España o la entelequia del cap per avall

Vivir boca abajo nunca ha sido fácil, ni lógico ni cuerdo. Pero la voluntad de los seres humanos es una potencia correosa y tozuda en sí misma. No importa la condición ni el contenido que la motive; cuando esa energía se lanza al vacío y tira por la calle de en medio es una fuerza desatada de la naturaleza, que además tiene efectos secundarios porque provoca una visión deforme de la realidad  al revés, como producen la obsesión, la alucinación y las drogas. Puede llegar a ser una palanca muy peligrosa y un trampolín contra natura para las patologías mentales y emocionales. Y, por supuesto, al mismo tiempo que a la gente sana le proporciona recursos y resultados óptimos, esa voluntad desorientada, perdida y/o manipulada, a quienes están en estado deficitario de conciencia, de desarrollo psicoemocional, de educación y de valores humanos madurados y compartidos, les abduce y les desencuaderna, hasta dejarlos como un libro desparramado, sin pastas y con las hojas repartidas y desperdigadas por el primer viento que sopla; un libro fallido que no puede explicar nada sino frases sueltas como las incoherencias explicativas de Rajoy. Un proyecto humano fracasado y peligrosísimo si trepa por las rampas del poder y llega a la cumbre sin saber quién es, ni distinguir entre sus obsesiones, dogmatismos y fijaciones y sus deberes públicos institucionales, que es nuestro colectivo y penoso karma actual.

Así está ahora el mundo, pero sobre todo, y lo que más nos afecta, España como realidad geoantropológica sometida a un modelo de estado incompetente, que ha adquirido el mismo rumbo desnortado de la economía y la política del Planeta en general, pero con agravantes muy cañeros: España siempre y a lo largo de su historia ha sido una anormalidad en Europa. Un cap per avall, per se et tamen per accidens. Una anomalía en la genética de los tiempos. Nunca, colectivamente, ha sabido encontrarse con el gen de la conciencia. Una fuerza contundente pero perdida en su propio laberinto solo puede producir aguafuertes y pinturas negras de Goya o grandes iluminados que se exilian o se retiran de la circulación, escondidos en y aplastados por la vergüenza ajena. 

Tradicionalmente en este nodo confuso y orgulloso de su propia calamidad, la esperanza más importante es sobremorirse a sí mismos creyendo que eso es sobrevivir e incluso hacerlo con cierta dignidad resignada que han dado en llamar ley, orden y estabilidad inmutable. Es decir, organizando el desastrado  finiquito hereditario como una tarea cotidiana, y hasta como una obligación convertida en rutina y vanguardia de cafetín, donde todos despotrican contra lo que votan y viceversa, y en el fondo reconfortados porque nada pueda cambiar, como ya decían sus padres y sus abuelos. Con mucho más miedo a que cambie algo que ganas de mejorar y de poner en marcha algo más sano e inteligente, más sencillo y menos enrevesado, más convivible, pero que hay que construir y eso da una pereza...

Además si algo cambia alguna vez todos se revuelven en contra con sus aforismos: ya veremos lo que dura esto. Demasiado bueno para que dure. Quien bien te quiere te hará llorar; poco dura la alegría en la casa del pobre. Virgencita, que nos quedemos como estamos, que cualquier cambio seguro que es a peor. ¿Mejorando lo presente?, venga ya!con lo bien que se vive de las rentas del recuerdo y de las fantasías del futuro... ¿Crear algo nuevo ahora y aquí? Eso sí que no hay manera de que ocurra, ¿cuándo lo hemos visto, quién lo recuerda?. Mucho mejor escarbar en la tierra del ayer, como los perros, donde antes hubo algún hueso y ya no hay nada, pero queda el olor antiguo y la costumbre de rebuscar entre basuras amontonadas. Tú escarba que algo encuentras aunque solo sea el no pensar mientras lo haces, que también es encontrar algo, ¿no? 

En tales tesituras, la historia va a su aire dando forma al material humano que se encuentra por ahí. Va a su bola, sin que nadie le explique nada ni la haga reflexionar. Ya tiene bastante con el equipaje que arrastra: 

Neofeudalismo tecno, que entre Sísifo y Ave Fénix no da abasto.

Vejez política inmadura ¿o tal vez aquella fruta vana que apunta Antonio Machado?

Capitalismo dominante + Fascismo heredado

Ergo, izquierda bloqueada  

Estado laico pero menos, tanto como incompetente y dictatorial, donde no hay inteligencia ni lucidez se coloca la mediocridad y el automatismo de la rutina repetida ad infinitum

Conciencia missing con la lógica irresponsabilidad privada y pública, que hace necesarios los tribunales y la Guardia Civil hasta para ir al baño.

Ilegitimidad legalista con sus derivados inseparables:

Caciquismo, clientelismo, cleptocracia, burbujas varias, la mentira como gobierno, corrupción y crisis eterna. 

Toda esta basura se enmarca en un contexto global de miseria y  desbarajuste sin precedentes, en el nivel continental de una Europa sin rumbo social ni político cuya brújula y mapa es la moneda diseñada y sostenida a la medida de  Alemania. Y en un mundo pilotado por unos USA, cuyo timonel aberrante está loco y es votado por millones de descerebrados que han visto en él al avatar del milenio. Varoufakis los llama el Minotauro de Wall Strett. Y yo creo que se ha quedado cortísimo. El Minotauro al menos no tenía fans que le diesen el poder, le votasen, le aplaudiesen y le hiciesen presidente de Creta,al menos los cretenses sabían de qué iba el monstruo y no le jaleaban ni vitoreaban. Esto es mucho peor que el panorama de Minos, y aquí no hay Teseo que valga. Y además sería inútil, porque seguramente en este caso, ese Teseo aparentemente liberador, sería el siguiente tirano entronizado por sus agradecidos corifeos que acto seguido pasarían a la condición de víctimas y menú alimenticio.

Por estos derroteros España lo tiene crudísimo. Bastante más que cualquier otro país de la Europa mediterránea. 

Tenemos el laberinto monárquico con nuestro Minotauro real y su familia, paraguas de corrupción y enjuagues que además pagamos con cinco sueldos millonarios como si nos sobrase la pasta a tutiplén: los abuelitos eméritos, papi, mami y la nena. Más los gastos de casa, servidumbre, vacaciones en Roma, pero sin Audrey Herbup, la vespa y Gregory Peck y las comisiones por hacer negocios con las armas en países de cuento, como la Cueva de Alí Babá, con los cuarenta ladrones elevados a n y rentando  por todos los paraísos del mundo mundial. El conjunto terminator deriva inevitablemente a la derecha con efectos retroactivos:

Una monarquía encalomada de origen dictatorial  y  una farsa democrática igualmente impuesta desde fuera al final de la dictadura por Washington y Bruselas.

Imposibilidad de referendum para elegir modelo de estado, y mucho menos para elegir un estado federal. 

Economía vendida a la CE que nos ata durante años y nos roba la soberanía a cambio de comprarnos como balneario low cost, por medio de los "fondos de cohesión" que nos fueron servidos como narcótico en el banquete de un falso y teledirigido "estado de bienestar" 'socialisto' paneuropeo, que lo mismo crea empleo precario y explotador que lo suprime en un solo día con más de 200.000 desempleados de golpe. Esta Europa de diseño capitalista y de castas, no quiere ser una asociación política y federal de ciudadanos libres, esta Europa es un montaje de las clases dominantes que nos devuelve al feudalismo, al Sacro Imperio, al Imperio Prusiano de los siglos XIX y XX y al concepto milenarista hitleriano, en versión económico-financiera. En este cepo, España se deshace sin remedio. Pero su "clase política", salvo raras excepciones de IU sobe todo, no logra verlo. A la decencia de decir la verdad en esta época postverídica se la califica de radicalismo populista.

Los independentismos rupturistas -'que quieren romper Eshpaña'- son el grito desesperado de los pueblos ibéricos, de la conciencia social y plurinacional que ya no puede más; Catalunya sólo es la punta del iceberg.   Como dijo Jesús de Nazaret, aunque callen las voces por la fuerza, gritarán hasta las piedras.

No  permitamos que nos confundan con sus mensajes de catastrofismo. No es posible un país sin personas, un territorio vacío de sentido y de orientación. Un territorio a conquistar que sólo se mide en kilómetros, en estatutos y papeles, alejado de la realidad humana y natural,  y en el que no cuentan para nada las condiciones de vida, de justicia, de salud, de educación, de trabajo, libertades, derechos, cultura, ética, civismo y convivencia,en el que votar qué elegir para el bien común se considera un golpe de estado, cuando el golpe de estado es lo que nos está gobernando en contra de la democracia real, pisoteada en el mismo parlamento tomado al asalto por la manipulación armada de la mentira y la corrupción como gobierno que manipula "legalmente" pero sin legitimidad democrática mediante engaños y compraventa de mordidas, desde los ayuntamientos a los tribunales. ¿Qué más ruptura y destrozo de un país puede haber que algo semejante? 

Está claro que ese legítimo y noble derecho a elegir de los territorios geopolíticos y sociales, tiene el riesgo ya comprobado de que puede ser manipulado por un sector carca y corrupto como está pasando en Catalunya ahora mismo. Una Catalunya falsa que apoya a los corruptos iguales que los de Madrid o de Valencia o de Galicia, no será mejor que la España actual, que sí quiere y necesita una Catalunya valiente y fuerte a la cabeza de la reivindicación, pero también capaz de cortar lazos con la indecencia y el saqueo, capaz de establecer precedentes de liberación y de dignidad ciudadana y capaz de potenciar con su ejemplo un mismo movimiento de liberación federal en todo el territorio ahora deprimido, abusado y violado por un sistema de tan largo recorrido que se ha hecho uno con el tejido social y pseudopolítico de los territorios tan hermosos, ricos y buenos en su diversidad como Catalunya. Como Europa. Como el Planeta, nuestra casa universal, de la que no podemos desentendernos aunque lo más inmediato nos ocupe con una dedicación más directa. 

El rechazo, el desentenderse, crear abismos, agredirse, recurrir sólo al ego y al orgullo insidioso aunque sea colectivo, significa empobrecernos todos a la larga, aunque de momento parezca un legítimo sálvese quien pueda no lo es. Nunca nos salvamos solos. Todos somos la misma energía repartida en distintos envases y nos necesitamos en nuestra pluralidad necesaria y tan enriquecedora como valiosa. Lo que se aísla se muere antes porque pierde el sentido de la realidad compartida inevitablemente para sobrevivir. Es lo mismo que cerrar las puertas a los refugiados que también son nosotros-yosotros aunque no lo queramos ver. 

Hemos hecho un recorrido negativo por la realidad que nos amenaza. Ahora hagamos un hueco a las posibilidades de reforma y cambiemos el chip del destrozo por el de la esperanza y el convencimiento entusiasta de los cambios a mejor. No de las ilusiones, porfa, que ya estamos viendo su poca o ninguna consistencia.

No queremos rupturas traumáticas del estado, pero sí es necesaria una salida lo menos dolorosa posible para esta situación, por medio de una herramienta activa y urgente: una moción de censura consensuada entre la mayoría de formaciones políticas, para que este gobierno y ppartido corruppto desaloje las instituciones este mismo mes, a ser posible antes de octubre, está más que claro que lejos de aportar soluciones el pp sólo enreda y complica todo con sus infundios, bajezas de miras, insolvencia ética y política e incapacidad para gobernar en serio y en responsable. Conviene a todos que Podemos tenga la generosidad de posponer la revisión de su democracia interna hasta que el gobierno cambie de color. Que el Psoe agrande el horizonte de su visión y deje de hacer cálculos electorales para que un lado sea más potente que el otro, y que sea de verdad esa izquierda que dice ser y no una agencia gestora de carreras políticas sin responsabilidad de estado, sólo para sus asuntos como ha venido haciendo hasta ahora en su simulacro de oposición, con lo que ha permitido que el pp destroce España del todo en un cuatrienio sin que el Psoe se dé por aludido en su responsabilidad, dedicado  en cuerpo y alma al patchwork susanista de emergencia prosélita.

Tras echar al pp, el primer acuerdo debería ser la reforma urgente de la Constitución  a partir de un referendum estatal en el que se pueda elegir el modelo de estado. Una vez elegido éste, reparar los baches de la Carta Magna arreglando, reformando y quitando lo ya inservible y añadiendo lo que se haya acordado sobre todo en materia de soberanía y participación democrática donde la Asamblea ciudadana a nivel estatal tenga el papel y los derechos que le corresponden también a la hora de redactar la susodicha Carta Magna. A partir de ese momento, se convocan elecciones legislativas y territoriales  ya con un nuevo modelo constitucional ampliado y abierto a las reformas necesarias; en unos tiempos y circunstancias tan cambiantes cono las que vivimos, la cosa mejorará totalmente si admitimos que cambiar cuando las cosas no funcionan no sólo no significa desestabilizar, sino todo lo contrario, nada hay más desestabilizador y traumático sin remedio que empeñarse en no mover nada cuando todo se nos cae encima y estamos convencidos de que seguramente es algo irrelevante que se arreglará por sí mismo. 

La política, el estado y las instituciones, como las religiones o las ideologías, sólo son herramientas que nos deben facilitar la calidad de vida, el desarrollo material e inmaterial de nuestras mejores cualidades, y cuando sucede lo contrario, o sea, que las personas se convierten en herramientas al servicio del estado y son esclavizadas por una casta dominante que representa falsamente al estado y que ha hecho de su status un montaje jerárquico todopoderoso, es el momento de la re-implementación de la democracia y hay que cambiar lo que sea necesario sin fanatismos, sin apegos ansiosos, sin tapujos, sin violencia y sin miedo. 

Y se puede, claro que se puede. Pero hay que querer, remangarse y no posponer constantemente la toma de decisiones imprescindibles. Como en las enfermedades graves, cuanto antes se afronten y comience el tratamiento, antes se pueden curar. Pero hay políticos, como la mayoría de los españoles, que confunden la hipocondría, la desorientación y el canguelo con la prudencia y dejan que el mal, ya crónico y degenerativo, avance en el tejido social hasta causar daños irreparables y sin remedio.
Sin embargo, no hay que rendirse porque mientras hay vida y movimiento de conciencias, hay y habrá soluciones limpias y sanas que descubrir, con las que construir la sociedad que necesitamos en un mundo disparado irremisiblemente hacia el fin de una etapa histórica, geológica y climática. Un final de Era, un kaliyuga o edad de hierro, como dice el hiduísmo. Casi ná. Un trabajazo inmenso en el que ya no es posible seguir ppermitiéndonos ppesos muertos ni equipajes de luxe en over booking. 

Quienes hayan tenido la suerte o el empeño de comprender el Apocalipsis más allá del lenguaje hiperbólico y de las metáforas religiosas del susto o muerte, -que tampoco se han sabido traducir con facilidad desde la perspectiva del espíritu-, no estarán angustiados sino llenos de energía y de ganas de espabilar cuanto antes, ya saben que la Ciudad Nueva y la Nueva Humanidad no es una construcción de la burbuja inmobiliaria ni de una secta "iluminada" ni de ese nuevo orden mundial Bilderberg fashion, sino una sociedad producto de la conciencia colectiva y del empeño compartido del amor universal, de una nueva civilización alternativa que renace en medio del caos natural en época de choque de trenes por confusión en las vías y fin del viaje por agotamiento del combustible, por desgaste irreparable del convoy que ya no sirve para el transporte de pasajeros, porque son tantos y con realidades tan complejas que el utillaje y la maquinaria, el espacio y el tiempo conocidos no dan para más. Para eso la inteligencia cuántica nos va aportando el nuevo material de trabajo: nosotros mismos renacidos aquí y ahora. Para ayudarnos en esa tarea, ya están todas las dificultades maestras que hemos ido acumulando mientras creíamos alcanzar niveles de comodidad y confort excepcionales...Ya lo iremos viendo y asombrándonos al mismo tiempo. Pero mientras hay que currar a base de bien, construyendo lo nuevo mientras lo ya inservible de desmorona, sustituyendo el desgaste de las luchas por la siembra de la paz interior y exterior siempre activa y despierta, que para nada es sumisión, sino r-evolución (como ya propuso el 15M) y tomando decisiones pensando en el bien común antes que en el lucro, en el poder como droga y en el beneficio particular.