¿QUÉ HACEMOS CON LOS MENAS, "SEÑORÍAS"?

Por un lado tenemos ONGs supercomprometidas como Accem, CEAR, y algunas más, que se ocupan de ell@s, de los MenoresExtranjerosNoAcompañados, pero además de esa acogida de urgencias, necesitamos una estructura social permanente y hogareña, familiar, que ayude a integrar social, cultural y pedagógicamente a esas criaturicas sin raíces, sin tierra que pisar ni techo que las ampare, ni paredes humanas que las acojan mientras les ayudan a crecer en un clima familiar, humano, ético y amoroso, pedagógico, sólido y tierno. Orientador y con un futuro que construir entre tod@s, en el que, obviamente, ell@s se sientan incluid@s.

Tenemos una España Vaciada a lo bestia. Miles de pueblos con cuatro gatos, con recursos naturales pero sin iniciativas ni gente que las quiera poner en marcha, campos valdíos, con recursos pero sin manos que los hagan utilizables y ecológicos, sin corazones que les den energía y sin cerebros que les den sentido y un destino sanador, común, inteligente, abierto, sano, competente y feliz. Por otro lado tenemos miles de jóvenes celtíberos con estudios pero sin salida laboral, que tienen que emigrar con sus licenciaturas en la carpeta y el paro total en la posibilidad de un trabajo digno (yo misma tengo cuatro hij@s en ese plan, en Alemania, desde hace años).

Si disponemos de un territorio amplio abandonado y de una cantidad enorme de jóvenes y de niñ@s extranjeros en las formas, pero familia cósmica en la esencia, llamando todos los días a la puerta de la integración global, y de una cantidad suficiente de parad@s y de voluntari@s laborales españoles, que podrían encontrar el trabajo de sus vidas en un proyecto municipal compartido económicamente entre los ayuntamientos y las ONGs populares, estableciendo hogares en las casas abandonadas y reconstruidas, para acoger MENAS, en plan familiar, no en manada, sino en plan familia numerosa, con padres y madres adoptiv@s, por ejemplo, seis u ocho personitas niñ@s o adolescentes, mezclados, como pasa en las familias. ¿Qué pasaría? Pues lo primero, que con dos o tres viviendas habitadas en ese plan, habría derecho a una escuela estatal en el pueblo abandonado, a una farmacia y a un servicio médico. Se abrirían un horno, una tiendecita en plan de todo un poco, talleres de reparación de calzado, venta de ropa y objetos de segunda mano, una biblioteca donde acudir a encontrarse con libros, dibujos, mapas, diccionarios y amigos. Una plaza donde jugar, saltar y correr, algún centro municipal de quedadas para cantar y bailar las canciones y danzas populares de los pueblos originarios de la chiquillería y de las Españas, por supuesto, aprendiendo uno@s de l@s otr@s, donde hacer exposiciones de dibujos y de fotos, talleres vespertinos donde aprender a coser, a bordar, a hacer punto y ganchillo, e incluso a cocinar, lo mismo niñas que niños. Trabajos en la naturaleza, ayudando en el campo a regar, a recoger fruta y colocarla en las cestas para venderla o intercambiarla en la plaza. Habría cuidado de los bosques, de los sembrados, de los animales domésticos y de caballos, borriquitos en las norias, gallinas, conejos, palomas...en fin...un mundo nuevo nacido de las herramientas viejas, que en vez de oxidarse se han regenerado y se han convertido en la misma vida que estaban liquidando, pero en un plano nuevo, completamente OTRO.

Imaginemos lo que iniciativas de ese tipo pueden ofrecer al ser humano. Esos niños y niñas, adolescentes y jóvenes menores de edad, son un filón para el futuro, podrán estudiar y trabajar, disfrutando en vez de sufrir sin parar e incluso morir sin haber vivido, sólo porque nacieron en el destierro de la civilización millonetis, en la fábrica de esclavos en que "el primer mundo" ha convertido al tercero y al cuarto, para lavarse las manos como Pilatos, cuando esos habitantes del tercer y cuarto tanatorios de la dignidad y de los derechos humanos, vienen a pedir ayuda para seguir vivos.

Ese nuevo estilo de vida compartido puede convertirse en turismo humanístico, sereno y ecológico, donde se pueda acudir durante una o dos semanas, para aprender en la práctica otras formas de vida mucho más feliz y humanamente rentables en todos los sentidos.

Por otra parte es cada vez más urgente el acercamiento social e integrador entre los países de procedencia de la inmigración y los estados del destino migratorio. De modo que el fenómeno de huida tenga una solución humanitaria, justa e inteligente. Buena para tod@s. La represión y el castigo nunca solucionan nada, más bien lo corrompen, lo empeoran y lo comoplican todo, hasta terminar en guerras terribles y destrucción de los seres humanos, haciendo cómodo y rentable el negocio del armamento y demostrando a su manera animal y paleolítica que la única "solución" posible es la violencia de siempre.

Es completamente absurdo que si existe la ONU, no sirva para nada a la hora del acercamiento, del diálogo entre TODOS en temas tan horrendos como el de la violencia contra los migrantes y el vacío total a la hora de acabar con la miseria provocadora de la emigración. La ONU debería estar presente en los estados más maltratados, como nexo unificador de diálogo, de escucha y preguntas, para tejer soluciones concretas, ayudando a crear medios concretos de vida, de educación y de gestión social, económica y ética, implicándose en la solución de un modo práctico y no solo de boquilla, para que se ponga en marcha una nueva concepción vital de la política global y nacional, cuidando activamente de la politeia, de la ciudadanía, sobre todo de la más desprotegida, maltratada y olvidada, ayudando a los gobiernos precarios en todo, a evolucionar, a humanizarse y a responsabilizarse de sus obligaciones al servicio de sus conciudadanos, especialmente de los que están más indefensos y carentes de todo lo necesario, que según están las cosas es la inmensa mayoría del Planeta.

¿Qué será dentro de nada, de los países cuya población se reparte emigrando por todo el mundo porque en sus territorios explotados y arrasados por las empresas invasoras y portadoras de restos tóxicos, envases de plástico, metal, tejidos y basuras no hay quien viva, porque el mundo millonetis paga a los tiranos políticos del Tercer Mundo para que acojan toda su mierda irreciclada?

Los problemas del Tercer Mundo no pueden seguir siendo el campo de batalla y el negocio armamentista y basuril de los estados y naciones-ppatrias del Primer Mundo, como está pasando y ha pasado durante siglos en la historia de los puñeteros imperios.

Urge que la ONU ejerza con más dedicación, creatividad e inteligencia práctica su responsabilidad y su conciencia global de nación en nación, y que haga examen de esa conciencia colectiva y personal mientras la va encontrando y la ponga en marcha porque tal vez aún no exista y no tenga ni idea de cómo crearla. La base de la solución es el ejercicio constante de la Fraternidad Universal que no tiene nada que ver con la complicidad de intereses, ni con chanchullos de manga ancha para ricos y poderosos y con asfixia social para pobres, necesitados y también necesarios trabajadores imprescindibles, gracias a l@s que la sociedad global siga funcionando. Si esos países se quedan sin población, sin juventud, sin posibilidades de futuro, también llegará un momento en que el Primer Mundo será la única salida migratoria, algo que ya está sucediendo. Es una locura y un suicidio también para ese Primer Mundo, tan egoísta como chapuzas, torpe y loco. Hay que cambiar de rumbo, ejercer humanidad inteligente y empática, haciendo por ellos lo que quisiéramos que hiciesen por nosotros en la misma situación que ellos padecen y de la que, para más inri, nuestros imperios a lo largo de la historia, han sido y siguen siendo los causantes.

Otra posibilidad tan evangélica como justa y necesaria es que las religiones cristianas, que son unas cuantas y, como es el caso del catolicismo, están forradas y poseen un patrimonio multimillonario en monumentos, joyas, obras de arte y edificios espectaculares, -en los que Jesús de Nazaret jamás habría reposado su cabeza-, tantas veces vacíos y cerrados a cal y canto para quienes duermen debajo de un puente o en un banco del parque, vendiesen el tesoro y lo empleasen en crear iniciativas laborales y vitales en los estados más pobres del Planeta, de los que sale la emigración hacia el resto del mundo más rico, más enlodado y hundido en el capitalismo.

Imaginemos cuántos recursos para una sana reorganización aportaría a la eliminación migratoria forzosa para sobrevivir la inversión del capital que obtenido, por ejemplo, por la venta de El Vaticano y de sus tesoros artísticos, y de las catedrales para convertirlas en museos y centros culturales patrimonio de la humanidad o en hospitales, refugios de acogida o escuelas, por ejemplo, a un Banco Solidario Global de la ONU, en el que serían los mantenedores los estados más ricos del Planeta y los millonarios como el creador de Internet, que dice estar encantado de cooperar y dispuesto a ayudar a quienes lo necesiten y otros ricachones por el estilo que piden a sus gobiernos que les suban los impuestos para poder ayudar a mejorar la situación del Planeta, porque a ellos les sobra tanto que necesitarían unas cuantas vidas para poder gastarlo todo y se sienten por ello bastante incómodos y, puede que hasta miserables.

Seguramente hay en el mundo mucha más gente buena que "mala", pero es imposible descubrirlo si no hay entre nosotr@s oportunidades e ideas claras y lúcidas para hacerlo patente. De eso se encargan mano a mano la Conciencia y El Maestro del Corazón, como así llama ese camino Annie Marquier, e incluso así titula uno de sus libros, que podréis leer si así lo queréis, para ir descubriendo el verdadero capital humano del que formamos parte sin caer en la cuenta hasta que todo se desmorona y amenaza con aplastar todo. Menos revoluciones involutivas y más evolución plena, pacífica, cooperadora e integradora, dear family!

El Ser humano guarda en su interior un verdadero tesoro para descubrir y compartir. Para poder evolucionar del fenómeno humano saltando cuánticamente al medio divino. Podemos hacer milagros hasta con lo peor que nos encontremos, siempre que nosotr@s no olvidemos que el milagro está en marcha en lo más profundo del Ser humano. Ya lo dijeron con sus comportamientos y en su amor incondicional Shakiamuni y Jesusito de nuestras vidas, a los que hemos llamado Buda y Cristo: "El reino de los cielos está dentro de vosotr@s". Y es verdad. Sin la menor duda. Sólo tenemos que ponerlo en marcha y dejarlo fluir sin manipular ni hacer tonterías en plan egoppolio a tutipplén y suicidio garantizado como especie si la cosa no salta de plano por mayoría y nace de nuevo en un estado ontológico más sano, cuántico, accesible y lúcido, más Amor y Conciencia que destrozo constante y autómata. Ánimo, vamos al no-lío ¡Y ya veréis la que se monta para mucho mejor, ya!

Para más info aquí va esto: ACCEM | Listado Socios Club Calidad

Infancia y adolescencia migrante no acompañada

Si hay un colectivo de personas con el que trabajamos en situación de especial vulnerabilidad son los niños, niñas y adolescentes que han llegado solos/as hasta nuestro país.

Referidos en el argot técnico como ‘MENA’ (menores extranjeros no acompañados), estamos hablando de chicos y chicas menores de 18 años, migrantes, que se encuentran separados/as de sus padres y que tampoco están bajo el cuidado de ningún otro adulto.

Actualmente, y después de que la generalización del uso de este término (‘MENA’) en la esfera pública haya derivado en la deshumanización primero y la criminalización después de un colectivo en situación de extrema vulnerabilidad, debemos hablar de ellos y ellas como lo que son: niños, niñas y adolescentes que están solos/as y expuestos/as a un grave riesgo de exclusión y de desamparo.

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En España, la realidad de los niños y niñas migrantes que se encuentran sin acompañamiento adulto está mayoritariamente asociada a los países del Magreb y, en particular, de Marruecos y Argelia. Sin embargo, también están presentes en nuestro país menores no acompañados que han llegado procedentes del África Subsahariana, Europa del Este y Oriente Medio.

Entre los motivos que llevan a estos niños y niñas a salir de sus países de origen se encuentran la pobreza y la falta de futuro y expectativas; situaciones de desestructuración familiar y desprotección institucional; catástrofes naturales; la guerra, la persecución, la violencia y situaciones de violación generalizada de los derechos humanos.

“Adolescentes como todos/as”

Tienen las mismas inquietudes, aficiones, esperanzas y necesidades que el resto de adolescentes de su edad pero su entorno familiar para darles afecto, acompañamiento y seguridad está muy lejos.

Desde Accem hemos impulsado la sensibilización, capacitación e implantación en España del acogimiento familiar de estos chicos y chicas como una alternativa de inclusión, protección y bienestar para ellos/as.

> Para más información pincha aquí.

Hacemos

En Accem llevamos trabajando con niños y niñas en situación o riesgo de exclusión social desde hace más de 20 años, cuando en 1995 abrimos en Toledo el centro de acogida Albaraka. En todo este tiempo hemos proporcionado atención y acogida a menores en situación de desamparo, de origen autóctono y extranjero, tutelados por las distintas administraciones públicas, y hemos atendido específicamente al colectivo de niños y niñas migrantes que se encuentran sin acompañamiento adulto.

Ilustración mena Nuestra prioridad es garantizar la protección y el bienestar de cada niño y niña acogidos/as, su desarrollo personal y su inserción, potenciando su autonomía y actuando sobre los factores que dificultan los procesos de integración social y laboral. Es también nuestro cometido acercar a la ciudadanía la realidad de unos/as niños/as y jóvenes que tuvieron que tomar muy pronto decisiones de adultos/as; que aprendieron a sobrevivir en la adversidad y siguieron adelante; que tuvieron la valentía de soñar una vida mejor y se lanzaron en su busca. Pero que, a pesar de todo, siguen siendo niños, niñas y jóvenes en situación de especial vulnerabilidad, con necesidad de apoyo y protección y con una ilusión enorme por una oportunidad y un futuro.

Acogida y apoyo a la autonomía

Contamos con pisos y centros de acogida en Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha y Castilla y León. Son centros interculturales y abiertos, en los que ofrecemos a cada niño y niña una atención individualizada e integral, que responda a sus necesidades físicas, psicológicas, emocionales y sociales; en los que facilitamos el acceso a formación académica y ocupacional y desde los que impulsamos actividades de carácter cultural, lúdico y deportivo. En un ambiente normalizado e integrador, se potencia su autonomía y su inserción sociolaboral.

El desarrollo de nuestra labor y la experiencia acumulada nos llevaron a enfrentarnos a una realidad: cuando estos chicos y chicas llegaban a la mayoría de edad quedaban muy a menudo en una situación de desamparo y riesgo grave de exclusión social. Por este motivo comenzamos a impulsar programas y dispositivos orientados a jóvenes de entre 16 y 24 años que están a punto de incorporarse a la vida adulta pero que necesitan apoyos para culminar su proceso madurativo y conquistar su autonomía.

En Añón de Moncayo (Zaragoza) tenemos un centro de acogida con 14 plazas destinado a niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados. La ubicación del centro en la comarca de Tarazona orienta la intervención con los/as chicos/as hacia la inserción en el mundo rural, ofreciendo oportunidades reales de integración social y laboral y permitiendo también la renovación demográfica y el rejuvenecimiento de la comarca.

Por otra parte, llevamos a cabo el proyecto 17plus, en el que contamos con 37 plazas de acogida dirigidas a jóvenes migrantes no acompañados de más de 17 años, con un alto grado de autonomía y responsabilidad y que hayan tenido alguna medida de protección por parte del gobierno autonómico siendo aún menores. El objetivo es que su estancia en estos pisos sea un puente de transición hacia la vida totalmente independiente. El programa dispone actualmente de siete viviendas ubicadas en Zaragoza y Tarazona.

“Que me traten como a un niño”

Trepar paredes como Spiderman y marcar goles como Messi son sueños muy difíciles de lograr. Hay otros deseos que deberían estar al alcance de cualquiera. La campaña de Accem Que me traten como un niño, recuerda los derechos básicos de la infancia.

Vivir tranquilo; vivir en paz, son algunas de las respuestas que nos dieron ante las cámaras niños y adolescentes que han llegado hasta nuestro país sin la compañía de sus padres, madres y familiares. Piden que les tratemos como lo que son, menores que no han cumplido los 18 años.

Acogimiento familiar

Estamos trabajando a nivel estatal y europeo en explorar las posibilidades de desarrollar e impulsar el acogimiento familiar como una alternativa para apoyar a la infancia migrante no acompañada.

Conoce nuestro proyecto EPIC.
Descarga nuestro manual y kit de herramientas sobre “Acogimiento familiar y formas alternativas de asistencia a niños/as migrantes no acompañados/as y separados.
Conoce nuestra experiencia en el programa FOR_UM: el acogimiento familiar para la infancia migrante no acompañada, una medida en favor de la inclusión social
Escucha en este vídeo algunas experiencias de acogimiento familiar:

Derecho al asilo

Como entidad especializada en asilo, participamos en la red de expertos/as “Solidaridad de Responsabilidades”, desde la que impulsamos actividades de formación, sensibilización e incidencia en las que planteamos que los niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados pueden estar en condiciones de solicitar y recibir asilo.