miércoles, 6 de septiembre de 2023

Necesitamos el Planeta tanto como el Planeta nos necesita para salvarse y salvarnos de la quema y de la hecatombe climática. El dinero no se respira, ni se bebe ni se come, ni entiende la Naturaleza. Hay que frenar la locura suicida de sus traficantes analfabetos en alma, luces, sana creatividad y conciencia despierta. Aquí va esta propuesta de Greenpeace para movilizar a la sociedad, explicando los daños que provoca esta empresa demoledora, rebautizada como REPSOL, para que no se la relacionase con el horror del que procede históricamente. Personalmente, la padecí en Puertollano durante parte de mi infancia y de mi juventud, desde los 5 hasta los 21 años, y puedo asegurar que desde siempre ha sido y sigue siendo un verdadero atentado ecológico de contaminación brutal, tanto para el medio-ambiente como para la salud de la ciudadanía. Cuando la fundaron en los años cincuenta, en plena dictadura franquista, se llamaba ENCASO (Empresa Nacional Calvo Sotelo. Combustíbles Liquidos y Lubricantes) Le pusieron como marca el apellido del político fascista ( José Calvo Sotelo) al que mataron en la segunda república tras un enfrentamiento muy bestia en el Parlamento y cuyo asesinato demoledor en cualquier democracia imaginable, se convirtió en la chispa que prendió el incendio de la Guerra Civil que, desde 1931 y de la mano de "los de siemppre", ya estaba a punto de caramelo amargo y tóxico. No es nada extraño que tal barbaridad haya producido, a lo largo del tiempo y con semejante empeño gestor, un desastre ecológico de tal envergardura. Ni la guerra ni las venganzas "justas" ni la sustitución de la ética por el salvajismo del castigo "legal" toma y daca, producen nunca algo mejor de lo que emiten y contagian esos pifostios. Sin luces ni alma, ni conciencia, ni valores humanos de verdad, lo más "natural" es que todo se convierta en un REPSOL terminator. Todo lo que no se soluciona cuanto antes con justicia, legitimidad, fraternidad, escucha, empatía, diálogo, paz, equilibrio, ética y cooperación humana, se acaba convirtiendo, antes o después, en miseria, en horror, en corrupción, en toxicidad a todos los niveles que se manifiesta en enfermedades sociales, físicas, mentales, climáticas, poliiticas y económicas 'in crescendo', sin parar en tiempos y espacios. Con tales antecedentes, no es nada extraño que semejante engendro explotador, siguiendo sus pautas de origen -de nada vale cambiar el nombre a la misma atrocidad para enmascararla- vaya causando por el mundo desastres como en Perú, empleando para colmo la mentira y la manipulación como máscaras publicitarias en el baile de disfraces de un carnaval tan inhumano y estúpido como suicida. Querida familia, leed con detalle los informes de Greenpeace, reflexionando y participando activamente en la movida imprescindible con nuestra firma en la propuesta, para que el Bien Común pueda disfrutar cuanto antes de una salud planetaria cada día más urgente, para la vida de nuestra propia especie y sus medios planetarios disponibles..✍️✍️✍️✍️✍️✍️👍👍👍🙏🙏🙏🙏🙏.

               El mundo necesita de nuestra ayuda.: Ecología y el medio ambiente

Repsol: No queremos más de vuestros sucios negocios.

© Pablo Blazquez / Greenpeace

Las empresas de combustibles fósiles -carbón, petróleo y gas- son, con diferencia, las que más han contribuido a nivel global al cambio climático. Su actividad representa más del 75% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero y casi el 90% de todas las emisiones de dióxido de carbono. Es hora de que paguen por sus sucios negocios.

Repsol y el resto de estas grandes corporaciones saben cuál es su papel en la crisis climática, pero lejos de frenar su escalada contaminante y destructiva, invierten todos sus esfuerzos en tratar de limpiar su reputación y vendernos una falsa imagen de empresas verdes y sostenibles. Quieren seguir arrasando el planeta y que creamos que lo están salvando. 

Pero su actividad es muy clara. Repsol es la empresa más contaminante de España, con unas emisiones anuales de ¡12,5 millones de toneladas de CO2! Es una cantidad un 16% mayor que años anteriores. No están frenando, están pisando el acelerador y siguen invirtiendo mayoritariamente en combustibles fósiles. 

Y eso no es todo, la historia de Repsol y sus competidoras es una historia de vertidos y violaciones de derechos humanos. El último ejemplo: el derrame de más de 11.000 barriles de petróleo en las costas de Perú, que causó la mayor catástrofe medioambiental de la historia del país. El vertido afectó más de 11.000 hectáreas de ecosistemas y, con ello, los medios de vida de más de 50.000 personas. Repsol mintió sobre la cantidad de petróleo vertida y el área afectada. Mintió también cuando un año después anunció que ya había limpiado toda la contaminación. A día de hoy sigue eludiendo su responsabilidad de restaurar los ecosistemas dañados y reparar de manera justa a las miles de familias que lo perdieron todo.

Destruyen nuestro planeta, y quieren convencernos de que lo salvan. Por eso exigimos de la empresas de combustibles fósiles que:

  • Detengan sus actividades que destruyen el clima, incluido el desarrollo de nuevos proyectos de combustibles fósiles
  • Admitan y se disculpen por sus crímenes.
  • Reparen y paguen por los daños que han causado

Basta ya de greenwashing. Basta ya de destrucción ambiental. Firma la petición. 

Repsol y el resto de compañías de combustibles fósiles son los mayores contaminantes del planeta, pero quieren seguir con su sucio negocio mientras mienten sobre su responsabilidad. No lo permitamos. Firma la petición y exige que se responsabilicen de los daños que están causando. 

264.692 firmas. ¡Ayúdanos a conseguir 500.000!

Política de privacidad

Quiero recibir información acerca de las campañas de Greenpeace y formas de participación. Al firmar, acepto la política de privacidad. Desde GREENPEACE ESPAÑA trataremos los datos aportados en calidad de Responsable del tratamiento con la finalidad de gestionar nuestra relación contigo, en pro de nuestros objetivos fundacionales, en base al consentimiento o a la ejecución de un acuerdo. Puedes ejercer tus derechos enviando un email a contacto.es@greenpeace.org con el asunto “Protección de Datos”. Más información.

No hay comentarios: