lunes, 5 de marzo de 2018

Aquí y ahora. Ya!

Me resultan deleznables los agoreros, los que ante la realidad se emperran en aplicar su lupa de aumento o disminución, deformada por sus egos, fijaciones y delirios. 
Este lunes de marzo hay dos realidades europeas en un tiempo en que no pueden magrearse ni camuflarse a gusto del consumidor, contra los deseos de "los fabricantes del consentimiento": la derecha alemana no puede gobernar sin el apoyo del PSD y Berlusconi ha perdido las elecciones en favor de los movimientos populares de Izquierda que seguramente encontrarán apoyo para gobernar en los socialistas y comunistas del parlamento italiano...Lo bueno para Italia es que ni La Lega Nord fascista ni la corrupción con patas de Berlusconi han ganado suficiente terreno como para partir el bacalao, y eso también significa en plan lunghimirante, como dicen los italianos, que Macron y Merkel son insuficientes al servicio del capitalismo explotador de Europa, sin el apoyo de la izquierda no se comerán una rosca y tendrán como enemigo  opositor o compañera del desguace político y social a la ultraderecha xenófoba, racista y neonazi... Es el momento de la inteligencia y no de las quinielas y del "ya lo sabía yo con mi ojo de lince que todo lo controla desde los titulares en los que  no informo sino que opino, decreto y dejo caer lo que interesa ir sembrando en los receptores: el desconcierto y el miedo a que todo empeore con toda seguridad...Envenena y aturde, que algo queda, me han dicho los inversores de la empresa mediática que me paga. Y yo cumplo comodioshmanda" 
Es muy cansina esa letanía pseudoinformadora. La realidad habla en los hechos y en las omisiones, y hay que saber escucharla, no darle la vuelta y explicarla a pisotones de falsa lógica gañana antes de que se explique ella misma.
Europa tiene por delante la esperanza y la opción responsable de la supervivencia no sólo material sino sobre todo lúcida y consciente. Tenemos buena pasta, somos gente de bien mayoritariamente y no vamos a jugar al fútbol con encuestas sino a gestionar juntos desde la calle, los municipios y los parlamentos, el presente y el futuro que nos queda por delante como deber y patrimonio sin olvidar a quienes están sufriendo los efectos secundarios de los modi operandi de nuestras políticas internacionales jalonadas de abusos, torpezas, indecencias y confabulaciones con Wall Street y sus huestes insaciables a base de TTIPs, de TISAs y Trupms en diversos formatos.
Europa tiene una responsabilidad ineludible en los malestares históricos del mundo, que no puede quitarse de encima si quiere sobrevivir a sí misma: ha sido cuna de imperios depredadores, ha perpetrado durante siglos guerras de religión con la bendición participativa y fratricida del Vaticano, ha provocado dos querras mundiales, ha gestado y contagiado por el orbe terrestre los crueles totalitarismos del siglo XX y ahora paga su karma que no es nada comparado con el karma que están pagando las víctimas de la Europa de ayer y del "sueño americano" que hoy es la agonía de tantos pueblos del mundo. Leed a Varoufakis y a Chomsky, entre otros muchos clarividentes, y lo comprenderéis a base de cifras, datos testados, pelos y señales de toda índole tan ciertos como preocupantes. Sólo personas de izquierda se atreven a escribir y a enseñar esas certezas desnudas de adornos sin paliativos y desde la honestidad total.No tienen nada que perder porque no buscan ganar nada sino abrir mentes, voluntades y conciencias.

Europa se tiene que liberar de su basura barnizada de ejemplaridad cultural y bon vivant. Necesitamos más humildad y menos ínfulas, más visión y menos vendas en los ojos. Menos jarana y más ética. Necesitamos disfrutar como un bien vital, una izquierda inteligente que sepa crear lo que falta sin hacer la guerra a lo que sobra sino haciéndolo innecesario con una forma de vida mucho más sana, justa, limpia, transparente, sostenible  y gozosa. Y ya lo creo que existe esa izquierda, sólo hay que ver las urnas en Portugal, en Italia, en Grecia, en  Suecia, Noruega  y en Alemania, y en España el parlamento actual y los ayuntamientos, las mujeres y los pensionistas que suman algunos millones, quince, veinte, quizá más, no los he contado pero es seguro ques sumamos más que las derechas turbias en todo como en pucherazo de muchas clases, empezando por el nivel mediático-demoscópico-religioso-meapilas y rematando con el sistema d'Hontd.

 No, no sólo no ha desaparecido la izquierda europea, es que  está vivísima, gracias a los traumas que la derecha va causando por donde pasa porque la cerrazón no sabe ni puede comportarse de otro modo que no deje secuelas peores que sus recetas. No entiende nada más que el lenguaje especulador y sin alma de la competitividad y las apuestas del hombre de casino provinciano que tan acertadamente dibujó Antonio Machado en el fresco de sus versos. Es ese hombre de tarbenilla zafia o de casino cacique en variantes diversas, amiguista, chanchullero, tramposo, prepotente, machista, garrulo ilustrado, hortera cognitivo, egocéntrico y tan  rancio como inmaduro aunque tenga cien años, el que asume las mentiras de la comodidad y las propaga porque no entiende la vida de otra forma y está convencido de que sus entendederas son la única mirada digna de crédito y lo demás, mariconadas o idioteces, y no hablemos del cambio porque eso le desquicia todavía más, debido a la rigidez y tiesura con que se toma y defiende siempre a la greña, sus verdades intocables. 
Bien, pues hemos llegado al final de ese imperio patriarcal de la cutrez. O ellos o la vida. O ellos o la supervivencia. O ellos o la justicia y la igualdad, los derechos y los deberes...
Mujeres y hombres de izquierda son ahora mismo el equipo sanitario que debe afrontar la enfermedad social y política de Europa y del mundo. Son los que tienen en sus manos la vacuna y el antídoto, la homeopatía que cura sin hacer daño y fortalece el organismo social contra las infecciones y desgastes del malvivir, que gracias a ellos se puede convertir en salud para todas y todos. Izquierda, Linke, Gauche, Esquerda, Esquerra , Sinistra, Left-wing...

La expresión material del amor es la justicia empática, la igualdad creativa y solidaria. Y la belleza imprescindible de la ética. A mano izquierda, siempre, mientras la derecha no cambie de dirección a mejor. Y lejos de la dislexia. Los milagros a veces, existen si hay voluntad por parte de la gente...y eso permite los cambios adecuados al bien común, claro.

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