Tal cual, Bernie Vergara. La realidad no perdona el ilusionismo saltimbanqui. Una campaña electoral entre borregos, cerdos y sus hábitats solo puede producir estas cosechas en las huestes de Harvaravaca. Estaba engranjado, digo, cantado. De donde no hay nada es imposible que se pueda sacar algo decente que valga la democracia, la justicia y el bien común, como confirman los hechos implacablemente. ¿De qué vale ganar unas elecciones si el resultado será la debacle? Ainsss! Pobre Castilla y León. Pobres Esppañas...Señores, qué cruz, xd!