligente) presuponen la superación de lo irracional por medio de unos conceptos y estados compartidos del ser y la conciencia que en el caso del pp, de vox y del baile de máscaras de c's, no existe y por eso hasta ahora no ha sido posible acceder conjuntamente a ese plano imprescindible para entenderse y gobernarse sin destrozarse. Está quedando clarísimo en los hechos.
La verdadera democracia presupone que los demócratas ya han superado el establo, el corral, el gallinero y la zahúrda como instituciones ad hoc y que ya están en un nivel presentable de inteligencia con el que participar en una verdadera democracia. La democracia es mucho más sensible y real mediante el entendimiento y el respeto a la pluralidad que a la cantidad numérica de los grupos. Es más cualitativa que cuantitativa, pero eso en los planos más elementales y bestias no se comprende ni se valora. La democracia no triunfa arrasando en las urnas desde una sola opción, que la acerca peligrosamente al totalitarismo en cualquier modelo ideológico. Por eso las derechas antidemocráticas la utilizan para destruirla, es decir solo para hacerse con el poder y luego convertir en mayoría absoluta el desguace del sistema que les ha permitido hacerse con los plenos poderes. Para la derecha el único resorte admitido y válido es el golpe de estado "legal", mediante la manipulación/performance de las leyes, de ahí viene su obsesión por el control del Poder Judicial por parte de Legislativo y Ejecutivo. Y así nos va desde que se les concedió una mayoría absoluta, más por abstención irresponsable y desesperada de los votantes que por un convencimiento mayoritario de que esa facción política destroyer pueda gobernar nada con acierto que no sea la habilidad para corromperse/forrarse, cohechando y prevaricando como si no hubiese mañana.
La derecha siempre, indefectiblemente, llega al poder como castigo de los votantes más frágiles, ignorantes, desmoralizados y desesperados, un castigo masoquista, por supuesto, porque seguirán siendo ellos las víctimas en primer plano de su propia decisión disparatada. El triunfo de las derechas siempre es residual, mayoritario por eliminación de la mayoría. Hay que ser caciques que se benefician con la injusticia o ignorantes adictos a la limosna y a la miseria normalizada para votar algo así. Es decir, carne de manipulación, que al final, convencida de hundir a quienes la han defraudado, se acaba por hacer el hara-kiri político, social y económico. "Que se fastidie mi sargento: no como rancho".
Por todas estas razones estoy convencida de que la opción del Gobierno de coalición respecto a la reforma del sistema Judicial impresentable en tantos aspectos, especialmente en lo que respecta a su relación con los otros dos poderes del estado, no solo es necesaria sino también imprescindible y urgentísima.
Sólo una dictadura puede beneficiarse del actual desmadre judicial perpetrado por Gallardón y Rajoy mano a mano, un verdadero atentado terrorista estatal contra la esencia de la democracia, que pretendiendo presuntamente unir la patria la está haciendo picadillo con especial saña "salvadora", como realidad 'democrática'(¡?) sui generis tratando de reciclarla en modelo siglo XV, Reyes Católicos, Torquemadas, Inquisición y conquista desmadrada de un Continente al que se hizo polvo y se ha dejado hecho una pena siglo tras siglo, a base de un saqueo indecente y perverso. A la vista está. América es el Pepito Grillo de Europa. El dedo acusador de sus vergüenzas fascio/imperiales. Por ello, es seguro que los grupos parlamentarios normales, limpios y más sanos, apoyarán sin duda el adecentamiento de las normas del estado, y por supuesto, con el apoyo seguro de la UE que valoran la democracia y la justicia por encima de entuertos y burradas insostenibles en una Europa que pretende ser un gran espacio democrático, participativo y justo, en el que hasta las derechas de Alemania,de Austria o de Suecia, Islandia o Finlandia, resultan ser socialdemócratas y 'rojísimas' comparadas con la derechita carpetovetónica y cafre heredada y encurtida, de Frank/stein bahamondez. Una pesadilla histórica o una historia-pesadilla, que solo se cura despertando la conciencia a una realidad que nos ayude a regenerar y a sustituir los tejidos y órganos estatales tan destrozados como sus viejos organismos ya irrecuperables. Renovarse o perecer. Creo que a España aun le queda energía para no suicidarse de una manera tan torpe y cerril como ciega y estúpida.
Indudable y cristalino: el fin del abuso, por supuesto.
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